Las elecciones guatemaltecas discurrieron a la sombra de la profunda crisis política que ha generado la detención del presidente de la república, Otto Pérez Molina, y la vicepresidenta Roxana Baldetti, acusados de liderar la mayor red de corrupción aduanera del país.
Los guatemaltecos debían elegir presidente, vicepresidente, 150 diputados, 20 legisladores para el Parlamento Centroamericano y 338 cargos municipales.
Las elecciones discurrieron en un clima de normalidad, y uno de los primeros en llegar a las urnas abiertas a las 8 de la mañana fue el presidente Alejandro Maldonado Aguirre, que ocupa la presidencia después que Pérez Molina renunció para comparecer ante la Justicia.“El voto que los guatemaltecos vienen a dar con confianza y honradamente debe ser recompensado con la misma actitud de los políticos: Después del día del pueblo, vendrá el día de los estadistas, el pueblo cumple, los estadistas tienen que cumplir”, dijo el mandatario interino en declaraciones a la prensa local.
De momento un comediante de la televisión es el favorito
Jimmy Morales un ex cómico de la televisión local y actual candidato a Presidente con el partido Frente de Convergencia Nacional (FCN), fundado por exmilitares vinculados a la Asociación de Veteranos Militares muchos de ellos acusados por violaciones a los derechos humanos, se ha alzado con el triunfo de la primera vuelta, obteniendo en el orden del 25%-26% de los votos.
En según lugar, y ahora quien competirá por la presidencia, se ubicó el millonario empresario Manuel Baldizón del partido Libertad Democrática Renovada (Líder) con un 18.43 por ciento de los votos.
El tercer lugar fue para la ex Primera Dama del país, Sandra Torres Casanova, del Partido Unidad Nacional de la Esperanza, quien recibió un 17.67% de sufragios.
Los observadores consideran que el 80% de participación en las elecciones ha sido una cifra histórica para el país.
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