La oficina de la vicepresidenta Kamala Harris dijo que no se pondrá en cuarentena después de reunirse con legisladores demócratas de Texas que recientemente dieron positivo por COVID-19.
En un comunicado el sábado por la noche, la portavoz de Harris, Symone Sanders, dijo que “se determinó que la vicepresidenta y su personal presente en la reunión no estuvieron en riesgo de exposición porque no estuvieron en contacto cercano con aquellos que dieron positivo y por lo tanto no necesitan ser sometidos a pruebas o puestos en cuarentena».
Harris se reunió con algunos legisladores estatales de Texas el 13 de julio luego de que ellos abandonaran el estado para negar el quórum a los legisladores estatales republicanos para iniciar una sesión legislativa especial. Los demócratas dijeron que no tenían otra opción que salir de Texas para detener la aprobación de un proyecto de ley de reforma electoral que es favorecido por el Partido Republicano, mientras que el gobernador de Texas, Greg Abbott, y otros republicanos de alto rango dijeron que ellos serán arrestados y detenidos en cuanto regresen al estado de la estrella solitaria.
El Caucus Demócrata de la Cámara de Representantes de Texas confirmó el sábado que tres miembros demócratas dieron positivo por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino). Esto se produjo luego de que viajaran a Washington en un vuelo alquilado y proporcionaran una foto de ellos mismos—sin mascarilla—en el avión.
“El Caucus Demócrata de la Cámara está siguiendo todas las guías y protocolos [de los Centros para el Control de Enfermedades]. Este es un recordatorio sobrio de que el COVID todavía está con nosotros, y aunque las vacunas ofrecen una protección tremenda, aún debemos tomar las precauciones necesarias”, dijo el presidente del Caucus, Chris Turner, en un comunicado el sábado.
Sanders dijo además que “la vicepresidenta y su personal están completamente vacunados” y parecen no tener miedo de contraer el virus.
Harris apareció el miércoles junto al presidente Joe Biden y la canciller alemana Angela Merkel en un evento en la Casa Blanca.
Durante el fin de semana, funcionarios anónimos de la Casa Blanca dijeron que Harris tenía una cita médica programada en un hospital del área de Washington el domingo, el cual dijeron que no estaba relacionada con los diagnósticos de COVID-19. The Epoch Times se puso en contacto con la Casa Blanca para solicitar comentarios.
Mientras tanto, el fiscal general de Texas, el republicano Ken Paxton, le dijo a Newsmax el sábado que los demócratas podrían ser «arrestados tan pronto como regresen a suelo de Texas».
“Tenemos una minoría de demócratas que decidieron que no permitirán que ningún otro legislador vote, por lo que ni siquiera permitirán que otros legisladores cumplan con su deber”, agregó. «Esta es claramente una violación a la ley».
Pero los demócratas de Texas dijeron que su medida era necesaria para evitar la aprobación del proyecto de ley electoral respaldado por el Partido Republicano.
El representante Trey Martinez Fischer (D-Texas) dijo a CNN: “El mensaje es muy claro: Estados Unidos, necesitamos despertar, necesitamos preservar nuestra democracia, necesitamos una solución federal de derechos de voto, y la necesitamos ahora».
“Este es un momento de ahora o nunca. Mantenemos la línea en Texas y vamos a luchar con todas nuestras fuerzas. Pero incluso si solucionáramos este problema en Texas, no resuelve el problema para el resto de la nación”, dijo.
Mientras tanto, los republicanos dijeron que el proyecto de ley es necesario para proteger las elecciones futuras y restaurar la confianza del pueblo en ellas.
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