Uno de los sindicatos de policía nacional más grandes del país declaró su apoyo al plan del presidente Donald Trump de desplegar agentes federales a raíz de los violentos disturbios y el aumento de la delincuencia en las principales áreas metropolitanas.
Sam Cabral, presidente de la Unión Internacional de Asociaciones de Policía (IUPA), escribió que el sindicato afiliado a la Federación Estadounidense del Trabajo y Congreso de Organizaciones Industriales (AFL-CIO) apoya «absolutamente» el plan de Trump de «proteger a la gente de este país que incluye el despliegue de Agentes Federales de las Fuerzas del Orden a esas ciudades y estados, algunos de los cuales (…) han renunciado a su principal responsabilidad de proteger a sus ciudadanos».
Cabral también ridiculizó a los alcaldes de Seattle, Atlanta, Portland y Chicago por rendirse ante la ola de protestas en contra de la policía que estallaron por la muerte de George Floyd en Minneapolis.
«Le deseo lo mejor a esas almas desafortunadas que viven bajo la orden de la muchedumbre, pero hasta y a menos que esto suceda en mi vecindario, esta realidad es simplemente un ejercicio académico de los funcionarios políticamente ineficaces que viven lejos de estos ‘manifestantes sancionados’ que están activamente involucrados en disturbios, saqueos y una anarquía incesante», dijo en un comunicado de prensa el viernes.
Trump señaló su intención de desplegar agentes federales a principios de esta semana en un anuncio en la Casa Blanca, haciendo de la «ley y el orden» un pilar esencial de su campaña de reelección. Esto ocurre semanas después de protestas en las principales ciudades del país, algunas de las cuales se han convertido en actos de violencia, incendios provocados, saqueos, y vandalismo de propiedad pública, mientras los activistas piden públicamente desmantelar a sus respectivos departamentos de policía.
Al mismo tiempo, los tiroteos se han incrementado en Chicago, Filadelfia y Nueva York, y otras ciudades importantes en las últimas semanas.
El plan de Trump de enviar agentes federales provocó reproches por parte de los demócratas de alto rango, incluyendo a la presidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi (D-Calif.) quien alegó la semana pasada que la administración estaba enviando «tropas de asalto no identificadas» y «autos camuflados» a Portland para secuestrar a los manifestantes.
Durante las protestas, los manifestantes frecuentemente rodean el juzgado federal de de EE. UU., Mark O. Hatfield. Las autoridades dijeron que los individuos trataron de incendiar el edificio y destrozar las ventanas.
El comisionado de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, Mark Morgan, dijo a los reporteros esta semana que esto es una práctica estándar, en defensa de la presencia de su agencia y sus tácticas en Portland.
«He estado en las fuerzas del orden por casi tres décadas, el uso de vehículos camuflados es un procedimiento estándar, una práctica estándar entre todas las agencias de fuerzas del orden locales, estatales y federales en este país (…) en realidad en el mundo», dijo Morgan. «No es algo nuevo».
Anteriormente, la IUPA respaldó la campaña de reelección de Trump en 2019, diciendo que ha brindado apoyo a las fuerzas del orden, mientras la Asociación Nacional de Organizaciones Policiales (NAPO) respaldó a Trump el 15 de julio.
El presidente de la NAPO, Michael MacHale, escribió en una carta en ese momento que el apoyo del presidente es necesario «durante este tiempo de oprobio injusto e incorrecto dirigido a nuestros miembros por parte de muchos”.
«Valoramos particularmente que ordene al fiscal general procesar activamente a aquellos que atacan a nuestros policías», escribió McHale en la carta.
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