Todos hemos conocido a esa persona que, con sus refinados modales y de forma segura pero cómoda en que se comporta, se presenta como un soplo de aire fresco —por breve que sea la interacción. Tal vez incluso te inspire a ser un poco más recto, un poco más educado con la siguiente persona que conozcas, o cambiar tu comportamiento apresurado por uno más tranquilo.
Esto es lo que una familia anfitriona parisina hizo por Jennifer L. Scott durante sus días en la universidad, y lo que ella ha convertido en un efecto dominó, inspirando a miles de personas a través de sus libros y su blog.
Scott, una escritora, ama de casa, madre de cuatro hijos y conocedora de la vida cotidiana, escribe y produce videos sobre cómo ser chic y cómo vivir una vida elegante —que es mucho más que un cierto look. Se trata de aplomo, comportamiento y deleite, en lugar de comprar las cosas correctas y cuidar la imagen de uno mismo. Sus escritos y videos sobre la feminidad, las tareas domésticas y la apreciación del arte han llamado la atención de sus seguidores, quienes le dicen que los ha inspirado a ser valientes y no solo a seguir a la multitud.
«Toda mi filosofía se basa en hacer lo mundano hermoso», dijo Scott. La mayor parte de nuestra vida se vive a través de pequeños momentos, haciendo cosas rutinarias. No hay razón para no sentir alegría de ellos.
Un modelo a seguir muy chic
Un viaje al sur de Francia a la edad de 18 años fue el primer contacto de Scott con una elegancia aparentemente sin esfuerzo y un entusiasmo por la vida. Unos años más tarde, la chica del sur de California pasó medio año estudiando en el extranjero en París, donde su familia de acogida le dejó una impresión inolvidable.
Madame y Monsieur Chic (nombres ficticios, por supuesto) y su hijo siempre estaban bien vestidos, eran educados y estaban tan cómodos en su propia piel que Scott no pudo evitar darse cuenta. Usaban su mejor vajilla en cualquier día de la semana, disfrutaban enormemente de las pequeñas cosas de la vida y tenían rituales y costumbres inmaculadas construidas sobre la tradición, como Scott escribiría más tarde. Más que elegancia sin esfuerzo, Scott también aprendió de sus anfitriones que «ninguna ocasión es demasiado pequeña para vivir bien».
«Es que esto realmente me ha obsesionado en un buen sentido», dijo Scott.
Con su armario lleno de prendas de vestir en las que no había pensado mucho, sus hábitos de consumir golosinas y el estilo de vida informal al que estaba acostumbrada, Scott no regresó exactamente de su viaje lista para revisar su estilo de vida. Pero la dramaturga escribió sobre la experiencia, incluso la convirtió en una obra de teatro, y comenzó a escribir un blog con el espíritu de vivir bien como The Daily Connoisseur. El nombre proviene de una novela menos conocida de Agatha Christie (cuando era niña, Scott quería ser una escritora de misterio), en la cual se describe a un personaje como un conocedor de la vida diaria, una descripción perfecta de la alegría de vivir que había experimentado en su primer viaje a Francia.
«Creo que el primer cambio importante que hice fue el armario de 10 artículos. Apenas lo hice, fue una especie de efecto bola de nieve», dijo Scott. Se convirtió en madre y ama de casa, y pensó más en cómo crear un hermoso ambiente hogareño, donde todos se pudieran deleitar con lo cotidiano.
«Lo chic es realmente un estado de ser, es una forma de pensar», dijo. «Se trata de ser feliz con tu vida tal y como es, disfrutarla tal y como es, y tener esa paz interior que tanta gente busca».madre de una niña de 6 meses, escribió «Lecciones de Madame Chic», que ella misma publicó y que se convertiría en el mejor vendido. Luego vino «En casa con Madame Chic», y «Pulir tu porte con Madame Chic», y más recientemente un libro para niños que hace divertida la etiqueta, «Niños que conocen».
Encontrando el verdadero estilo
La popularidad del primer libro de Scott pudo haber venido porque capturó lo que ella sintió que ahora es raro en el mundo de hoy.
