La intensa sequía que azota a Cuba en los últimos meses ha provocado que al cierre de marzo un 90 por ciento del territorio de la isla registrara un bajo nivel de precipitaciones, afectando a unas 470,000 personas.
El pasado mes se registraron como promedio en el occidente, el centro y el oriente del país caribeño déficit acumulados de 5,2, 9,3 y 9,4 milímetros de lluvias respectivamente, precisa un informe del Centro del Clima del Instituto de Meteorología citado por medios estatales.
Las provincias más afectadas por la sequía son Pinar del Río, Artemisa, Mayabeque y La Habana en la zona occidental, Cienfuegos y Camagüey en el centro, y las orientales Granma, Santiago de Cuba y Guantánamo.
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Un total de 135 municipios presentaron déficit de moderados a extremos en más de un 25 % de sus áreas, detalla el boletín meteorológico, que subraya que la temperatura media del país en marzo fue de 24.6 grados Celsius, con una anomalía positiva de 1°C.
Los efectos de la sequía han afectado especialmente el abastecimiento de agua en La Habana, donde el 21,8 por ciento de sus 2,2 millones de residentes han estado afectados, según datos oficiales.
Un total de 468,720 personas en la capital cubana han sido reportadas como perjudicadas por la empresa estatal Aguas de La Habana a finales de marzo, y de ellas 58,000 reciben el líquido a través de camiones cisterna, mientras a otras se les ha alargado el ciclo de distribución y han cambiado los horarios de entrega.
Entre las medidas para mitigar la escasez de agua, directivos de la empresa han indicado que se amplían importantes conductoras, se perforan nuevos pozos y se profundizan otros.
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