Kiev dijo que Moscú es culpable de arrastrar a Minsk a la guerra después que una andanada de misiles fue disparada el sábado desde Bielorrusia. El ataque se presentó a pesar de que Bielorrusia se ha mantenido oficialmente fuera del conflicto.
Alrededor de las 5 a.m. del 25 de junio, 20 cohetes alcanzaron el pueblo de Desna, en la región norteña de Chernihiv, en Ucrania, según el comando militar del norte del país. El bombardeo dañó la infraestructura de la ciudad, pero no se han reportado víctimas.
“El ataque de hoy está directamente relacionado con los esfuerzos del Kremlin para atraer a Bielorrusia como cobeligerante a la guerra en Ucrania”, dijo el servicio de inteligencia ucraniano, según AFP.
Desna es un pueblo que se encuentra a unas 43 millas al norte de Kiev, y a una distancia similar de la frontera con Bielorrusia, con una población de cercana a los 7500 habitantes.
Se dispararon cohetes desde tierra y desde el aire. Después de despegar de una base aérea rusa, seis bombarderos dispararon 12 misiles de crucero desde Petrykaw, una ciudad bielorrusa. Las fuerzas rusas también alcanzaron objetivos en las regiones de Kiev y Sumy. Esta es la primera vez desde la invasión que el ataque proviene del territorio bielorruso.
“Rusia disparó un número récord de misiles contra Ucrania esta noche y esta mañana: Más de 60, según las últimas cifras. Muchos fueron lanzados desde el territorio de Bielorrusia. Apuntaron a las regiones de Kiev, Leopolis, Zhytomyr, Chernihiv, Khmelnytskyi, Dnipro, Mykolayiv, Kharkiv”, dijo el sábado la periodista Olga Tokariuk en una publicación de Twitter.
The Epoch Times se ha comunicado con el Ministerio de Defensa de Rusia en busca de comentarios.
Bielorrusia se ha mantenido como un aliado incondicional de Rusia, lo que ha provocado la condena generalizada y las sanciones de las potencias occidentales tras la incursión militar rusa en Ucrania. El país ha proporcionado apoyo logístico a los militares rusos, principalmente durante los primeros días de la invasión.
Partidarios acérrimos
Los últimos ataques se producen durante las fechas en que el presidente ruso, Vladimir Putin, tenía previsto reunirse en San Petersburgo con su homólogo bielorruso, Alexander Lukashenko. El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, también tiene previsto visitar Bielorrusia los días 30 de junio y 1 de julio.
Como firme partidario de Rusia, el régimen autoritario de Lukashenko ha gobernado Bielorrusia desde 1994 y acusó a Ucrania de promover el nazismo a nivel estatal, una acusación común de Rusia para justificar su invasión al país.
El respaldo de Putin le ha permitido a Lukashenko seguir siendo el presidente europeo con más años en el cargo y superar las impugnaciones a su mandato.
“Esta mañana, el ejército [ruso] llevó a cabo un despreciable ataque contra [Ucrania] desde el territorio de Bielorrusia, tanto desde tierra como desde el aire. Los bombarderos rusos, sin entrar en el espacio aéreo de Ucrania, bombardearon ciudades en las regiones de Zhytomyr y Chernihiv. Lukashenko muestra su lealtad antes de reunirse con Putin hoy?, escribió Franak Viacorka en una publicación de Twitter.
Viacorka es asesora de Svetlana Tikhanovskaya, la principal líder opositora de Lukashenko, quien se vio obligada a abandonar Bielorrusia y residir en Polonia después de las elecciones presidenciales de 2020. Aunque los resultados oficiales dieron la mayoría a Lukashenko, hubo denuncias de fraude generalizado. Lukashenko reprimió las protestas posteriores.
Los ataques con misiles del sábado se realizaron con bombarderos supersónicos Tu-22M3, según la inteligencia ucraniana. En total, se dispararon 48 misiles de crucero contra Ucrania, dijo Mykhailo Podolyak, asesor del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
