La preocupación por los brotes de zika, sumada a la “superbacteria” que se encontró en las aguas recientemente y la inseguridad en las calles, hacen que Río de Janeiro se vuelva un escenario complicado para recibir a millones de personas de distintos contingentes para celebrar los Juegos Olímpicos 2016.
A solo un mes del comienzo del encuentro deportivo, la violencia está en aumento y los agentes de policía dicen que no reciben su salario desde hace meses, por lo cual comenzaron a realizar protestas callejeras la semana pasada, incluyendo otra en el aeropuerto.
En la zona de arribos del Aeropuerto Internacional de Galeao, este lunes los agentes montaron una protesta de más de un centenar de trabajadores de los servicios de emergencia, inclusive bomberos. Este acceso será uno de los principales en el que ingresarán millones de turistas, sin embargo el recibimiento que les prepararon no es el más cálido precisamente.
Los manifestantes sostenían carteles que decían “Bienvenidos al infierno”. «A la policía y a los bomberos no se les paga, quien venga a Río de Janeiro no estará seguro».
Río es la primera ciudad de Sudamérica en ser sede de unos Juegos Olímpicos, pero cuando apenas falta un mes para la ceremonia inaugural en el estadio Maracaná (5 de agosto) crecen los temores sobre la capacidad de la policía para controlar la violencia y la criminalidad durante el mayor evento deportivo del planeta. Durante el primer trimestre de 2016, los asesinatos aumentaron un 15% en Río respecto al mismo periodo del año pasado, de acuerdo a Clarín.
El estado de Río de Janeiro -que controla la policía militar de la región- emitió una orden ejecutiva solicitando fondos de emergencia del gobierno federal para pagar sus bonos y horas extraordinarias a los agentes.
El rescate de 2.900 millones de reales (850 millones de dólares) se puso a disposición la semana pasada, después de que el gobernador interino Francisco Dornelles dijo que los Juegos podrían ser un «gran fracaso» sin los fondos. Se cree que el pago retroactivo será distribuido esta semana, según informó CNN.
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