Muchos estados han llamado para preguntar sobre la organización de la Convención Nacional Republicana en medio de una posible reubicación de la reunión programada en Carolina del Norte, dijo el martes la presidenta del Comité Nacional Republicano (RNC), Ronna McDaniel.
Los funcionarios republicanos dicen que quieren mantener la convención en Charlotte, pero se resisten a la negativa del gobernador demócrata Roy Cooper de hacer promesas con respecto a la capacidad del lugar.
«El presidente tiene razón al decirle al gobernador que debe asegurarnos antes de que cerremos todas estas habitaciones de hotel y llevemos todos estos ingresos a su estado que nos permitirá celebrar esta convención», dijo McDaniel durante una aparición en «Fox & Friends».
«Hay muchos estados que están llamando al presidente en este momento diciendo, oye, ¿por qué no traes esos ingresos a nuestro estado», agregó.
Cooper no ha dado las garantías que los funcionarios del partido dicen que necesitan.
“Todos los estados con los que hablamos dicen: ‘queremos nominar al presidente aquí’. Están muy emocionados de tener eso”, dijo McDaniel más tarde. «Pero este gobernador se presenta para la reelección, no nos ha dado las garantías que necesitamos, tenemos que ser capaces de avanzar de manera concreta».
Las reuniones en interiores en Carolina del Norte tienen actualmente un límite de 10 personas bajo severas restricciones destinadas a frenar la propagación del virus del PCCh (Partido Comunista Chino).
En un comunicado a The Epoch Times sobre la situación, un portavoz de Cooper dijo: «Los funcionarios de salud estatales están trabajando con el RNC y revisarán sus planes a medida que tomen decisiones sobre cómo celebrar la convención en Charlotte».
«Carolina del Norte se basa en datos y ciencia para proteger la salud y seguridad pública de nuestro estado», agregó el portavoz en la declaración por correo electrónico.
Las respuestas tendrán que llegar «más temprano que tarde», dijo un portavoz del RNC a The Epoch Times, «o nos veremos obligados a considerar otras opciones».
El vicepresidente Mike Pence nombró a Texas, Florida y Georgia como estados que han estado progresando con las reaperturas. Funcionarios u oficiales del partido de todos esos estados emitieron declaraciones pidiendo al RNC que las considere si se cambia la convención.
«Florida se compromete a garantizar un evento seguro y exitoso para el presidente Trump y todos los asistentes», dijo Joe Gruters, presidente del Partido Republicano de Florida.
El gobernador republicano de Georgia, Brian Kemp, dijo que el estado tiene «instalaciones, restaurantes, hoteles y mano de obra de clase mundial», mientras se comunicaba con Trump en Twitter para decirle «Georgia tendría el honor de ser sede de la Convención Nacional Republicana».
James Dickey, quien encabeza el Partido Republicano de Texas, dijo en un comunicado a los medios de comunicación que Texas «daría la bienvenida al presidente Trump y a la Convención del RNC».
«Hasta entonces, con base en el progreso del gobernador Abbott en la apertura de Texas, estamos en camino para nuestra convención estatal como se planificó en persona en Houston en julio», agregó.
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