A dos años de seguimiento, avanzaron los procesos de impugnación contra la siembra de cereal transgénico interpuestos a varias empresas -incluido el gobierno mexicano-, señaló en una entrevista la directora de la fundación Semillas de Vida, Adelita San Vicente Tello, quien ve la posibilidad de iniciar un juicio para prohibir este tipo de siembra.
San Vicente aseguró que se presentaron más de 90 impugnaciones y 22 amparos, obteniendo un avance significativo en el proceso de demanda. El seguimiento consistió en impugnar las autorizaciones otorgadas en el 2009 por el ex presidente Calderón para sembrar transgénicos afectando los intereses del país, según comentó en una entrevista con Aristegui Noticias, el 17 de agosto del 2015.
«Han contaminado este centro de origen del cereal, que podemos decir que es el más importante por su volumen de producción, por su adaptabilidad y versatilidad en el mundo”, señaló la directora.
Los centros de origen son los sistemas alimentarios de los distintos pueblos donde se domesticaron las plantas silvestres. Estos centros se localizan en varios puntos del territorio mexicano, como los complejos de Mesa Central, Pepitilla, Tuxpeño y Zapalote, según la Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras de Productos del Campo (Anec).
La administración del ex presidente Calderón protegió los intereses de los corporativos empresariales privados afectando la biodiversidad y los intereses del pueblo mexicano, explicó Aleira Lara, coordinadora de la campaña de agricultura sustentable de Greenpeace México. “Hay un fuerte interés por parte de las empresas. Tienen la patente por un periodo menor a 20 años, así́ que tienen pocos años para recuperar su inversión”, informó asimismo Enec.
Dentro de los logros del proceso, la directora San Vicente solicitó se detuviera la siembra de transgénicos hasta que comience el juicio. “Nosotros pedimos a los jueces se suspendieran cualquier siembra de maíz transgénico en tanto se llevara adelante el juicio, y esa medida fue concedida. Por eso tenemos dos años, un poco menos, sin siembra de maíz”, afirmó.
“Estamos a la espera de que la medida cautelar se establezca como definitiva y que el juicio comience y se debata sobre este importante tema”, agregó.
Hace un año, 24.450 ciudadanos mexicanos, entre ellos, expertos en el tema, científicos, biólogos, químicos, profesores, académicos universitarios, firmaron una carta dirigida al Presidente Enrique Peña Nieto, contra autorizaciones de siembra de maíz transgénico, según la Unión de Científicos Comprometidos por la Sociedad (UCCS), informó La Gran Época el 10 de agosto del 2014.
Estos especialistas mexicanos escribieron en la carta:
“Estamos convencidos que el maíz transgénico es malo para México. Las empresas transnacionales que promueven estas semillas buscan ganar dinero. Para nosotros la salud del cuerpo y la salud de la Tierra no tienen precio, sabemos que el maíz transgénico va a contaminar nuestros maíces nativos si se siembra en México. Sabemos que esta contaminación no tendrá remedio una vez que comience. Sabemos que la contaminación significará la ganancia de unos cuantos, a costa de perjudicar a la mayoría de los mexicanos”, según éste medio internacional.
Un avance anterior a éste caso fue cuando, el 10 de octubre del 2014, una de las medidas precautorias fue dictada por un Juzgado Federal del país, dictaminando que se ordenara a la Secretaría de Agricultura, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA,) y a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) de México, abstenerse de realizar actividades tendientes a otorgar permisos de liberación al ambiente de maíz genéticamente modificado (OGM), informó La Gran Época, el 11 de octubre del 2013 .
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