Inmigrantes ilegales enfrentan frío extremo para obtener ID que suponen les permitirá trabajar en NYC

Sin embargo, la tarjeta no es un permiso de trabajo como ellos esperan

Por Cristina Bazán
22 de enero de 2024 5:21 PM Actualizado: 22 de enero de 2024 5:21 PM

Inmigrantes ilegales han tenido que soportar las gélidas temperaturas en la ciudad de Nueva York, para intentar conseguir una identificación con la esperanza de obtener ciertos beneficios, entre ellos un trabajo, sin saber que sus expectativas podrían no cumplirse.

Los inmigrantes están tratando de conseguir la IDNYC, una identificación que permite a los residentes de la ciudad acceder a muchos servicios y programas, según información del gobierno local.

Los migrantes creen que la ID les permitirá cubrir algunas de sus necesidades prioritarias como obtener un empleo o atención médica, según varios informes de prensa.

Sin embargo, NYC.gov especifica que la identificación se debe presentar a los empleadores junto con una autorización para trabajar, lo cual significa que el problema no se resolverá solo con la tarjeta, ya que las autorizaciones para empleo las emite el gobierno federal. “La IDNYC por sí sola no confiere autorización de trabajo”, según el sitio web.

Al parecer, las confusiones sobre el acceso al empleo se han generado en parte por sugerencias del personal de los refugios en donde se hospedan los inmigrantes.

Noah Habeeb, director de la Clínica de Inmigración El Arca, ubicada en Manhattan, dijo que «una tarjeta IDNYC podría ayudar a alguien a solicitar autorización de trabajo, pero sólo en casos limitados que no se aplican a la mayoría de los migrantes», según cita el NewYork Times.

Muchos inmigrantes no tienen acceso a una asesoría legal o no logran acceder a la información en su idioma que ofrecen las autoridades, para despejar sus dudas sobre lo que pueden esperar o no del programa.

Además, el proceso por el que tienen que pasar los inmigrantes es muy complicado en estos momentos, porque las citas disponibles son limitadas y las filas para esperar sin cita son muy largas, por lo que tienen que esperar por varias horas.

También han tenido que exponerse a las inclemencias del tiempo y la nieve afuera de las oficinas de las autoridades emisoras, enfrentando temperaturas que han llegado a los -8ºC en los últimos días, sin que esto garantice que podrán obtener la tarjeta de residencia.

“Mis documentos, cuando yo pasé la selva, a mí se me perdieron todos”, dijo a VOA, Jennifer Solórzano, una inmigrante ecuatoriana. “No hay citas para el ID, a mí me pasa eso. Entonces, trato de ir de madrugada, pero dan un cierto límite de personas, entonces, hasta ahora no la podemos sacar porque hay demasiada gente”, agregó mientras esperaba afuera del Hotel Roosevelt, que funge ahora como albergue para inmigrantes y centro de procesamiento de las identificaciones.

Pero incluso si la obtuvieran esto no garantiza el acceso a los beneficios que esta ofrece, ya que depende de las organizaciones que los prestan, según el sitio oficial.

Qué esperar de la IDNYC

La identificación se otorga a los residentes de la ciudad de Nueva York mayores de 10 años y les permite el acceso a programas de viviendas asequibles y de atención médica, descuentos en medicamentos y servicios de transporte, todo a cargo del bolsillo de los contribuyentes.

La policía acepta esta identificación para emitir citaciones o multas de comparecencia en lugar de realizar un arresto; también permite el acceso a edificios públicos, como escuelas y los empleadores la pueden aceptar como identificación.

Asimismo les da la posibilidad de abrir una cuenta en ciertos bancos o cooperativas de crédito, ofrece acceso a museos e instituciones culturales, membresías y descuentos en supermercados, descuentos en actividades de entretenimiento y deportivas, entre otros.

Para poder solicitar de manera gratuita la IDNYC, las personas deben acreditar su identidad y residencia a través de un sistema de puntos para la documentación. Es decir, las personas que no cuenten con estos documentos no podrían tenerla.

Actualmente, unos 68,000 inmigrantes ilegales están a cargo del gobierno de la ciudad, que ha sido criticado recientemente por tomar medidas como privar de clases presenciales a niños, para albergar a los inmigrantes ilegales en escuelas durante las tormentas invernales.

Brindar alojamiento y los servicios básicos que ofrece la ciudad autodenominada “santuario”, representa una gran carga para los contribuyentes y había acumulado una deuda de más de 130,000 millones de dólares con los hoteles, hasta finales del año pasado.

“Ninguna ciudad debería estar pasando por esto, y no es sostenible”, dijo a principios de este mes el alcalde Eric Adams, quien ha pedido a la administración Biden que tome cartas en el asunto para solucionar la crisis migratoria que está afectando a los neoyorquinos.

Mientras tanto, un informe de la contraloría de la ciudad afirma que los inmigrantes están “beneficiando a nuestra economía”, ya que “apoyan el crecimiento económico, pagan impuestos y mantienen nuestra ciudad y nuestra economía funcionando como trabajadores esenciales”.

Todo esto ocurre en medio de una crisis migratoria que aqueja a la ciudad, que recibió más de 150,000 inmigrantes ilegales tan solo el año pasado. La mayoría de ellos son venezolanos, cuyos arribos llegaron a alcanzar entre 2000 y 3000 personas en una sola semana.

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