Dos proyectos de ley en la Cámara de Representantes de Texas pretenden equiparar la prestación de «atención médica para la afirmación del género» a los niños con el maltrato infantil y posiblemente incluso con un delito.
El proyecto de ley 42, presentado por el representante estatal Bryan Slaton (R-Royse City), pretende ampliar la definición de maltrato infantil para incluir «el propósito de intentar cambiar o afirmar la percepción de un niño sobre su sexo si esa percepción es incompatible con el sexo biológico del niño, tal como lo determinan sus órganos sexuales, sus cromosomas y sus perfiles hormonales endógenos».
Slaton también había anunciado durante el verano que presentaría una legislación que prohibiría a los menores asistir a espectáculos de drags queens en el estado, diciendo que «los espectáculos de drags no son lugar para los niños», y que una ley era necesaria para proteger a los menores de los «adultos pervertidos».
Otros proyectos de ley presentados por el representante estatal Steve Toth (R-Woodlands) irían un paso más allá del proyecto de Slaton en la cuestión de la terapia de reasignación de sexo. Bajo la legislación de Toth, se podría revocar la póliza de seguro de responsabilidad profesional de un médico por ofrecer tratamientos de reasignación de sexo, y las violaciones podrían incluso dar lugar a un delito de segundo grado.
No es la primera vez que la atención para la reafirmación del género es objeto de escrutinio en Texas. En febrero, el fiscal general Ken Paxton emitió un dictamen oficial en el que concluía que la realización de ciertos procedimientos de «cambio de sexo» en niños equivalía a un abuso infantil.
«No hay duda de que estos procedimientos son un ‘abuso’ según la ley de Texas, y por lo tanto deben detenerse», dijo Paxton. «El Departamento de Servicios Familiares y de Protección de Texas (DFPS) tiene la responsabilidad de actuar en consecuencia. Haré todo lo posible para proteger contra los que se aprovechan y perjudican a los jóvenes texanos».
La opinión del fiscal general Paxton hizo que el gobernador Greg Abbott ordenara a los funcionarios estatales de bienestar infantil que iniciaran investigaciones sobre el abuso de menores tras las denuncias de niños que recibían terapia de reasignación de sexo.
La Asamblea Legislativa de Texas, dominada por el Partido Republicano desde hace años, se ha centrado en las personas transgénero en el pasado, e incluso consiguió limitar la participación de estudiantes transgénero en eventos deportivos ya el año pasado.
Los defensores de los niños transgénero y sus familias, por su parte, dicen que lo que están haciendo los funcionarios del estado de Texas es «peligroso y cruel».
Equality Texas publicó un informe temático en el que afirma que «cuando los adolescentes transgénero se enfrentan a la pérdida de los cuidados, en sus diversas formas, que afirman quiénes son, puede tener consecuencias devastadoras». Un padre de Dakota del Sur calificó el proyecto de ley de «ladrón de esperanzas».
The Epoch Times se puso en contacto con los legisladores mencionados en este artículo para pedirles comentarios, pero no recibió respuesta.
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