Festival del Doble Siete

20 de agosto de 2015 4:51 PM Actualizado: 04 de octubre de 2017 9:50 AM

El Festival Qi Xi (七夕節, qī xī jié) es un festival tradicional importante en China. Literal al nombre, siempre cae en el séptimo día del séptimo mes en el calendario lunar chino, por lo que los chinos también lo llaman el Festival del Doble Séptimo.

El origen de la fiesta

El festival surgió de una leyenda que se ha contado de diferentes maneras desde una generación a la siguiente desde la dinastía Han (206 a.C. – 220). Es la hermosa historia de amor de un pastor de vacas, Niulang (牛郎), y la hada tejedora, Zhinu (织女).

Niulang, el pastor de vacas, era un hombre amable, joven, honesto, y trabajador. Quedó huérfano de niño y más tarde fue echado de su casa por su hermanastra. Así pues, él vivía solo cuidando una vaca y cultivando alimentos en la ladera. Su única compañía era la vieja vaca.

Un soleado día, Niulang dejó su humilde hogar camino hacia la huerta acompañado de su vaca. Cuando pasaron por un lago cercano, se sorprendió al encontrar siete doncellas celestiales bañándose y jugando en el lago.

Quedó atontado por la belleza de las jóvenes por lo que se escondió detrás de unos arbustos, observándolas jugar. Sus ojos luego se quedaron fijos en la más joven.

De repente, la vaca le habló a Niulang. «Ella es la más joven de las siete hijas del Rey Celestial», dijo. «Su nombre es Zhinu. Si te llevas su túnica, no será capaz de volver y se quedará contigo».

Niulang siguió el consejo de la vaca y sigilosamente tomó las vestiduras celestiales de la joven doncella.

Cuando las juguetonas doncellas estaban listas para irse, Zhinu no pudo encontrar la túnica que le permitiría regresar al Cielo. Con el fin de no perder el tiempo que tenían para regresar, sus hermanas tuvieron que dejarla en la Tierra.

La pobre Zhinu se quedó sola. Se sentía tan desesperada que se puso a llorar.

Niulang no pudo soportar ver a Zhinu llorando. Lamentó haber tomado sus ropas y hacerla llorar. Así, salió de entre los arbustos y se las entregó.

Él sinceramente le pidió disculpas por su transgresión. También confesó que se sintió abrumado por su belleza y que deseaba que ella pudiera ser su esposa.

Zhinu se sorprendió mucho al ver Niulang, sin embargo, lo vio como un hombre amable y atractivo. Por otra parte, se sentía atraída por su compasión y honestidad. Dado que no podía volver a su casa en el cielo, ella accedió a ser su esposa.

Niulang y Zhinu vivieron una vida feliz juntos. Niulang cuidaba de la vaca y trabajaba en el campo, mientras que Zhinu tejía muchas cosas hermosas en casa. Pronto, la artesanía de Zhinu se hizo conocida y la gente venía de lejos para comprarlas.

Unos pocos años pasaron, y tuvieron dos hijos, un niño y una niña. Se amaban y respetaban mutuamente y trabajaron duro para cuidar de su familia.

Aunque habían pasado años en la Tierra, había sido sólo un corto tiempo en el Cielo. El Rey y la Reina Celestial pronto descubrieron que su hija menor había desaparecido.

La Reina Celestial estaba enojada porque Zhinu había violado la conducta celestial, se había quedado en la Tierra y se casó con un mortal. Por esto, envió soldados celestiales para traerla de vuelta.

La vieja vaca sabía lo que iba a suceder y le advirtió a Niulang: «Escucha, voy a morir pronto. Después de mi muerte, me deberás sacar la piel rápidamente. Si se ponen mi pellejo, tú y los niños podrán volar hacia el cielo». Después de estas palabras, la vaca murió.

Niulang sintió pesar por la muerte de la vaca. Sin embargo, siguió su consejo y la descueró, para luego enterrarla al lado de un árbol cerca de su casa.

Justo cuando entró a la casa, el cielo de pronto se oscureció y el viento comenzó a rugir. Los soldados celestiales aparecieron, irrumpieron en la casa y se llevaron Zhinu. Desgraciadamente, Zhinu no pudo liberarse ni mirar a Niulang y los niños que estaban llorando.

Recordando el consejo de la vieja vaca, Niulang se puso rápidamente bajo la piel de la vaca, puso a los niños en dos cestas para llevarlos con él, y luego corrió tras Zhinu. Corrió lo más rápido que pudo y la distancia entre él y su esposa parecía hacerse cada vez más corta.

En el momento en que estaba a punto alcanzarla esposa, la Reina Celestial sacó una de sus horquillas de oro y asestó un golpe entre ellos. Al instante, un río ondulante se creó y los separó. Ese río llegó a ser conocido más tarde como la Vía Láctea.

Desde ese día, Niulang y Zhinu estuvieron separados el uno del otro, cada uno en una de las dos orillas. Zhinu estaba en un lado del río celestial y Niulang y sus hijos estaban en el otro lado.

Día tras día, con lágrimas en los ojos, se miraban el uno al otro a través del río ancho y estrellado, y anhelaban estar al lado del otro.

