El ejecutivo del condado en el condado de Erie, Nueva York, indicó que la aplicación de las vacunas contra COVID-19 serán obligatorias para asistir a los juegos en persona de Buffalo Bills y Buffalo Sabres.
El ejecutivo demócrata del condado de Erie, Mark Poloncarz, dijo a los medios de comunicación el martes que «no existe ningún derecho otorgado por Dios para asistir a un partido de fútbol».
“No Vaccine=No Entry” («Sin vacuna=Sin acceso») es lo que leyó en una presentación que fue exhibida por Poloncarz durante su conferencia de prensa el martes. Poloncarz dijo que habló con la gerencia de Bills acerca de su plan.
“Quiero ver ese estadio lleno, sé que los Bills quieren ver ese estadio lleno. Queremos que los aficionados regresen al estadio”, dijo Poloncarz en una conferencia de prensa. “Es por eso que el condado apoya que todos los aficionados regresen al estadio y al estadio (de hockey) este otoño (…) Sabemos que hay una forma de hacerlo. Sabemos que hay una forma de garantizarlo. Es que todos los aficionados y el personal están completamente vacunados».
Poloncarz agregó que «salvo que esté vacunado, no tendrá entrada al estadio», agregando que «entonces podemos garantizar [la presencia] de más de 70,000 personas en el estadio». Y dijo que no se admitirán exenciones médicas y religiosas.
Para realizar esto, Poloncarz dijo que quiere usar Excelsior, el sistema tipo pasaporte de vacunas recientemente implementado en el estado. Estos sistemas de tipo pasaporte han sido objeto de criticas por grupos de libertades civiles como la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) y fueron prohibidos a través de órdenes ejecutivas por los gobernadores de Texas y Florida.
En una declaración para The Epoch Times, un portavoz del condado de Erie dijo que la medida «finalmente afectará a los aficionados procedentes afuera del estado/Canadá (cuando se abra la frontera), pero (tal como los aficionados locales) se esperará también que presenten pruebas de vacunación para ingresar al estadio o al Key Bank Center”.
“Los aficionados que no tengan un teléfono inteligente o la app podrán acceder e imprimir su registro de vacunación por Internet, y aún se está trabajando en la parte relativa a los niños; la elegibilidad sigue expandiéndose y solo estamos a mediados de abril, por lo que de cualquier modo se tendrá unos tres meses y medio antes de que se jueguen los juegos; mucho tiempo para planificar”, dijo el portavoz.
El Departamento de Salud del Estado de Nueva York emitió un comunicado a los medios de comunicación locales tras las declaraciones de Poloncarz.
«El Departamento de Salud del Estado de Nueva York continúa trabajando en estrecha colaboración con los Buffalo Bills en el plan para que regresen los aficionados a las gradas este otoño, de acuerdo con la directriz del estado acerca de las competencias deportivas profesionales con los espectadores y todas las leyes y regulaciones aplicables», dijo la agencia.
«Como hicimos el año pasado, continuaremos cooperando y cumpliendo con todas las regulaciones del gobierno local y del estado de Nueva York con respecto a nuestros eventos deportivos», dijeron los Buffalo Bills en un comunicado tras la conferencia de prensa de Poloncarz.
El contralor republicano del condado Stefan Mychajliw, dijo que Poloncarz está actuando a la forma de un dictador.
“Mark Poloncarz debería dedicar menos tiempo aniquilando negocios, arruinando nuestra economía y destruyendo los sueños de los aficionados acérrimos de los Bills para volver a ver los juegos en persona”, dijo, según Buffalo News.
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