La tormenta invernal y los cortes de electricidad en Texas desencadenaron numerosos casos de intoxicación por monóxido de carbono después que algunas personas comenzaron a usar medios no convencionales para tratar de generar calor mientras las temperaturas bajaban.
Los bomberos del condado de Harris atendieron más de 300 casos de intoxicación por monóxido de carbono en los últimos días, según los informes locales. La jueza Lina Hildago escribió que esa cifra es «solo la punta del iceberg», sugiriendo que probablemente sea mucho mayor.
«La verdad es que esta intoxicación por monóxido de carbono es, en muchos sentidos, un desastre dentro de un desastre», dijo Hidalgo. «Gran parte de estas llamadas por envenenamiento (…) se deben a que se introducen parrillas en la casa, a que se encienden los coches en los garajes, a que se utilizan básicamente equipos de exterior en el interior», añadió Hidalgo. «Pueden usar esos equipos para mantenerse caliente, solo que no lo usen en su casa».
La jefa de bomberos del condado de Harris, Laurie Christensen, dijo el martes que había numerosos casos de intoxicación por monóxido de carbono.
Incidents of carbon monoxide poisoning have risen in the last few days. Please remember NOT to bring any outdoor appliances (grills, etc.) inside, or run your car inside the garage. Be safe and stay warm! #wintersafety pic.twitter.com/Z18BQMY0kO
— Harris County Public Health #SocialDistance (@hcphtx) February 17, 2021
«¡El monóxido de carbono es MORTAL! Hemos tenido tantos incidentes y llamadas por monóxido de carbono en el condado de Harris que ni siquiera podemos rastrearlos todos. SIGNOS y síntomas: dolores de cabeza, náuseas, mareos. Las parrillas y los generadores deben dejarse afuera, lejos de las ventanas, puertas y aberturas de ventilación», escribió Christensen.
En Fort Worth, un funcionario del Centro Médico Infantil Cook dijo a NPR que el centro atendió al menos a 13 pacientes el lunes por la noche cuyas familias intentaban calentar sus casas con motores de combustión de diésel o propano que no están diseñados para ser utilizados en interiores.
«La intoxicación por monóxido de carbono impide que la sangre pueda adquirir oxígeno», dijo el doctor Sam Selby, médico de urgencias del Cook Children’s a una radioemisora. «Uno se asfixia mientras sigue respirando».
El doctor Samuel Prater, médico de urgencias del Memorial Hermann Texas Medical Center, dijo el martes que la gente no debería usar parrillas o generadores en el interior.
«Esto es un desastre de salud pública y una emergencia de salud pública», dijo.
En el presente unos 447,000 hogares de Texas se encuentran sin electricidad, frente a los cerca de 2.7 millones del miércoles, según poweroutage.com, un sitio web que hace un seguimiento de los apagones. El Consejo de Fiabilidad Eléctrica de Texas (ERCOT), una cooperativa responsable del 90 por ciento de la electricidad del estado, dijo el jueves que había hecho «progresos significativos» en el restablecimiento de la energía pero no proporcionó cifras detalladas.
Con información de Reuters.
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