Recientemente han surgido informes sobre la fortaleza de la economía de los hispanos en Estados Unidos, así como de la disminución de la pobreza entre este grupo. Sin embargo, estos resultados están generando controversia.
La Oficina del Censo de los Estados Unidos publicó hace unos días su informe anual sobre la pobreza en 2022 (pdf), según el cual, el 16.9% de los hispanos vive actualmente por debajo del umbral de pobreza. La cifra rebasa por más de 5 puntos la tasa de pobreza a nivel nacional (11.5%).
Si se hace una comparación de estas cifras con las de hace 10 años, se puede decir que la pobreza ha disminuido considerablemente, ya que en 2012 una cuarta parte de los hispanos (25.6%) estaba por debajo del umbral de pobreza. Lo que significaría que esta disminuyó unos 8 puntos.
Estas parecen buenas noticias para los hispanos, pero no todos están de acuerdo con este planteamiento.
Por una parte, los informes del Censo de los últimos años muestran un estancamiento en el nivel de pobreza de los hispanos desde 2020. Solo disminuyó dos décimas de punto en este último año.
Por otro lado, contrario a lo que sugieren las cifras, algunas encuestas revelan que los hispanos no parecen estar muy contentos con la situación económica del país.
César Grajales, Director de Asuntos Públicos de Iniciativa Libre, dice discrepar con los resultados del Censo por varias razones.
El analista colombiano radicado en Florida, dice que si bien se puede argumentar que la gente está ganando un poco más dinero que hace diez o cinco años atrás, o que los salarios han aumentado, “no le cuentan por completo la historia a la gente”. Señala que hace falta aclarar que la inflación se ha mantenido muy elevada, lo que hace que el costo de vida sea alto.
“La realidad es que los hispanos están gastando mucho más ahora que hace dos años y medio atrás”, dijo.
Grajales citó una encuesta realizada recientemente por el Instituto Libre, que arrojó que la mayoría de los votantes hispanos están preocupados por la economía y piensan que el país no va por el camino adecuado (71%). Lo mismo piensa la mayoría de los votantes hispanos independientes (84% ), quienes podrían llegar a definir las elecciones, según el analista.
El tema de la economía es el más importante para los hispanos, según esta y otras encuestas. Seguida de temas como la seguridad, salud, la democracia y la educación.
“Los temas que le preocupan al hispano promedio son los temas que le preocupan al americano promedio”, explicó Grajales. Pero dice que “es interesante cómo quieren vender la narrativa algunos legisladores, incluso medios de comunicación, que al hispano lo único que le importa es la migración, cuando el tema migratorio es de las cosas menos importantes” para esta comunidad.
Sin embargo, la actual crisis migratoria sí está afectando el presupuesto de muchas localidades, ya que tienen que proveer servicios básicos a los inmigrantes ilegales una vez que ingresan al país.
“No hay programa social, no hay presupuesto público que pueda aguantar una migración descontrolada y masiva”, explicó.
Considera que de cara a las próximas elecciones, si algún candidato “llega con soluciones reales acerca de esos temas a tocar la puerta de la comunidad hispana de Estados Unidos, probablemente se gane la atención de estos votantes».
Mejorar la economía para todos
Los hispanos son un grupo cada vez más relevante en Estados Unidos porque es una comunidad que sigue creciendo día a día, según Grajales. Sin duda, ellos están contribuyendo a fortalecer la economía del país. Sin embargo, sugiere que la economía debe mejorar no solo para los hispanos, sino para todos los estadounidenses.
En primer lugar, propone que se debe bajar el precio de la energía y dice que eso solo será posible favoreciendo la industria de los hidrocarburos, generando más permisos para explorar nuevos pozos petroleros o nuevos yacimientos de gas, “mientras se va generando una industria mucho más seria en el tema de energías renovables”.
Las políticas actuales orientadas a cerrar por completo la industria de los hidrocarburos son absurdas, desde su perspectiva. Dice que “generan más aumento del precio de la electricidad y eliminan una cantidad enorme de trabajos hispanos”.
Mencionó el ejemplo de Dakota del Norte, donde muchos hispanos trabajan en esta industria. Según datos del Censo, ese es uno de los estados en los cuales el índice de pobreza de los hispanos está por debajo de la media nacional.
Grajales también sugiere que tanto a nivel federal como local, se deben eliminar algunas regulaciones para abrir nuevos negocios, de manera que el proceso sea mucho más fácil.
“Recordemos también que gran parte de nuestra comunidad en Estados Unidos son dueños de muchísimos pequeños negocios que generan a la vez prosperidad a empleados, que generan a la vez prosperidad a sus familias”, dijo.
Como tercera medida, sugiere eliminar impuestos para ayudar a las empresas, ya que quienes están “creando riqueza están arriesgando su capital y le están generando una fuente de trabajo a una persona, trabajo que dignifica al ser humano”.
El reto que representa la comunidad hispana
Con más de 62 millones de personas, los hispanos representan el 18.9 % de la población total de Estados Unidos y son la minoría más grande, por lo que algunos consideran que su voto podría definir las elecciones presidenciales.
Pero más allá de las propuestas que cada candidato pueda hacer, no será tan fácil ganar el voto de los hispanos.
Uno de los mayores retos para cualquier partido es entender que se trata de una comunidad muy diversa, explicó Grajales.
“Es tan diversa, tan interesada y tan pendiente de diferentes temas […]. Está el hispano que ha nacido en los Estados Unidos de padres que han emigrado, está el que vive acá y emigró hace 20 o 30 años, pero nació en otro país; pero sigue prestando también atención a lo que pasa en su país. Entonces, hay una diversidad enorme dentro de la misma comunidad hispana y si el aspirante político sabe leer esas necesidades, tiene posibilidades”, aseguró.
Grajales cree que si un aspirante a un cargo público puede “leer esas diferencias dentro de la comunidad hispana, tiene una ventaja amplia”.
También menciona que es importante para los hispanos que existan propuestas que incluyan alguna manera de mitigar las problemáticas que han contribuido a que mucha gente salga de sus países de origen buscando nuevas oportunidades en Estados Unidos.
“Cuando un legislador habla o presta atención, por ejemplo, a lo que pasa con gobiernos criminales como los de Venezuela, Nicaragua, gobiernos populistas y gobiernos inclinados a la izquierda extrema. Como en Colombia, con Petro; o Brasil, con Lula da Silva; México con López Obrador. Esa comunidad también está prestando atención a lo que ese líder político que aspira a un cargo en Estados Unidos, piensa de su país de origen”, agregó.
“La gente se encuentra desesperada en su país de origen y se encuentra desesperada porque son políticas públicas que ya hemos visto fallar una y otra vez, y que tercamente insisten en tratar de implantar en países en Latinoamérica”, dijo.
Muchos hispanos huyeron de la pobreza y la falta de oportunidades en esos y otros países, cuyas políticas se oponen a la prosperidad que los hispanos esperan ver en territorio americano.
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