Un restaurante y distribuidor de alimentos realizó una encuesta a más de 1500 personas que usan aplicaciones de entrega de comida y encontraron que al menos 1 de cada 4 repartidores probaron la comida de los pedidos antes de ser entregadas a los clientes.
También entrevistaron a más de 500 repartidores de dichas aplicaciones.
Según el estudio de ‘US Food’, el 28 por ciento de los casi 500 repartidores admitieron haber probado los alimentos antes de entregarlos al cliente.
Más de la mitad reveló que «a menudo se sienten atraídos por el olor de la comida», aunque al parecer ‘se controlan’ y no lo tocan. Además, más del 21% de los clientes sospechan que sus alimentos no llegan completos.
Según el 85% de los clientes, la solución para disminuir o evitar este tipo de situaciones es que los restaurantes usen etiquetas o sellos a “prueba de manipulaciones”» para frenar el robo de alimentos.
Otras preocupaciones de los consumidores
Como la encuesta buscaba comprender los hábitos y los puntos débiles de los consumidores, el resultado permitió conocer las quejas más comunes en el mundo de las aplicaciones de entrega de alimentos.
De acuerdo con las respuestas de los entrevistados, la gente quiere que la comida se sirva caliente, fresca y a tiempo, especialmente cuando están pagando una prima por ello.
Por parte de los repartidores, los reclamos que ocupan los primeros lugares en la lista son las propinas pobres, que la comida que no esté lista en el restaurante y también la falta de comunicación con los clientes. Para remediar esto, muchos operadores están reduciendo los servicios de entrega y los menús, para no abrumar a la cocina y evitar una experiencia negativa tanto para los clientes que comen como para los que hacen la entrega.
Según U.S. Food, cuando las cosas van mal en la entrega de alimentos desafortunadamente el consumidor final a menudo culpa al restaurante, incluso cuando no es su culpa.
En cuanto a las propinas el estudio menciona que si la entrega se hace bien los repartidores deben recibir una propina sólida.
En décadas pasadas, la fórmula era simple – le dabas al pizzero 5 dólares el viernes por la noche cuando te entrega el producto¨¨, recordaron.
Sin embardo, mencionaron que en el presente a medida que el negocio de entrega de alimentos se expandió exponencialmente el tema de las propinas se tornó más complicado.
“Algunos clientes utilizan estas aplicaciones cinco veces a la semana. ¿Deberían gastar USD 25 en propinas? Además, hay cargos por servicio y entrega añadidos”, señala el estudio.
La encuesta fue realizada entre el 9 y 13 de mayo de 2019.
Se entrevistaron a 1518 adultos estadounidenses que han usado aplicaciones de entrega de alimentos, incluyendo UberEats, Grubhub, DoorDash y Postmates.
Las edades de los encuestados oscilaron entre 18 y 77 años, con una edad media de 31 años.
Además, del 9 al 11 de mayo de 2019, fueron entrevistados 497 adultos estadounidenses que habían trabajado como repartidores de al menos una aplicación de entrega de alimentos. Las edades de los encuestados oscilaron entre 21 y 63 años, con una edad media de 30 años.
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