Los legisladores del Partido Republicano alegan un doble rasero que favorece a los demócratas en detrimento de los republicanos tras las revelaciones de esta semana sobre el descubrimiento de documentos clasificados de la administración Obama-Biden en el Penn Center de Biden en noviembre.
Sus comentarios se produjeron antes de que el 12 de enero se anunciara que desde entonces se descubrieron más documentos clasificados en el garaje de una de las casas de Biden en Deleware. El mismo día, el fiscal general Merrick Garland dijo que nombró al exfuncionario del Departamento de Justicia designado por Trump, Robert Hur, como abogado especial para investigar el manejo de materiales clasificados por parte de Biden.
Muchos han tratado de distinguir las revelaciones de esta semana de las acciones del gobierno contra el expresidente Donald Trump, cuya casa en Florida fue allanada por el FBI el verano pasado durante la cual se descubrieron documentos clasificados, y que actualmente está siendo investigados por el abogado especial Jack Smith. Pero figuras republicanas sostienen que debería aplicarse el mismo trato en ambos casos.
“¿Dónde está la redada del FBI en la familia criminal de Joe Biden después de las revelaciones de que robó materiales clasificados mientras se desempeñaba como vicepresidente y almacenó estos documentos en el ‘centro de estudios’ de Biden que ha recibido más de USD 50 millones en regalos chinos?», dijo la representante Elise Stefanik (R-N.Y.), quien forma parte del Comité Selecto de Inteligencia de la Cámara de Representantes a The Epoch Times, el 11 de enero.
La Universidad de Pensilvania, que alberga el Biden Penn Center, recibió una suma de USD 54.6 millones entre 2014 y 2019 de China, según los registros públicos, informó el New York Post. El Centro niega haber recibido donaciones de China.
Trato distinto
El trato diferencial de los casos Trump y Biden se reduce a la afiliación partidista, según un excongresista del Partido Republicano.
“La principal diferencia es que uno es republicano y el otro es demócrata”, dijo el exrepresentante Mo Brooks (R-Ala.) a The Epoch Times.
“El gobierno es predominantemente demócrata, no solo a nivel de funcionarios electos, sino también a nivel burocrático”, agregó Brooks.
“Creo absolutamente que existe un sesgo en nuestras agencias de investigación y sistema judicial contra los republicanos. La gravedad de la disparidad está abierta al debate».
La representante Marjorie Taylor Greene (R-Ga.) estuvo de acuerdo y dijo que los conservadores son castigados por acciones que son ignoradas en gran medida por un gobierno dominado por liberales ideológicos.
“Tenemos un gran problema con los Archivos y Registros Nacionales”, dijo Greene a The Epoch Times.
La congresista dijo que la Administración Nacional de Archivos y Registros (NARA), que está a cargo de los documentos generados por la oficina del presidente y vicepresidente, tiene dos estándares diferentes: uno que favorece a Biden y otro que castiga a Trump.
“Esta es una organización que vamos a investigar, a través del Comité de Supervisión de la Cámara, en cuanto a su manejo de estos documentos. Y también vamos a interrogar al Departamento de Justicia y al FBI por qué la hipocresía y por qué la diferencia, porque es absolutamente injusto”, dijo Greene.
La Casa Blanca ha insistido en que está cooperando con NARA y el Departamento de Justicia en el asunto, mientras que Biden dijo a inicios de esta semana que estaba «sorprendido al enterarse» de los documentos encontrados en el Biden Penn Center y no sabía qué contenían los registros.
El vicepresidente no puede desclasificar
Greene también sostuvo que existe una distinción aún mayor en el caso de los documentos clasificados de Biden.
“La diferencia es esta: Joe Biden era vicepresidente de Estados Unidos cuando se llevó documentos clasificados. Eso significa que robó documentos clasificados porque el vicepresidente no está autorizado a desclasificar nada. Y no tiene derecho a tomar documentos clasificados», dijo.
“Esto es completamente diferente para el presidente de Estados Unidos”, agregó Greene, quien, según dijo, puede desclasificar documentos en cualquier momento y por cualquier motivo.
Trump sostiene que antes de dejar el cargo desclasificó los documentos encontrados en su residencia.
Pero Brooks, que anteriormente trabajó como abogado defensor y fiscal de distrito dijo que si bien está de acuerdo en que hay un sesgo en la forma en que el gobierno trata estos casos entre el Partido Republicano y los demócratas, no ha visto ninguna prueba de que Trump haya utilizado los procesos establecidos para desclasificar los documentos encontrados en su poder.
«No le doy mucho peso a esa distinción», dijo Brooks. «Porque hoy, no se ha producido ninguna prueba de que Donald Trump, de hecho, haya hecho las cosas que se supone que hay que hacer para desclasificar documentos».
Un exoficial de inteligencia que ha trabajado en temas de seguridad en Europa y Medio Oriente dijo que si bien es una pregunta abierta si Trump siguió el proceso para desclasificar documentos en su poder, no se puede hacer tal concesión para Biden.
“Un exvicepresidente no tiene autoridad para sacar documentos clasificados de una instalación segura, ni siquiera con el propósito de usarlos como referencia para escribir un libro”, dijo Del Wilber, quien se desempeñó en Iraq y Europa del Este como asesor de contrainteligencia a The Epoch Times.
“Si fuera necesario que un exvicepresidente revisara documentos clasificados, tendría que presentar una solicitud formal para revisar esos documentos ante la autoridad que mantiene el control y luego ir a una instalación segura para verlos”, dijo Wilber, y agregó que, a primera vista, Biden no hizo eso.
The Epoch Times se ha puesto en contacto con la Casa Blanca, NARA y el Departamento de Justicia para solicitar comentarios.
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