Miles de enojados manifestantes salieron a las calles de Río de Janeiro este viernes para protestar contra el presidente interino, Michel Temer, y los Juegos Olímpicos al grito de “¡No habrá antorcha!”, a horas de la ceremonia inaugural.
Con carteles que portaban mensajes como “Juegos de la exclusión” o “Estado asesino”, unos 500 manifestantes se acercaron en la tarde a 1.400 metros del estadio Maracaná, escenario el viernes de la apertura de las primeras Olimpíadas de la historia en Sudamérica, y al final de la protesta fueron dispersados por la policía con gas pimienta y bombas de estruendo.
La protesta fue liderada por manifestantes vestidos de negro, encapuchados o con los rostros cubiertos con máscaras antigás y pañuelos, y eran escoltados por policías en uniforme de combate y a caballo, mientras helicópteros sobrevolaban la zona.
Más temprano, unas 3.000 personas se reunieron por la mañana frente a la playa de Copacabana para manifestarse contra Temer, encargado de inaugurar los Juegos por la noche.
“Una oportunidad perdida”
“Esta Olimpíada es una oportunidad perdida, es un sueño robado. No hay legado para la población ni legado para el medio ambiente”, dijo el manifestante Pedro Cunha, mientras quemaba una camiseta verde y amarilla de la selección nacional de fútbol poco antes del enfrentamiento con la policía.
A medida que se desplazaban, varios de sus integrantes golpeaban basureros y postes de luz con palos y bates. Al menos un manifestante fue detenido.
“Calamidad olímpica”, leía un inmenso cartel en un juego de palabras con la frase “Ciudad olímpica”.
La presidenta Dilma Rousseff fue suspendida en mayo mientras es juzgada por el Congreso por presunto maquillaje de las cuentas públicas. Fue reemplazada de manera interina por su exaliado y vicepresidente, Michel Temer, a quien Rousseff acusa de tramar un golpe en su contra.
“Esta fiesta no fue hecha para el pueblo, los eventos están lejos de donde vive la población pobre. Estoy protestando por la precariedad de nuestras escuelas públicas y por nuestros salarios, que cobramos en cuotas”, dijo a la AFP el maestro Guilherme Moreira Dias, de 38 años, que trabaja en una escuela primaria de Duque de Caxias, una de las zonas más pobres de Rio.
Andrea Pavoni, académico italiano de 35 años que vive en Rio, que estudia geografía urbana y ayudó a organizar la protesta, aseguró de su lado que los Juegos “han acelerado el proceso de división de la ciudad en una parte para los ricos y otra para los pobres, sin educación y ni servicios”.
“Una fachada”
“No a las Olimpíadas”, “Fuera Temer” y “Fuera todos”, estaba escrito en algunos de los carteles que portaban las personas congregadas frente al lujoso hotel Copacabana Palace el viernes de mañana, a pasos del estadio olímpico de vóley playa, frente a las miradas de cientos de turistas e integrantes de delegaciones de todas partes del mundo.
“Queremos aprovechar ahora que la atención está en Brasil para denunciar lo que está sucediendo, cómo estamos en camino a una dictadura”, dijo Ubiratan Delgado, un ingeniero de 59 años.
Una pancarta mostraba a Temer vestido como el Guasón de Batman, acercando un hacha a la cabeza de un obrero brasileño.
“Están haciendo las Olimpíadas en momentos en la gente la está pasando muy mal. La Olimpíada es una fachada, un show. No representa la realidad de Brasil. Quieren mostrar todo lindo y perfecto”, dijo Ricardo Parente, un psicólogo de 59 años.
Dilma Rousseff: “Soy Cenicienta”
Muchos manifestantes estaban vestidos de rojo, el color del izquierdista Partido de los Trabajadores de Rousseff y su antecesor Luiz Inacio Lula da Silva.
Rousseff puede perder su mandato de forma definitiva a fines de agosto. Si eso sucede, Temer gobernará hasta el 31 de diciembre de 2018.
La presidenta suspendida decidió no aceptar la invitación para asistir a la ceremonia inaugural porque no quiere ser la “Cenicienta” de los Juegos.
“No creo que sea apropiado que la presidenta apartada asista a una ceremonia cuyo maestro de ceremonia es un presidente ilegítimo. En esta historia de los Juegos, yo soy la Cenicienta, la invitan a la fiesta, pero se tiene que ir antes, vive en las cenizas”, dijo recientemente al diario La Tercera.
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.