La exprimera dama y secretaria de Estado, Hillary Clinton, puede ser destituida por una demanda sobre el uso de un servidor de correo electrónico privado mientras estaba en cargo, dijo un juez federal en un fallo el lunes.
El juez de la corte de distrito Royce Lamberth concedió una solicitud a la organización conservadora de vigilancia Judicial Watch, autorizando al grupo a interrogar a Clinton y a otros sobre si ella llevó a cabo negocios del Departamento de Estado en un servidor de correo electrónico privado. La organización lleva años buscando correos electrónicos relacionados con el mortal ataque de 2012 en Benghazi, Libia.
«Cualquier descubrimiento posterior debería centrarse en si ella usó un servidor privado para evadir [la Ley de Libertad de Información] y, como corolario de eso, lo que ella entendió sobre las obligaciones de administración de registros del Estado», escribió Lamberth en su orden.
Lamberth dijo que el mantenimiento de registros «no explica suficientemente el estado mental de la Secretaria Clinton cuando decidió que sería una práctica aceptable establecer y utilizar un servidor privado para llevar a cabo los negocios del Departamento de Estado».
El juez, quien fue designado por el expresidente Ronald Reagan, señaló que Clinton, quien postuló para presidente sin éxito en 2008 y 2016, respondió a preguntas escritas en otro caso. Pero Lamberth dijo que sus respuestas fueron «incompletas, inútiles o superficiales en el mejor de los casos», mientras que dejó «muchas más preguntas que respuestas».
Finalmente, el FBI investigó y recomendó cargos criminales contra Clinton solo unos meses antes de las elecciones de 2016. Sin embargo, la agencia encontró docenas de mensajes en la cuenta de Clinton que, según las autoridades, tenían información altamente clasificada.
Pero «incluso años después de la investigación del FBI, el lento goteo de nuevos correos electrónicos aún no se ha explicado», escribió Lamberth.
Lamberth dijo que Clinton todavía necesita responder varias preguntas relacionadas con sus correos electrónicos: “¿Cómo llegó a su creencia de que sus correos electrónicos de servidores privados serían preservados por los procesos normales del Departamento de Estado para la retención de correos electrónicos? ¿Quién le dijo eso, si alguien, y cuándo? ¿Se dio cuenta de que el Estado estaba respondiendo «sin registros» a las solicitudes de FOIA [Ley de Libertad de Información] de sus correos electrónicos? De ser así, ¿sospechaba que tenía la obligación de revelar la existencia de su servidor privado a aquellos en el Estado que manejan las solicitudes de FOIA? … ¿Y por qué pensó que, en primer lugar, la ley permitía usar un servidor privado para realizar negocios del Departamento de Estado?»
Cheryl Mills, exasistente de Clinton, exjefa de gabinete, ahora puede ser depuesta bajo la orden de Lamberth. El juez también aprobó una citación a Google para cualquier correo electrónico de Clinton que pueda tener en sus servidores.
Lamberth colocó un cronograma de 75 días en la recopilación de declaraciones y pruebas relacionadas con el caso.
El lunes, el jefe de Judicial Watch, Tim Fitton, volvió a publicar un video de Twitter del año pasado sobre el caso: «Quiero saber» si se pueden encontrar los «correos electrónicos» de Clinton. Fitton había explicado que los abogados de Judicial Watch pudieron descubrir más información sobre su servidor de correo electrónico luego de que el FBI y el Congreso no pudieron hacerlo.
Clinton y Mills no han emitido comentarios públicos sobre el último fallo.
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