Una mayoría de los estadounidenses cree que el presidente Joe Biden actuó de forma ilegal o poco ética en la forma en que gestionó los negocios internacionales de su hijo, Hunter Biden.
La pregunta planteada a los adultos estadounidenses por los encuestadores de AP-NORC fue la siguiente: «En lo que respecta a los negocios en el extranjero del hijo de Joe Biden, Hunter, ¿cree que Joe Biden ha hecho algo ilegal, o ha hecho algo poco ético pero no ilegal, o cree que no ha hecho nada malo?».
En general, el 35 por ciento de los adultos estadounidenses que respondieron dijeron que piensan que el presidente Biden ha hecho algo ilegal, mientras que el 33 por ciento dijo que hizo algo poco ético.
Hubo una proporción partidista en los resultados. La mayoría de los republicanos (65%) dijeron que creen que el presidente Biden hizo algo ilegal en lo que respecta a los negocios de su hijo, mientras que la mayoría de los demócratas (58%) dijeron que no creen que el presidente haya hecho nada malo.
La supuesta implicación del presidente Biden en el punto de mira
Aunque el presidente Biden ha negado cualquier implicación en los asuntos empresariales de su hijo, el Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, dirigido por el Partido Republicano, ha hecho públicos más de 20 ejemplos de pruebas que vinculan al presidente con los negocios de Hunter Biden.
«Cada vez hay más pruebas de que Joe Biden participó en los planes de tráfico de influencias de su familia, incluso mientras ocupaba el cargo de vicepresidente», afirmó el comité en un comunicado.
«Los demócratas y sus aliados de los medios corporativos continúan ignorando esta abrumadora evidencia mientras buscan distraer al pueblo estadounidense de la corrupción de la familia Biden», agregó el panel.
Durante la campaña electoral, el entonces candidato a la presidencia, Joe Biden, insistió en que no tenía ningún papel en los negocios de su hijo. Pero los cimientos de esa afirmación se han visto sacudidos, primero por las revelaciones del contenido de la laptop de Hunter Biden, después por las declaraciones de su exsocio Tony Bobulinski y, más recientemente, por las explosivas revelaciones de Devon Archer, exsocio de Hunter Biden.
El Sr. Archer concedió una entrevista a puerta cerrada a los miembros del Comité de Supervisión y Responsabilidad de la Cámara de Representantes a finales de julio, en la que afirmó que el presidente habló con los socios comerciales de su hijo en múltiples ocasiones.
Una nota de algunas de las revelaciones clave del Sr. Archer en el testimonio a puerta cerrada del 31 de julio incluye que el Sr. Hunter Biden puso a su padre, que entonces era vicepresidente, en el altavoz durante las reuniones de negocios más de 20 veces y que el mayor de los Biden fue puesto en la llamada para vender «la marca».
Mientras que los republicanos consideraron el testimonio del Sr. Archer como una prueba de que el presidente mintió cuando negó su implicación en los negocios de su hijo, los partidarios del presidente insistieron en que las conversaciones equivalían a pequeñas charlas «casuales» y que, como mucho, el Sr. Hunter Biden había vendido la «ilusión de acceso» a su padre y no el verdadero negocio.
La Casa Blanca restó importancia al testimonio del Sr. Archer, y su portavoz Ian Sams dijo que no aportaba el tipo de pruebas contundentes de irregularidades que afirmaban los republicanos.
«Parece que el propio testigo de los republicanos de la Cámara de Representantes, tan publicitado hoy, declaró que nunca oyó que el presidente Biden hablara de negocios con su hijo o con los socios de su hijo ni que hiciera nada malo», dijo el Sr. Sams en un comunicado en aquel momento.
Pero más tarde, en una entrevista con Tucker Carlson, el Sr. Archer dijo que las afirmaciones del presidente Biden de no haber participado en los negocios de su hijo son «categóricamente falsas».
«Estaba al corriente de los negocios de Hunter. Se reunió con los socios comerciales de Hunter», dijo el Sr. Archer. Insistió en que la afirmación de que el presidente no estaba implicado en modo alguno en los negocios de su hijo «no es correcta desde el punto de vista de los hechos».
Aún así, al igual que hizo durante su testimonio ante el Congreso, el Sr. Archer hizo algunas advertencias.
«En el mismo sentido, no hay … No creo que Joe Biden haya mirado un balance o una tabla de capitalización o lo que sea o cualquier documento financiero probablemente nunca», dijo el Sr. Archer, sugiriendo que la participación del presidente en los asuntos de negocios de Hunter Biden puede haber tenido un papel más representativo que práctico.
Los republicanos de la Cámara de Representantes han iniciado una investigación de impeachment contra el presidente Biden por sus presuntos vínculos con los asuntos empresariales de su hijo.
Investigación de impeachment de Biden
Al anunciar la investigación de impeachment a mediados de septiembre, el entonces presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy (R-Calif.), dijo que el presidente Biden mintió sobre su conocimiento de los negocios de su familia en el extranjero.
«Testigos presenciales han declarado que el presidente se unió en múltiples llamadas telefónicas y tuvo múltiples interacciones, cenas, que resultaron en coches y millones de dólares en las [cuentas] de su hijo y de los socios comerciales de su hijo», dijo McCarthy en una conferencia de prensa el 12 de septiembre.
«Sabemos que los registros bancarios muestran que casi 20 millones de dólares en pagos fueron dirigidos a los miembros de la familia Biden, y asociados, a través de varias empresas fantasma. Sólo el Departamento del Tesoro tenía más de 150 transacciones en las que participaban la familia Biden y otros asociados comerciales que fueron señaladas como actividad sospechosa por los bancos estadounidenses», añadió.
«Incluso un informante de confianza del FBI ha denunciado un soborno a la familia Biden. Biden utilizó su despacho oficial para coordinar a los socios comerciales de Hunter Biden sobre el papel de Hunter en Burisma, la empresa energética ucraniana», continuó el Sr. McCarthy.
Durante la primera audiencia de impeachment el 28 de septiembre, los testigos dijeron que las pruebas descubiertas hasta ahora sugieren una mala conducta por parte de la familia Biden, aunque se necesita más para apoyar el impeachment del presidente.
«Aunque creo que está justificada una investigación de impeachment, no creo que las pruebas cumplan actualmente el estándar de delito grave y falta necesario para un artículo de impeachment», testificó Jonathan Turley, profesor de Derecho de la Facultad de Derecho de la Universidad George Washington.
En un memorando dirigido a los republicanos publicado antes de la primera audiencia, los líderes del Partido Republicano señalaron que han reunido pruebas de que la familia Biden y sus asociados recibieron más de 24 millones de dólares entre 2014 y 2019. El presidente Biden fue vicepresidente hasta principios de 2017.
El dinero se transmitió «a través de una cadena de transacciones extremadamente compleja que dificultó el seguimiento del flujo de estos fondos», dijeron en el memorando.
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