Millones de votantes jóvenes y de minorías corren el riesgo de que sus votos no sean contados en noviembre debido a problemas de votación por correo y a la escasez de lugares de votación, según el representante Rodney Davis (R-Ill.).
«Los demócratas quieren meter la cabeza en la arena y no abordar este tema», dijo Davis al Epoch Times el 8 de septiembre. «Este tema afecta más desproporcionadamente a los votantes más jóvenes y a los votantes de color que a cualquier otro».
Davis señaló los cientos de miles de boletas de voto por correo que fueron descalificadas durante las elecciones primarias de principios de año en California, Nueva York y Wisconsin.
«Estos votantes son los que tenían más probabilidades de quedar privados del derecho de voto en estas zonas donde las papeletas por correo fueron descalificadas porque no cumplían con un exceso de leyes electorales que existen en esos estados», dijo Davis.
Los comentarios de Davis hicieron eco de las preocupaciones que expresó durante una audiencia del 29 de agosto del Comité de Administración de la Cámara de Representantes, en el cual es el miembro de mayor rango de la minoría. La representante Zoe Lofgren (D-Calif.) es la presidenta del comité, que es responsable de supervisar las leyes electorales federales.
«Un reciente análisis de la NPR encontró que casi medio millón de boletas por correo fueron rechazadas en las primarias de 2020. El mismo análisis señaló, ‘Los estudios también muestran que los votantes de color y los votantes jóvenes tienen más probabilidades que otros de que sus boletas no sean contadas'», dijo Davis en su declaración de apertura en la audiencia.
«Solo en California, 102,000 votos fueron rechazados, 84,000 en Nueva York, 23,000 en Wisconsin, estos son estados demócratas. En las últimas cuatro elecciones, se perdieron más de 28 millones de votos por correo, según la Comisión de Asistencia Electoral (EAC)».
«Sin embargo, los demócratas de esta comisión, en esta Cámara y en todo el país continúan presionando para implementar el voto por correo universal antes de las elecciones de noviembre, a poco más de 60 días».
Davis también señaló el cierre generalizado de los lugares de votación, lo que dio lugar a largas filas, obligando a muchos votantes a esperar horas en fila antes de emitir su voto. Los centros de votación están siendo cerrados debido a la preocupación por la propagación del virus del PCCh, también conocido como el nuevo coronavirus.
«Washington, D.C., cerró más de 120 lugares de votación. En Atlanta, los votantes esperaron más de cinco horas para votar debido a la combinación de los centros de votación. Milwaukee pasó de 180 a cinco centros de votación», dijo.
«En Filadelfia, el 77 por ciento de los centros de votación fueron cerrados. En Houston, los votantes reportaron haber esperado cerca de seis horas para votar. Todas estas áreas están dirigidas por los demócratas».
La audiencia, titulada «Votar con seguridad en una pandemia», fue convocada por los demócratas del panel para promover una disposición de la Ley HEROES de 3 billones de dólares aprobada por la Cámara de Representantes, que exige la votación por correo a nivel nacional en caso de emergencia, incluyendo específicamente el virus del PCCh.
Hubo cierta confusión durante la audiencia con respecto a la disposición, sin embargo, la representante Marcia Fudge (D-Ohio), quien preside el Subcomité de Elecciones del panel, afirmó que la Ley HEROES «no requiere, no solicita, el voto universal por correo (…) lo que hace es dar opciones a la gente, para que puedan estar seguros cuando decidan salir a votar».
Pero Davis respondió que la disposición de HEROES «requiere, en caso de emergencia o desastre, incluyendo el COVID-19, que los funcionarios electorales estatales o locales envíen por correo las papeletas para voto en ausencia y los materiales de votación por correo con un sobre con autosellado y el porte de retorno prepagado a cada votante registrado al menos dos semanas antes de la elección».
Padrones electorales sucios
El republicano de Illinois también proyectó un video que apoya a la votación por correo producido por la Asociación Demócrata de Secretarías de Estado (DASS).
El video de la DASS «compara a los republicanos con los supremacistas blancos con imágenes de símbolos nazis, apoyo a la segregación, e insinúa que cualquiera que tenga inquietudes con el voto por correo está tratando de suprimir los votos de la minoría», dijo.
Uno de los testigos de la audiencia del comité fue el secretario de Estado de California Alex Padilla, el presidente del DASS. Padilla dijo en la audiencia que «los votantes de California no tendrán que elegir entre ejercer su derecho al voto y proteger su salud» porque «el voto por correo ha crecido del 25 por ciento de los votos emitidos en los últimos 20 años al 72 por ciento en las primarias de este año».
Los funcionarios de California están ampliando la votación por correo a pesar de que descalificaron más de 102,000 votos emitidos en las primarias de este año como resultado de haber sido presentados tarde u otros errores.
La investigación del reportero político de Associated Press Michael Blood expuso los votos descalificados y «mostró que el voto por correo puede estar plagado de problemas en un momento en que la pandemia está llevando a muchos estados a prepararse para el voto por correo casi universal en noviembre y mientras el presidente Donald Trump pone en duda la validez del sistema».
En 2018, los funcionarios de California resolvieron una demanda presentada por la organización sin fines de lucro de control gubernamental Judicial Watch, acordando limpiar su padrón electoral para asegurarse de que se eliminen los votantes muertos y los nombres duplicados así como que se disponga de direcciones exactas.
Pero el presidente de Judicial Watch, Tom Fitton, dijo a The Epoch Times que California podría tener hasta 1.6 millones de nombres de votantes inactivos solo en el condado de Los Ángeles.
«California, hasta nuestro acuerdo, no había limpiado su padrón electoral en 20 años», dijo Fitton, «por lo que hay un número excesivo de votantes inactivos en las listas».
El gobernador de California, Gavin Newsom, había planeado enviar papeletas a todos los votantes activos e inactivos en el padrón del estado, pero ese plan tuvo que ser archivado como resultado de la impugnación de Judicial Watch, dijo Fitton.
«Cuando se envían por correo millones de boletas a personas que no las han pedido, se crea una tormenta perfecta de oportunidades de fraude electoral», dijo.
Cuando Davis le preguntó a Padilla durante la audiencia del 29 de agosto cuántos nombres de votantes inactivos se han eliminado del padrón electoral del condado de Los Ángeles hasta la fecha, el funcionario de California dijo que no lo sabía.
La organización de Fitton también ha presentado demandas que resultaron en que los funcionarios de Kentucky en 2014 y de Ohio en 2019 aceptaran limpiar sus padrones electorales estatales. Pero el problema de los «padrones electorales sucios» sigue siendo grave en todo el país, dijo Fitton.
«Los problemas son a nivel nacional. Las listas de votantes son generalmente un desastre», dijo.
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