El director financiero de larga data de la Organización Trump, Allen Weisselberg, se declaró inocente de los cargos de fraude fiscal el jueves, horas después de que la empresa criticara a los fiscales de Manhattan por lo que afirman es una investigación criminal políticamente partidista diseñada para herir políticamente al expresidente Donald Trump.
Según una acusación penal revelada el jueves, Weisselberg también fue acusado de hurto agravado, conspiración y falsificación de registros comerciales. Weisselberg se declaró inocente en el Tribunal Supremo de Manhattan.
Los abogados de la Organización Trump y de Trump Payroll Corp. comparecieron ante el tribunal y se declararon en nombre de las empresas. Los fiscales afirmaron que las firmas y Weisselberg llevaron a cabo una conspiración de fraude fiscal de 15 años para pagarle a él y a otros ejecutivos.
«Los beneficiarios del ardid recibieron partes sustanciales de sus ingresos a través de medios indirectos y disfrazados, con compensaciones que no fueron declaradas o fueron declaradas erróneamente por Trump Corporation y Trump Payroll Corp», decía la acusación.
El fiscal Carey Dunne dijo en el juicio que el presunto plan fue «orquestado por los más altos ejecutivos» de la empresa y que obtuvieron «aumentos de sueldo secretos a expensas de los contribuyentes estatales y federales».
Los cargos se presentan tras una investigación de casi tres años llevada a cabo por la oficina del fiscal demócrata de Manhattan Cy Vance. La oficina de la fiscal general de Nueva York, Letitia James, anunció en mayo que emprendería un caso penal separado contra la Organización Trump, una empresa que se dedica a los bienes raíces de lujo y que es administrada por el expresidente Donald Trump y los miembros de su familia.
Tanto Trump como la Organización Trump calificaron la investigación de Vance y las acusaciones como parte de una cacería de brujas por motivos políticos.
«Los fiscales radicales de izquierda de la ciudad y el estado de Nueva York, que han dejado que asesinos, violadores, traficantes de drogas y todas las demás formas de delincuencia se disparen a niveles récord, y que acaban de anunciar que dejarán en libertad a cientos de personas involucradas en delitos violentos de vuelta a las calles sin ningún tipo de retribución, son groseros, desagradables y totalmente parciales en la forma en que están tratando a los abogados, los representantes y algunos de los maravillosos empleados de larga data y personas dentro de la Organización Trump», dijo Trump en un extenso comunicado a principios de esta semana.
La Organización Trump, en un comunicado el jueves, dijo que la investigación «no es justicia; esto es política».
Un abogado de Trump, Ronald Fischetti, dijo a Politico el 28 de junio que el expresidente no se enfrentará a cargos en la investigación de Vance, al menos en un futuro próximo.
«Acaban de decir: ‘Cuando esta acusación salga, [Trump] no será acusado. Nuestra investigación está en curso'», dijo Fischetti. Pero Fischetti dijo más tarde al New York Post que no está seguro de que Trump esté «fuera de peligro completamente todavía».
La Organización Trump no ha respondido a una solicitud de comentarios.
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