En Italia, 63 doctores han muerto en el frente de batalla contra el brote del COVID-19, según la Asociación Italiana de Médicos.
La junta editorial de la Asociación Italiana de Médicos (FNOMCeO) actualizó el lunes su conteo de doctores que han muerto durante los esfuerzos de respuesta a la pandemia.
«Desgraciadamente, la triste lista de doctores que han caído durante la epidemia del COVID-19 está creciendo», escribió la junta de FNOMCeO en una nota que acompaña el conteo, al cual se agregaron dos nombres el 30 de marzo.
«Los muertos no hacen ruido. Aún así los nombres de nuestros amigos fallecidos, nuestros colegas, puestos en negro sobre blanco, hacen un ruido ensordecedor», dijo Filippo Anelli, presidente de FNOMCeO, en declaraciones anteriores al Financial Times.
La asociación no especificó qué tan directas podrían ser atribuidas la muerte de 63 médicos al virus del PCCh (Partido Comunista Chino), conocido comúnmente como nuevo coronavirus, y notó que «muchos doctores mueren repentinamente, incluso si la causa de muerte no es atribuible directamente al virus, porque no hay espacio».
La asociación dijo que actualizaría el conteo regularmente, con la esperanza de que sirva de una «advertencia, una lección para todos».
Anelli había anteriormente pedido urgentemente más equipo protector personal (EPP) para el personal médico en la línea de batalla, y le dijo a Financial Times que los doctores italianos habían sido enviados a una «guerra» contra el virus «desarmados».
«Es razonable suponer que estos eventos habrían sido en gran medida evitables si los trabajadores de la salud hubieran sido correctamente informados y equipados con EPP suficientemente adecuados: mascarillas, guantes, trajes desechables, visores protectores—que en cambio, continúan en corta oferta o son suministrados de manera no aceptable en medio de una pandemia a la cual Italia se ha declarado lista solo hace dos meses atrás», dijo Anelli en una declaración del 27 de marzo, traducida por The Independent.
Según un conteo del 29 de marzo (pdf) del Instituto Superior de Salud (ISS) Italiano, un total de 8358 trabajadores de la salud en Italia han contraído el virus.
El lunes, el país reportó una caída en el número de nuevos casos de COVID-19, el cual se elevó a solo 4050, el número más bajo desde el 17 de marzo, según la Agencia de Protección Civil, citada por la estatal ANSA.
Italia registró un total de 101,739 casos en total, dice el informe, con 812 personas muertas en las últimas 24 horas.
El número total de muertes atribuidas al COVID-19 en Italia está ahora en 11.591.
El declive en nuevos contagios podría ser en parte explicado por una reducción en el número de pruebas, la cual fue la menor en seis días.
Los italianos están encerrados a nivel nacional hace tres semanas y los funcionarios dicen que las restricciones, que iban a finalizar el viernes, se ven certeras por al menos dos semanas más.
«Tenemos que acordar esto con otras regiones, pero pienso que estamos hablando de (mantener el bloqueo) al menos hasta mediados de abril», dijo Attilio Fontana, jefe de la región peor afectada, Lombardía, a los periodistas.
El gobernador de la región sureña de Puglia dijo el sábado que las restricciones deberían permanecer hasta mayo.
Reuters contribuyó con este informe.
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