El asesor comercial de la Casa Blanca, Peter Navarro, dijo que el Partido Comunista Chino (PCCh) ha acaparado equipamiento de protección personal (EPP) y que está lucrando de la pandemia.
«En primer lugar, el virus fue engendrado en China. Segundo, ocultaron el virus detrás del escudo de la Organización Mundial de la Salud (OMS). La tercer cosa que hicieron fue básicamente acaparar el equipo de protección personal y ahora se están beneficiando de ello», dijo Navarro en una entrevista con Fox News el domingo.
Las exportaciones estadounidenses de mascarillas quirúrgicas, respiradores y otros equipos médicos a China aumentaron drásticamente en enero y febrero, según un informe del USA Today. Durante ese tiempo, los funcionarios del PCCh trataron de hacer frente a un brote originado en Wuhan, en la provincia de Hubei.
«Esta fue una etapa en la que ese virus pudo haber sido contenido en Wuhan», le dijo Navarro a Fox. «En cambio, 5 millones de chinos salieron de Wuhan y propagaron el virus por todo el mundo».
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El PCCh, dijo, persuadió a la OMS en un intento de encubrir el virus al resto del mundo. Al mismo tiempo, China se convirtió en un importador neto de EPP a pesar de ser el mayor productor de EPP del mundo, dijo.
«Durante ese período de tiempo, ese intervalo de seis semanas en el que estaban ocultando este virus al mundo, China pasó de ser un exportador neto de equipos de protección personal, siendo el mayor productor de los mismos en el mundo, a ser un gran importador neto», dijo Navarro. «Básicamente fueron por todas partes y aspiraron virtualmente todo el EPP alrededor del mundo, incluyendo muchos de este país, que por razones humanitarias compartimos nuestro EPP con ellos, y lo que eso hizo fue dejar a la gente de Nueva York, Milán y de todas partes indefensa cuando llegó el momento de tener ese EPP».
Las mascarillas fabricadas en China que normalmente se venden por 50 centavos ahora «se venden a los hospitales aquí en Estados Unidos por hasta 8 dólares», dijo Navarro.
«China está sentada sobre ese montón de EPP donde acaparó el mercado y está aprovechándose», añadió.
Los comentarios del domingo de Navarro siguen un patrón de comentarios que fueron hechos por altos funcionarios de la administración, incluyendo al propio presidente Donald Trump, sugiriendo que el régimen chino ha encubierto el alcance del brote.
«¿Fue un error que se salió de control? ¿O fue hecho deliberadamente? En cualquier caso, deberían habernos permitido entrar», dijo Trump sobre China durante una rueda de prensa el sábado. «Pedimos entrar muy pronto y no nos permitieron entrar», añadió.
Al inicio del brote, tanto el PCCh como la OMS sabían de la transmisión de humano a humano del virus del PCCh, un nuevo tipo de coronavirus que causa la enfermedad del COVID-19, en Wuhan antes de que los funcionarios del régimen chino engañaran al mundo hace meses al informar que solo se producía la transmisión a través de animal a humano, dijo la semana pasada la Dra. Deborah Birx, miembro del grupo de trabajo de la Casa Blanca.
«Creo que una vez que esto termine, seremos capaces de mirar hacia atrás y ver, ‘¿China y la OMS dijeron e hicieron todo lo posible para alertar al resto del mundo sobre los matices de este virus?’—porque cuando estalla por primera vez alguien tenía que saber que había una transmisión de humano a humano», dijo Birx a «The View» de la ABC.
Estados Unidos no es el único país que cuestiona la respuesta y la transparencia del PCCh.
El secretario de Relaciones Exteriores del Reino Unido y el primer ministro en funciones Dominic Raab dijo que la relación del Reino Unido no será «como de costumbre» una vez que la pandemia disminuya.
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