«Estoy escribiendo sobre un estilo de vida que realmente se está extinguiendo», dijo Scott. Incluso entre las familias anfitrionas parisinas con las que se alojaban sus compañeros, la familia Chic era inusual por su linaje aristocrático y sus tradiciones anticuadas.
«El mundo se está volviendo más informal con todo, con la forma de vestir, de comer, de vivir. Así que creo que la gente quedó fascinada con ese estilo de vida, y realmente fue un fragmento de vida en el tiempo, que tal vez nunca vuelva», dijo.
Chic es casi sinónimo de estilo personal, y fue una de las primeras cosas que Scott notó también. Los franceses en el cine y en persona usaban armarios editados, no expansivos. Las mujeres que Scott conoció sabían lo que les convenía y lo llevaban como un uniforme.
De vuelta a casa en California, después de un memorable deterioro del armario, Scott se comprometió a poner su mejor pie adelante y nunca ha mirado hacia atrás. No se trata de vestirse para impresionar, se trata de cuidar algo modesto, presentable y auténtico.
Irónicamente, esto es algo atractivo pero difícil para muchas mujeres.
«No puedo decir cuánta gente —mucha gente, me dice: ‘Jennifer, me siento muy extraña usando un vestido'», dijo Scott. «Es curioso porque las mujeres han llevado vestidos durante miles de años, pero de repente ahora es raro si llevas uno». Dicen: ‘Quiero abrazar mi naturaleza más femenina, pero me siento incómoda al hacerlo'». Ellas me dirán: «He usado leggings los últimos cinco años» o «Solo uso jeans y camiseta».
Un vestido de sol es más cómodo que unos vaqueros ajustados en un día caluroso, pero es el vestido lo que hace que las mujeres se sientan incómodas porque están cohibidas. «Porque la sociedad se ido a un lugar donde si usas un vestido de sol, ‘Bueno, ¿a dónde va? ¿A quién trata de impresionar?» dijo Scott. Ella anima a las demás a no permitir que ese bonito vestido permanezca en desuso en la parte de atrás del armario, y lugar de eso, usar los artículos más bonitos para las ocasiones cotidianas.
La moda siempre ha sido una fascinación de la sociedad, y hoy en día no es diferente. Scott tiene una serie de videos («3 artículos sobre ropa«) acerca de la reciente y reflexiva controversia sobre lo que llevamos puesto.
Pero lo chic no es solo el exterior, hay mucho trabajo interior, lo que ella llama el arte perdido de cultivar el equilibrio. Scott dijo que una vez que uno encuentra su propio estilo, se adhiere a él. Se pueden soportar algunos comentarios extraños al inicio, como con cualquier cambio de estilo de vida, pero en última instancia, ¿por qué la gente en su vida no quiere que usted intente mejorarse y buscar la felicidad? No se rinda a la idea de grupo.
La propia Scott ha tenido mucha experiencia en esto porque al estar en las redes sociales, todos sienten que es su derecho decirle lo que debe hacer o decir. Recuerda que no hace mucho tiempo, cuando estaba lactando, compró el mismo vestido en cinco estampados como parte de su vestuario para las cápsulas y recibió críticas por usar el mismo modelo.
«Hablo desde mi corazón y dejo que la gente a la que no le gusta se quede en el camino», dijo Scott.
La magia de las tareas domésticas
Como Scott escribió en su tercer libro, el equilibrio es una combinación de cinco componentes: confianza, compostura, compasión, presentación y presencia. Es un proceso y una forma de vida, un viaje y no un destino, dijo Scott. Esto significa que todos los que aspiran a tener equilibrio lo encontrarán difícil a veces, y eso es natural. El equilibrio puede ser fácil durante los momentos de paz en un hermoso escenario, pero a menudo la vida no es así. Scott dijo que desde que tiene hijos pequeños, está lejos de no agotarse nunca. Sus momentos de tranquilidad son por la mañana y por la noche, cuando puede tener tiempo para escribir en soledad.
En un video reciente, ella habló de la pérdida de su dignidad como madre cuando su hijo pequeño empezó a correr por la sala, derramando felizmente un bote de pimienta por toda la alfombra mientras gritaba y sella se lanzó a toda velocidad para detenerlo.
