El organismo oficial encargado de medir en México el ingreso de las familias, el Producto Interno Bruto (PIB) y la inflación, entre otros indicadores económicos en el país, publicó los índices de pobreza en ese país en 2015, pero despierta suspicacia sobre su credibilidad en algunos sectores.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) fue el encargado de elaborar el Módulo de Condiciones Socioeconómicas (MCS) 2015, pero en el documento especifica que los resultados se lograron con acciones instrumentadas para mejorar el ingreso, lo que no hace a este Módulo comparable con ejercicios estadísticos previos, según indicaron.
De acuerdo a Inegi, en el último año, los ingresos aumentaron 33.6 por ciento y la captación del ingreso de los hogares en México aumentó: fue de 1 billón 524 mil 262.5 millones de pesos.
El reclamo radica en que el mecanismo implementado por Inegi no permite conocer si la problemática aumentó o disminuyó en el último año, porque no lo hace comparable con otros ejercicios.
Un miembro del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), Gonzalo Hernández Licona expresó: «sin embargo las sospechas hacia el Inegi se fundamentan en que no cambió la forma de medir la pobreza, sino que lo que cambió fue la información para hacer esa medición y eso puede alterar el resultado».
Según Licona, estos datos impedirán comparar con el pasado y la importancia de esto es que la función de los indicadores de pobreza, inflación, desempleo, Producto Interno Bruto, etc. es mostrar cómo vamos, no para castigar a alguien sino para demostrar la evolución, corregir –si hay necesidad de hacerlo– y mejorar.
“Con la información del Inegi eso ya no es factible (…) Habrá cifras de ingreso en 2015 y de aquí en adelante sabremos cómo va esa problemática, si es que Inegi no vuelve a modificar la forma de captar variables sin avisarle a nadie”, sostuvo.
González Licona explicó al medio mexicano que Inegi y Coneval firmaron un convenio para realizar esta encuesta y dicho documento se alteró sin siquiera un aviso y todo esto los tomó por sorpresa.
“Nosotros [Coneval] usamos la información del Inegi para calcular la pobreza. Históricamente ha sido así: la usamos para conocer la evolución que ha tenido la pobreza en los estados. Decir que en tal lugar se están haciendo bien las cosas de un día para otro no está bien”, añadió el funcionario.
Miembros de la sociedad civil también se sumaron al reclamo del Coneval, al criticar que se priorizó el dar cifras positivas, antes que tener números reales de la pobreza en el país y combatirla. Días antes se denunció que en el último año, el número de programas sociales aumentó 58 por ciento sin tener resultados notorios.
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