Un ovcharka gigante insiste en que es un perrito faldero, ¡pero pesa casi 200 libras!

Por Tyler Wilson
08 de marzo de 2024 4:16 PM Actualizado: 08 de marzo de 2024 4:16 PM

Yogi es un ovcharka que mide 1.80 y pesa casi 200 libras, pero está seguro que es un perro faldero. Imagina las reacciones de sus seguidores de Internet, lo aman.

Cuando Laura Murphy, una ama de casa de 33 años, pasea con su familia por las calles de Boston (Massachusetts), la gente no puede evitar voltear a mirar a Yogi.

«La gente cree que estamos paseando a un león, un oso o algo así», cuenta la Sra. Murphy The Epoch Times. «Paran sus coches. Dejan de hacer lo que estén haciendo para preguntar: ‘¿Qué es eso? ¿Qué es? ¿Puedo tomarle una foto?'».

Yogui con la Sra. Murphy y su hijo. (Cortesía de Laura Murphy)

Aunque Yogi y su raza —también conocidos como pastores caucásicos— dejan perpleja a la gente, la familia Murphy sabía exactamente en lo que se metía cuando se sometió al extenso proceso de traer a Yogi a Estados Unidos.

Yogi, que cumplirá 5 años en julio, vino de Rumanía. El gentil gigante, que solo tenía 10 semanas cuando fue acogido en casa de los Murphy, tuvo que tomar dos vuelos, el primero a Francia y el segundo a Boston.

Además del largo viaje, los Murphy tuvieron que demostrar al criador que estaban preparados para cuidar de un perro tan singular. Tenían que demostrar que su casa y su jardín tenían espacio suficiente para un animal del tamaño de Yogi. También tenían que demostrar que disponían de un sistema de adiestramiento. Si no se cumplían los criterios anteriores, dijo la Sra. Murphy, «simplemente pasarían a otro que demostrara ser más serio con la raza».

Sin embargo, la familia Murphy superó con éxito el agotador proceso de llevar a Yogi a través de las fronteras internacionales. Llevaban tiempo interesándose por esta raza después de haber tenido otras. Los ovcharka caucásicos tienen fama de ser buenos perros de familia que también pueden trabajar bien en una granja y tienen un fuerte instinto guardián.

Afortunadamente cumplían todas las condiciones, y tras una exhaustiva búsqueda, encontraron un criador de Rumanía.

Yogi, que lleva ya casi cinco años con la familia, ha creado profundos lazos con cada uno de ellos, pero comparte un vínculo bastante especial y único con el marido de la Sra. Murphy, Brayden Murphy, un fontanero de 32 años, y con su tercer hijo, Donovan, que ha crecido junto a Yogi.

La actividad favorita de Yogi es luchar con el Sr. Murphy cuando llega a casa del trabajo.

«Para otras personas, su forma de hablar y gruñir puede dar miedo», dice la Sra. Murphy. «Pero solo está jugando, y me encanta verlos saltar y luchar entre ellos».

Yogui con el Sr. Murphy. (Captura de pantalla/Viralhog)

Yogi no solo se ganó el cariño de su familia con sus payasadas, sino que también ha captado la atención de millones de personas en todo el mundo a través de las redes sociales. La Sra. Murphy habló de uno de sus vídeos que se hizo viral: «Era un vídeo en el que Yogui se sube al sofá, y se tumba sobre mi hijo mayor, que estaba sobre una bonita manta, … y tuve que sacar a mi hijo que quedó debajo de él. … no tenía ni idea de lo que estaba haciendo y de que se estaba acostado encima de mi hijo».

Aunque Yogi pesa 90 kilos, le encanta acurrucarse junto a su familia, y a los Murphy también les encanta.

«Sigue pensando que es muy pequeño y que no nos va a aplastar con su peso», asegura la Sra. Murphy. «Simplemente lo acepto porque creo que es muy gracioso, y me encanta que quiera estar con nosotros porque son muy independientes».

La Sra. Murphy realmente saborea cada recuerdo con Yogi y disfruta documentando sus travesuras.

Según los Murphy, cada día es un recuerdo feliz con él», dice. «Espero que tengamos muchos más años felices con él».

Yogui con los niños Murphy (Cortesía de Laura Murphy)

Aunque los vídeos de Yogi han recibido hasta 20 millones de visitas, hay razones mucho más profundas y significativas por las que los Murphy adoran tanto a su «gran osito de peluche».

Según la Sra. Murphy, Yogi se toma muy en serio su trabajo de perro guardián. Disfruta protegiendo a la familia y la casa y se asegura de que estén a salvo ayudando a mantener alejados de la propiedad a posibles intrusos, como ardillas, coyotes y conejos.

«Sé que estamos seguros con él mientras esté en casa», dice la Sra. Murphy. «Creo que todo el vecindario está seguro mientras él esté cerca».

En general, Yogi es muy simpático y alegre cuando saluda a la familia Murphy. Pero a los repartidores mueren del susto cuando ven semejante bestia saltando por la ventana.

«Han venido un par de tipos que han terminado sentados en el piso», dice la Sra. Murphy. «No esperaba ver a un animal tan grande saltar así por la ventana».

(Cortesía de Laura Murphy)

Yogi también ha formado parte de algunos momentos familiares preciosos con los Murphy.

Cuando la Sra. Murphy estaba embarazada de su cuarto hijo, Lehan, Yogi se pegó a ella como si supiera que llevaba un bebé.

«Cuando llevé a mi hijo Lehan a casa con pocos días de vida, [Yogi] se apegó a él inmediatamente y me gimoteaba cada vez que mi hijo hacía el más mínimo ruido porque quería que lo viera enseguida», recordó la Sra. Murphy. «Después de que mi hijo falleciera de forma repentina e inesperada, Yogi seguía mirando la cuna de vez en cuando y lloriqueaba, con la cabeza en contacto con la parte superior de la cuna porque es muy alto en cuatro patas. Podía ver fácilmente el interior y vio que Lehan ya no estaba aquí. Lo he visto llorar junto con nosotros».

Yogi con la familia Murphy mientras recuerdan a Lehan. (Cortesía de Laura Murphy)
(Cortesía de Laura Murphy)

Para cualquiera que quiera tener un perro como Yogi, la Sra. Murphy sugiere informarse sobre las necesidades de peluquería y adiestramiento de la raza, ya que su rareza hace que sea difícil para muchos peluqueros trabajar con ellos.

«Teníamos un adiestrador que trabajaba con Yogi», dice la Sra. Murphy. «Por suerte le dio una oportunidad porque era un cachorro».
Además, como la Sra. Murphy es ama de casa, ha podido pasar mucho tiempo con él.

(Courtesy of Laura Murphy)

«Son perros guardianes territoriales, muy buenos con la familia si se les trata adecuadamente, pero deben estar en el entorno adecuado para prosperar», afirma. «Se toman muy en serio su trabajo como perros guardianes y no se parecen a los típicos perros guardianes.

«Son perros increíbles a los que se puede adiestrar, además son cariñosos y muy traviesos», continuó Sra. Murphy, agregando que «es una raza única y preciosa que merece todo el amor y el respeto del mundo».

La familia Murphy se siente honrada de tener a Yogi en sus vidas y realmente disfrutan compartiéndolo con el mundo mientras educan a la gente sobre él y su raza en todos los aspectos.

Mira el video:


(Crédito del vídeo: Viralhog)


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