Las autoridades sanitarias de Argentina reportaron este sábado la primera muerte por coronavirus en el país y en América Latina, un paciente de 64 años, residente de Buenos Aires, que había estado en Europa y padecía diabetes, hipertensión, bronquitis crónica e insuficiencia renal.
El paciente comenzó a mostrar síntomas de fiebre, tos y dolor de garganta el 28 de febrero, tres días después de regresar de su viaje por Europa, y el pasado miércoles ingresó en la unidad de cuidados intensivos del hospital Cosme Argerich de Buenos Aires, aislado de otros pacientes y con asistencia respiratoria mecánica.
El director de Hospitales de Buenos Aires, Sergio Auger, informó a los medios de que el paciente «falleció a primeras horas de la mañana» de hoy, y pocas horas después las pruebas revelaron que se trataba de coronavirus.
Los trabajadores que estuvieron en contacto con el fallecido ya fueron identificados y en las próximas horas se determinará el protocolo a seguir, que según Auger «seguramente» incluirá aislamiento domiciliario.
«Se cumplieron con las normas de protocolo, el hospital está dando el listado de todos los trabajadores que han estado trabajando con este paciente y tendremos una reunión posterior con el fin de determinar la conducta a seguir. Seguramente las medidas constarán en tomar medias de aislamiento, para ellos domiciliario», destacó.
Asimismo, detalló que el sujeto «estuvo en contacto nada más que con su mujer» desde su regreso al país el pasado 25 de febrero.
El Ministerio de Salud emitió un comunicado en el que destacaba que hoy «el servicio de virosis respiratoria ha procesado nueve muestras, arrojando como resultados ocho negativas y una positiva, siendo esta la muestra que confirma el fallecimiento de un paciente con diagnóstico de COVID-19».
Hasta este viernes se contabilizaron ocho casos de contagio por coronavirus, después de que la cartera de Salud confirmara seis nuevos casos en el país sudamericano, todos de personas que estuvieron de viaje en Europa.
El Gobierno argentino busca que quienes visitaron países afectados por este virus permanezcan en sus casas, para lo que este sábado solicitó a los alumnos que no acudan a clase si estuvieron en lugares de riesgo y lanzó una «licencia excepcional» a todos los trabajadores que viajaron al exterior.
La licencia se aplicará a todas aquellas personas trabajadoras del sector público o privado en relación de dependencia que ingresaron al país desde el exterior y no afectará a la «normal percepción de las remuneraciones normales y habituales», según una resolución firmada por el ministro de Trabajo, Claudio Moroni.
La cartera de Educación también difundió un comunicado en el que pide que los alumnos que «hayan regresado de viaje en las áreas de circulación y transmisión de coronavirus» no acudan a los centros educativos por al menos un periodo de 14 días, aunque no presente síntomas.
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