Un joven mexicano compartió un emotivo agradecimiento a su mamá por el gran sacrificio que hizo para ayudarle a cumplir su sueño de graduarse como ingeniero, demostrando que con esfuerzo, dedicación y valor se puede superar la adversidad para cumplir los objetivos propuestos.
Enrique Zapata Reyes, de 24 años, oriundo de Coahuila, se graduó en noviembre del año pasado como ingeniero mecatrónico del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores De La Región Carbonífera, pero demoró en recibir su diploma por la contingencia causada por el COVID-19:
Después de recibir el título, decidió tomar su diploma en mano y se dirigió al puesto ambulante de ropa de su mamá para tomarse fotografías y agradecerle por todo su esfuerzo.
Luego compartió las fotografías en una publicación en Facebook con un sentido mensaje, en el que aprovechó para agradecerle a Dios.
“Dios es muy bueno con nosotros, hace días recibí mi título como ingeniero y quise tomarme estas fotos en el toldito de la pulga con mamá”, afirmando que de esa venta salió el dinero para pagar el transporte, los materiales, libros y copias que requirió para mantener sus estudios.
También incluyó en su agradecimiento a todas las personas que en el camino contribuyeron a que lograra cumplir su meta.
“Muchas veces vendimos justo para el transporte o un poquito más pero Dios nunca nos dejó, agradezco a cada persona que nos compró un prenda de ropa, un par de zapatos, bolsas, etc, porque me ayudaron a qué este sueño fuera posible, además de todas las personas que me ayudaron en todo que siempre estuvieron para mí, el título es de ustedes”, destacó.
Además, Enrique hizo un llamado a toda la comunidad, invitándolos a adquirir productos elaborados localmente.
“De igual forma, quiero invitar a través de esta publicación que sigamos #consumelocal no sabemos si el elote, la empanada, el agua fresca o demás, sea para nuestros futuros ingenieros, arquitectos, doctores, maestros, etc”, agregó.
Una vida de amarguras
Enrique ha enfrentado muchos obstáculos en su vida. “Desde la infancia la vida me presentó un escenario con un tinte negro. Mi madre biológica falleció cuando yo apenas tenías dos años de edad”, dijo el joven a The Epoch Times.
“Posteriormente mi mamá se hizo cargo de mi y de todos los gastos, gracias a Dios y a su pulguita nunca sufrimos, si bien hubo días amargos, Dios siempre estuvo con nosotros”, añadió.
Pero los golpes no terminaban. Cuando Enrique tenía 17 años y estaba en la preparatoria, su papá falleció. “Ahí sentí un poco un bajón de fe, pero sin embargo mi mamá nunca me dejó caer, y el hecho de que Dios nunca nos dejó solos, ahí está, me titulé”, sostuvo Enrique y agregó que siempre se ha sentido acompañado por su familia.
La publicación de Enrique, que se hizo viral rápidamente, ha generado miles de reacciones de los internautas, y muchos acudieron a la sección de mensajes para felicitarlo por su grado y por su conmovedor gesto.
Uno escribió: “Muchas felicidades!! A ti, a tus padres, a tu familia ¡que siempre te apoyó! Mis respetos para tu señora madre que siempre confió en el trabajo y te encaminó a ser un hombre de bien”. Otro comentó: “Felicidades a tu mamá y de más personas que te apoyaron; pero la mayor felicitación es para ti que supiste valorar el sacrificio y esfuerzo de tu señora Madre. ¡Todo el éxito!”.
La historia de Enrique es un mensaje de esperanza para aquellos que están luchando por alcanzar sus sueño.
“Siempre luchen por sus sueños, que todo es posible con fe. Cuando más se sientan que es imposible, es cuando el camino más soleado está. Nunca se rindan, que si bien el estudio exprime tiempo, dinero y energía, los frutos cuando se llega a la cima del árbol son muy grandes”, concluyó el flamante ingeniero.
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