«Amenazas» de la embajada china contribuyeron a muerte repentina de político checo, dice su esposa

Por Isabel van Brugen
05 de mayo de 2020 9:16 AM Actualizado: 05 de mayo de 2020 9:16 AM

Un político checo de alto rango que murió repentinamente pocos días antes de un viaje planeado a Taiwán se puso evidentemente enfermo después de que le entregaran cartas amenazadoras sobre los planes, según su viuda e hija.

Jaroslav Kubera, presidente de la cámara alta del Parlamento checo, murió de un ataque al corazón a la edad de 72 años el 20 de enero, solo tres días después de que él y su esposa regresaran a casa después de un «tenso» banquete de Año Nuevo Lunar en la embajada de la República Popular China en la República Checa.

Se sabe que Kubera, que era el segundo funcionario público más importante del país europeo después del presidente Milos Zeman, no sufría una enfermedad grave en el momento de su muerte.

Más de tres meses después de su muerte, la viuda de Kubera, Věra Kuberová, y su hija, Vendula Vinšová, dijeron a los medios de comunicación checos que creían que las amenazas que Kubera recibía del Partido Comunista Chino (PCCh) habían contribuido a su muerte.

Su esposa dijo en una entrevista el 26 de abril con la televisión checa que habían descubierto dos cartas en la maleta de Kubera, una de la embajada de la R.P. China y otra de la oficina del presidente checo.

Una carta del 10 de enero era de la embajada de la R.P. China dirigida a la oficina del presidente checo. Advertía que si Kubera seguía adelante con sus planes de visitar la isla autónoma de Taiwán, las empresas checas con operaciones en China «pagarían».

«La leí y tuve miedo», dijo su viuda. «Me pareció bastante amenazador».

La carta tenía un sello de recepción de la oficina presidencial, y fue entregada a Kubera por Zeman durante un almuerzo el 14 de enero, lo que llevó a los diputados a exigir una explicación.

La carta amenazaba con que las empresas checas que operan en China continental, como la subsidiaria de Volkswagen Skoda Auto y el prestamista Home Credit Group, sufrirían si Kubera visitaba la isla, que tiene un gobierno autónomo.

«Las empresas checas cuyos representantes visiten Taiwán con el presidente Kubera no serán bienvenidas en China o por el pueblo chino», decía.

«Las empresas checas que tienen intereses económicos en China tendrán que pagar por la visita a Taiwán del presidente Kubera», añadía la carta, señalando que «China es el mayor mercado extranjero para muchas empresas checas como Skoda Auto, Home Credit Group, Klaviry Petrof y otras».

Zeman y el primer ministro Andrej Babis habían expresado anteriormente su preocupación de que los planes de Kubera de visitar Taiwán llevaran a China a tomar represalias contra la comunidad empresarial del país centroeuropeo. Se informa que Zeman tiene una relación más estrecha con el PCCh y Rusia que Kubera.

El presidente del Senado checo, Jaroslav Kubera, el 26 de marzo de 2014. (Občanská demokratická strana [CC BY 2.0])
Kubera dijo el año pasado al anunciar su visita a Taiwán que el movimiento no era anti-China sino pro-negocios. Señaló que Taiwán es el tercer mayor socio comercial de la República Checa en Asia.

El PCCh considera a Taiwán como parte de su territorio y ha impulsado un modelo de «un país, dos sistemas», algo que Taiwán rechaza como entidad autogobernada. El gobierno de Babis ha dicho repetidamente que se adhiere a la política de «una sola China» del PCCh, aunque el año pasado el alcalde de Praga rompió filas para protestar por la política pro-PCCh.

Después de recibir el mensaje «amenazador», Kubera se retiró, según su viuda.

«Vi que estaba muy enfermo. Vomitó, caminó por el jardín, lo que nunca había hecho antes», recordó Kuberová. «Estaba nervioso».

Ella dijo que por primera vez en 52 años desde que estaban juntos, «no confiaba en mí».

«Vino a casa de ese almuerzo (…) otras veces me lo contó todo. Esta vez no me dijo nada, solo que todo fue normal».

«Probablemente no quería agobiarme con eso. (…) Dijo que era bueno, y que no se desanimaría de ninguna manera, que siempre había hecho todo y no hablaría de nada».

Pero se puso aún más «tenso» después de una reunión privada de 30 minutos con el embajador chino Zhang Jianmin en la embajada de Praga el 17 de enero, dijo. Durante esa reunión, el embajador supuestamente le amenazó, diciendo que intentaría que Kubera fuera reemplazado si la visita a Taiwán seguía adelante.

Kubera se derrumbó en su oficina solo tres días después. Según su médico, el ataque al corazón pudo haber ocurrido el 17 o el 18 de enero, coincidiendo con el momento en que Kubera estaba más estresado.

El sucesor de Kubera, Milos Vystcil, anunció una investigación sobre las cartas el 27 de abril. Dijo que la investigación era necesaria para defender la soberanía y la libertad del país.

El Ministerio de Asuntos Exteriores chino dijo en febrero que no sabía de dónde había salido la carta.

Pero un portavoz dejó claro que «China se opone resueltamente a que un país que ha establecido relaciones diplomáticas con China tenga intercambios oficiales con las autoridades de Taiwán de cualquier forma».

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Taiwán criticó la advertencia de Beijing a Praga.

«La presión de China referente a los negocios sobre la República Checa demuestra que ‘la Franja y la Ruta’ es una herramienta de política depredadora, que solo trae consigo efectos contrarios al orden comercial mundial», dijo la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores Joanne Ou.

Reuters contribuyó a la elaboración de este artículo.


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