El tenis, como todos los deportes de élite, es una eterna competición contra varios rivales en la que cualquier detalle puede cambiar el destino de un partido y, de paso, de la carrera de un jugador. En este contexto el caso de Andy Murray es emblemático: el tenista escocés es uno de los mejores de los últimos diez años y tal vez el mejor entre los del Reino Unido desde los tiempos de Fred Perry. De hecho Murray ha sido el único tenista británico en ganar Wimbledon después de Perry, leyenda del tenis del Reino Unido e incluso inspirador de una marca de ropa deportiva.
En los últimos tiempos, con el bajón de Rafa Nadal y el lento declive físico de Roger Federer, Murray ha sido el principal rival de Novak Djokovic, el número 1 del ranking ATP. Pero el serbio está en un momento muy dulce y Murray parece no haber encontrado la manera de poder ganarle. De hecho en la final del Australian Open que se jugó en enero de este año, Djokovic ha ganado de manera contundente sin conceder ni un solo set al escocés, eso un año después de haber perdido la final del mismo torneo, siempre contra Djokovic.
Murray, que en este momento parece el primero entre los mortales – ya que Djokovic está en otro nivel – ha perdido cinco de los últimos seis enfrentamientos contra Djokovic, con la única excepción de la victoria en la Roger’s cup en el agosto de 2015. Según un análisis realizado por bwin, el dato que más evidencia la tendencia de Murray en caer en el momento clave son las cinco finales del Australian Open perdidas en los últimos siete años, una contra Federer en 2010 y cuatro contra Djokovic en 2011, 2013, 2015 y 2016. Una tendencia negativa que refleja tanto la mala suerte como la poca concreción de Murray en las finales de este torneo, algo que nunca ha podido ganar. De hecho, los únicos trofeos del Grand Slam que Murray ha conseguido levantar han sido el Us Open y Wimbledon.
No cabe duda de que los responsables de estas derrotas de Murray hayan sido Djokovic y Federer, respectivamente el que ahora domina y el que dominó durante años la escena del tenis mundial. El serbio lleva años a un nivel inalcanzable y cuenta con mucho margen de mejora, al tener solamente 28 años. El suizo, aún con 35 años, hace de su técnica exquisita el primer recurso y sigue dando lecciones de gran tenis. Estos dos han vivido la rivalidad más intensa de los últimos años, con un balance general de 22 partidos ganados cada uno. El último enfrentamiento entre Djokovic y Federer, ha visto el primero imponerse en la final del Us Open 2015 por 3 sets a 1.
Los sueños interrumpidos de Murray tienen como responsables a dos grandes del tenis mundial de hoy de la toda la historia. Al escocés solo el tiempo dirá si podrá vengarse.
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.