«Siempre es un desafío, especialmente cuando se tienen niños pequeños, implementar una vida elegante, pero uno simplemente se adapta», dijo Scott con una sonrisa. Pero tener paz interior se trata de ser adaptable.
Por ejemplo, Scott usa manteles y pone la mesa muy bien todos los días. «La cosa es que mis hijos son pequeños. Yo tengo de todo, desde un niño de 20 meses hasta uno de 9 años», dijo Scott. Y los niños muy pequeños inevitablemente se ensucian.
«Todos los días hay comida aplastada en la mesa, agua derramada, leche derramada, todo derramado. Pero seguimos usando el mantel todos los días porque realmente creo que el ambiente es importante y que establece sus afectos, por así decirlo, como dice Charlotte Mason», dijo, refiriéndose a su filosofía de educar en el hogar que usa con sus hijos.
Scott cree que todo el mundo debería tener una filosofía para su hogar, y ella cree en hacer del hogar un lugar propio, no solo donde estamos sino cuando estamos de un lugar a otro.
«Quiero que mi hogar sea un lugar muy pacífico», dijo Scott, que creció con cenas familiares y música clásica en el hogar. «Podemos lograrlo a través de la música que ponemos, quiero que haya muchos libros para que la gente siempre pueda tomar un libro cuando quiera, con mucha comida, algo para hornear, algo para cocinar todos los días. Es un lugar hermoso. Quiero que mis hijos amen la vida hogareña, para que cuando crezcan, siempre estén deseando volver a visitarme, y que siempre tengan recuerdos de los olores y de todo lo que vean aquí».
Nuestros hogares se convierten en una parte formativa de las vidas que llevamos al mundo. En muchos sentidos, los modales que practicamos en casa, y la forma en que nos vestimos y nos comportamos incluso cuando no hay compañía, son indicativos de cómo vamos a interactuar con el mundo en general, dijo Scott.
Fue la vida en el hogar la que le hizo recordar sus lecciones de París y analizar qué podía replicar. Ella destila esta sabiduría en forma muy práctica en sus libros y videos: Sé frugal, pero compra lo mejor dentro de tu presupuesto, y úsalo en tu vida diaria. Disfruta de lo que tienes, y trata los aspectos mundanos de la vida como significativos (lavar los platos es una contribución valiosa para crear un hogar hermoso), porque realmente son las pequeñas cosas que se suman para crear el todo.
Como C.S. Lewis escribió, Scott cita, «La ama de casa tiene la mejor carrera«.
Descubriendo el arte
Elevar lo cotidiano a un arte no es la única forma en que todos podemos ser expertos; Scott también anima a la gente a descubrir el arte.
Scott ama la música clásica, el arte impresionista, el teatro en vivo, las películas antiguas y las historias de detectives, y nos recuerda que el arte no es solo para los expertos. Ella creó una asignación chic mensual, en parte para presentar a la comunidad a un nuevo compositor, poeta o artista, y en parte para hacerse responsable de esto también. Ser chic también se trata de enriquecer su mente.
«Se trata de la apreciación del arte», dijo Scott. A veces pronunciará un nombre que no es del todo correcto —y también lo escuchará en los comentarios— y tocará el piano aunque esté lejos de ser una experta, pero lo disfrutará de todas formas. «Es para animar a la gente, no se necesita ser Rachmaninoff para tocar el piano, puede ser torpe y cometer errores y aún así disfrutarlo».
Scott realmente fomentó el amor por el arte cuando logró experimentarlo en persona y en toda su grandeza en París, por lo que anima a otros a experimentar el arte. Ir al ballet, ver el teatro en vivo, ver una ópera. Ella tiene razón, por supuesto; si el arte encierra lo mejor de la vida, ¿por qué privarse de eso?
Si el estilo de vida de Scott realmente le suena anticuado, o en su camino, eso no lo disuade en absoluto. Scott no está tratando de imponer su visión a los demás, sino de mantenerse fiel a sí misma y ofrecerles aliento para seguir el curso si lo necesitan. Más de una década después de crear su blog, la gente sigue encontrando su trabajo y buscando consejos sobre cómo ser más chic y estar más preparada para vivir una vida hermosa.
«Me gustaría proyectar la belleza en el mundo», dijo Scott.
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