La Casa Blanca evitó las preguntas relacionadas con una investigación en curso del Departamento de Justicia (DOJ) sobre el hijo del presidente Joe Biden, Hunter Biden, y a su ordenador portátil descubierto por los periodistas en 2020.
El ordenador portátil contendría correos electrónicos que detallan cómo Hunter utilizaba el poder político de su padre como influencia en negocios en el extranjero. Fue reportado por primera vez por el New York Post durante el fragor de las elecciones presidenciales de 2020.
A raíz de un informe del New York Times publicado esta semana, que afirma autentificar los correos electrónicos citando fuentes anónimas, el jueves se le preguntó a la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, si el presidente cambió su opinión de que la historia del Post era «un montón de basura» y «una infiltración rusa».
«Yo lo remitiría al Departamento de Justicia y también a los representantes de Hunter Biden. Él no trabaja en el gobierno», respondió Psaki.
Cuando se le presionó sobre si mantenía su valoración de octubre de 2020 de que la historia del Post era «desinformación rusa», Psaki dio una respuesta idéntica.
«Yo lo remitiría al Departamento de Justicia y a los representantes de Hunter Biden. Soy portavoz de Estados Unidos. Él no trabaja para Estados Unidos», dijo la secretaria de prensa.
El artículo del Post, que cita los correos electrónicos, describe cómo Hunter presentó a su padre, el entonces vicepresidente Joe Biden, a un alto ejecutivo de una empresa de energía de Ucrania, Burisma Holdings, menos de un año antes de que el mayor de los Biden presionara al gobierno ucraniano para que despidiera a un fiscal que estaba investigando a la compañía.
El trabajo previo del menor de los Biden con Burisma suscitó preocupaciones por el conflicto de intereses y fue el punto de discordia planteado por el expresidente Donald Trump en una llamada con el presidente ucraniano Volodimir Zelenski que desencadenó los acontecimientos que llevaron al primer impeachment contra Trump.
Psaki y varios otros altos miembros de la campaña electoral de Biden, citando una carta firmada por decenas de exfuncionarios de inteligencia, desestimaron la historia del Post como «desinformación rusa» cuando se publicó semanas antes de las elecciones de noviembre de 2020. Twitter y Facebook prohibieron los enlaces al artículo del Post antes de dar marcha atrás días después bajo la presión de los republicanos que acusaron a los gigantes tecnológicos de censura política sesgada.
El New York Times, que inicialmente se refirió a la historia del Post como algo «sin fundamento», publicó un informe el miércoles sobre la investigación federal en curso de las declaraciones de impuestos de Hunter, afirmando haber autenticado los correos electrónicos de la computadora portátil de Hunter mientras citaba fuentes anónimas. El artículo del Times también detalla la comunicación entre Hunter Biden y los ejecutivos de Burisma para organizar una reunión con el entonces vicepresidente Joe Biden.
Ni el Departamento de Justicia (DOJ) ni la representación legal de Hunter Biden respondieron a las solicitudes de comentarios sobre la publicación de esta historia.
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