La Reina Celestial, finalmente, se sintió tocada por su profundo amor, por lo que les permitió reunirse una vez al año. Eso fue en el séptimo día del séptimo mes lunar.

Esta noche, cada año, una enorme bandada de urracas viene y forma un puente con sus cuerpos sobre el río celestial. Es solamente en esta noche que Niulang y Zhinu pueden atravesarlo y estar juntos.

En esta noche encantada, cuando el cielo está salpicado de estrellas, la gente puede ver la Vía Láctea extendiéndose desde el norte hacia el sur. Hay dos estrellas especialmente brillantes en cada lado de la Vía Láctea. La estrella Altair es vista como Niulang y la estrella Vega como Zhinu.

El Festival del Doble Séptimo es a mediados de verano, cuando el clima es cálido y la hierba y los árboles están en su mayor verdor. Si escuchas con atención, se pueden escuchar los murmullos de Niulang y Zhinu que expresan su amor y añoranza.

Tradiciones del Festival

Hay muchas variaciones de las celebraciones del Festival de Qixi en China. La costumbre más popular para el festival es que, en la tarde del séptimo día del séptimo mes lunar, las mujeres y las niñas oran para tener manos más diestras y hábiles.

1. Enhebrar una aguja

Desde la dinastía Han, enhebrar agujas lo más rápido posible a la luz de la luna ha sido la actividad más realizada para atraer bendiciones y tener mayores habilidades. La que pueda enhebrar la mayor cantidad de agujas en un minuto es reconocida como quien será la más hábil en el futuro. En Hong Kong, las mujeres jóvenes muestran sus costuras y hacen ofrendas bajo el cielo de la noche.

2. Adorando a Zhinu

Tradicionalmente, las mujeres jóvenes oraban por la belleza. Particularmente esta noche, lavan ceremoniosamente su pelo en un rito de belleza.

El día también ha tenido una gran importancia para las mujeres jóvenes al adorar a Zhinu. Las actividades se organizan con antelación por varias hermanas cercanas. Por lo general, preparan una mesa con té, vino, longans, dátiles rojos, nueces, semillas de melón, y otros aperitivos. Las mujeres jóvenes se sientan alrededor de la mesa y hacen bordados para mostrar sus habilidades. También miran hacia la estrella Vega y oran por un buen esposo y una vida feliz.

En algunas áreas, las jóvenes construyen «santuarios» de papeles de colores, fruta fresca y flores en homenaje al amor eterno del honesto Niulang y la bella Zhinu.

3. Tallado de frutas

El tallado de frutas es otra tradición del festival. En este día, como otra manera de mostrar destreza, se pueden encontrar flores y pájaros tallados a partir de varias frutas. La suave piel de diferentes tipos de melones son transformados en la fruta ideal para tallar.

4. Hacer y comer Qiao Guo

En el día de doble séptimo, las personas suelen comer qiao guo (巧 果), una especie de pastel delgado, frito, a base de harina, azúcar (o miel), y sésamo. Qiao guo significa literalmente aperitivos de manos hábiles o inteligentes.

Muchas mujeres harán qiao guo en casa o en un grupo. En primer lugar, ponen el azúcar en una olla y lo calientan hasta que se transforme en almíbar, luego añaden la harina y el sésamo. Cuando la mezcla se convierte en una masa suave, la ponen sobre la mesa y la uslerean (Aplanar o dar forma) hasta dejar una hoja delgada. Ésta se corta en rectángulos o formas redondas alargadas. Se pliegan en diferentes formas y se fríen hasta que toman un color amarillo dorado.

En la parte oriental de China, un grupo mujeres amigas se reúnen para hacer bollos especiales. Algo parecido al cobre y una fecha se ponen dentro de un par de bollos. Se cree que la que coma la bola de masa con el «cobre» tendrá muchas riquezas y la que coma de la bola de masa con la fecha se casará pronto.

5. Celebrando el cumpleaños del ganado

En honor a la mítica vaca que se sacrificó para Niulang y Zhinu, en algunas zonas rurales los niños recogen racimos de flores silvestres y los cuelgan en los cuernos de los bueyes. Esta costumbre de celebrar el «cumpleaños» del ganado es para conmemorar la compasión de la vaca.

No importa la región o las tradiciones, por la tarde, las familias limpian los patios, sirven las mesas con qiao guo, raíces de loto, semillas de loto, y otros alimentos, y se sientan juntos a ver cómo Niulang (como Altair), y Zhinu (como Vega), «se encuentran» en el cielo.

Día de San Valentín chino

El Festival del Doble Séptimo es un día para expresar el amor devoto,  por lo que se conoce a menudo como el Día de San Valentín chino. Por desgracia, salvo en algunas zonas rurales, las costumbres tradicionales para este día se han debilitado o han sido abandonados en China continental.

Hoy en día, la juventud china a menudo no está familiarizada con el origen del Festival Qixi y las tradiciones del día de San Valentín chino, y son más propensos a celebrar el Día de San Valentín occidental el 14 de febrero.

Sin embargo, la historia de amor de Niulang y Zhinu se arraigó en los corazones del pueblo chino, y en la mayor parte de Asia, es un recordatorio muy conocido de la verdadera devoción.

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