Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos revocaron una recomendación anterior y redujeron el número de días de aislamiento para los estadounidenses que contraen COVID-19 de 10 a 5 días, independientemente del estado de vacunación.
La agencia acortó igualmente el tiempo que los contactos cercanos de COVID-19 necesitan para estar en cuarentena. Las autoridades de los CDC afirmaron que sus últimas orientaciones están en consonancia con las cada vez más numerosas pruebas que sugieren que quienes contraen el virus del Partido Comunista Chino (PCCh) son más infecciosos dos días antes y tres días después de la aparición de los síntomas.
Los CDC dijeron que el aumento de la variante ómicron en Estados Unidos impulsó el último cambio de orientación. La directora de los CDC, Rochelle Walensky, dijo el lunes a The Associated Press que Estados Unidos experimentará muchos más casos de ómicron.
«No todos esos casos van a ser graves. De hecho, muchos van a ser asintomáticos», dijo a la agencia de noticias. «Queremos asegurarnos de que existe un mecanismo por el que podemos seguir manteniendo el funcionamiento de la sociedad de forma segura mientras seguimos la ciencia».
Desde la aparición de la nueva variante en el sur de África el mes pasado, solo se ha informado de una muerte por ómicron hasta ahora en Estados Unidos. Las autoridades de Texas informaron de que un hombre del condado de Harris murió aparentemente a causa de esta variante la semana pasada.
Según un análisis reciente de los casos y las hospitalizaciones por COVID-19 en Estados Unidos, la tasa de hospitalización por ómicron parece ser muy inferior a la de las variantes anteriores.
Alrededor de 64,000 estadounidenses fueron hospitalizados con COVID-19 en Navidad, es decir, el 25 de diciembre, según datos del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. Esta cifra representa un aumento de aproximadamente el 3% respecto a la semana anterior, en la que fueron hospitalizadas unas 62,000 personas el 18 de diciembre.
Sin embargo, es muy inferior a los picos de mayor hospitalización que se produjeron durante la oleada del delta y aproximadamente la mitad del récord de hospitalizaciones de enero de 2021. El 1 de septiembre, unas 98,000 personas fueron hospitalizadas en Estados Unidos debido a la oleada de delta, y el 14 de enero de 2021, más de 133,000, según los datos.
Pero Walensky, en un comunicado publicado en el sitio web de los CDC el lunes, advirtió que ómicron «tiene el potencial de impactar en todas las facetas de nuestra sociedad» y pidió a la población que se vacune o reciba una vacuna de refuerzo. También recomendó que lleve una mascarilla en los espacios públicos cerrados, independientemente de su estado de vacunación.
La semana pasada, los CDC también flexibilizaron su recomendación de que los trabajadores sanitarios no trabajen durante unos 10 días si dan positivo en las pruebas del virus del PCCh. Las nuevas recomendaciones sugieren que los trabajadores sanitarios pueden volver al trabajo después de siete días si el resultado de la prueba es negativo y no presentan síntomas.
El tiempo de aislamiento, añaden los CDC, puede reducirse a cinco días si hay escasez de personal en los centros.
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