Las fuerzas de seguridad bielorrusas buscan a cerca de 200 supuestos mercenarios rusos, tras la detención ayer de 33 presuntos miembros de la compañía militar privada rusa Wagner, dijo este jueves el secretario de Estado del Consejo de Seguridad de Bielorrusia, Andréi Ravkov.
«Hay 33 detenidos y hasta otros 200 se encuentran en el territorio de Bielorrusia. Se lleva a cabo su búsqueda, pero es como hallar una aguja en un pajar», dijo Ravkov, citado por la agencia rusa Interfax.
Causa penal por terrorismo
El secretario de Estado indicó que los detenidos este miércoles «están prestando declaración» y precisó que se ha incoado una causa penal por preparativos de actos terroristas.
El embajador ruso en Minsk, Dmitri Mezentsev, fue citado hoy a la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores de Bielorrusia en relación con la detención de los ciudadanos rusos.
Medios rusos han apuntado la posibilidad de que los miembros de Wagner, propiedad del oligarca ruso Yevgueni Prigozhin, cercano al líder Vladímir Putin, se encontraban en Bielorrusia en tránsito a otros países, ya que la compañía militar privada ha participado en los conflictos de Siria y Libia.
Sin embargo, en una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad de Bielorrusia celebrada ayer, Ravkov prácticamente desestimó ese extremo.
«Si se hubiese tratado de un traslado de una compañía militar privada a través del territorio de Bielorrusa, se hubieran recibido aclaraciones a través de algunos servicios. Pues es un asunto muy serio», dijo el secretario de Estado, citado por Belta, la agencia oficial bielorrusa.
Recalcó que las autoridades bielorrusas no recibieron ninguna información ni del Servicio Federal de Seguridad (FSB, antiguo KGB) de Rusia ni del GRU, la inteligencia militar rusa, ni de ninguna otra estructura.
Refuerzo de la seguridad
El líder de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, que busca su sexto mandato consecutivo en las elecciones del próximo 9 de agosto, ordenó reforzar las medidas de seguridad en el país.
Días antes de la detención de los miembros de Wagner Lukashenko advirtió de la posibilidad de que mercenarios pudieran desestabilizar la situación en el país en vísperas de las presidenciales.
La Comisión Electoral Central (CEC) bielorrusa citó hoy a los cuatro rivales de Lukashenko, incluida Svetlana Tijanóvskaya, la candidata en torno a la cual se ha unido la oposición.
«El objetivo de la reunión era advertirnos de posibles provocaciones y que lo más probable es que se produzcan», dijo a la prensa el candidato presidencial Serguéi Cherechen, que agregó que, además de los mercenarios detenidos, «hay grupos que se preparan para entrar en el país antes del 9 de agosto».
Otro de los candidatos, Andréi Dmitriev, señaló que en la reunión, en la que participó Rakov, se les informó de que en las afueras de las ciudades rusas de Pskov y Nevel «se preparan dos grupos para entrar en Bielorrusia».
«Le pregunté (a Ravkov) sobre posibles restricciones a internet. Me respondió que si considera que existe una amenaza directa para la seguridad del país, no descartan desconectarlo», dijo Dmitriev, citado por la agencia Interfax.
La oposición continúa con la campaña
Tijanóvkaya, la abanderada de la oposición, que tiene previsto celebrar hoy un mitin en Minsk, aseguró a la prensa que continuará la campaña electoral pese a advertencias de las autoridades de que pueden producirse provocaciones.
Considerada el principal rival de Lukashenko, Tijanóvskaya consiguió inscribir su candidatura después de que su marido, el conocido bloguero Serguéi Tijanovski, quien había declarado su intención de presentarse a las presidenciales, fuera detenido en mayo pasado.
Más tarde, recibió el respaldo de la campaña del exbanquero Víktor Babariko, en prisión desde junio pasado acusado de evasión de impuestos y lavado de dinero, y de la del exdiplomático Valeri Tsepkako, quien abandonó el país al sentirse amenazado.
Las autoridades electorales bielorrusas se negaron a inscribir las candidaturas de estos dos opositores.
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