Este viernes 14 de octubre el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aprobó el Presupuesto Nacional de 2017 y, durante la alocución amenazó a gobernantes opositores con bloquearles fondos durante el próximo año en el caso de que no firmen una “carta de acatamiento” al Tribunal Supremo de Justicia —el cual declaró en una sentencia que el presupuesto no pasará por la aprobación de la Asamblea Nacional (AN), como la Constitución lo señala.
“Gobernadores y alcaldes deben firmar carta de acatamiento al Tribunal Supremo de Justicia. Al que no me la firme no le doy ni medio”, dijo el dirigente venezolano en las puertas del Panteón Nacional, donde se efectuó el acto.
De esta manera el mandatario amenaza a los alcaldes y gobernadores con no cederles parte del presupuesto que corresponde en el caso de que no firmen un documento que avala la reciente sentencia del máximo órgano del sistema judicial de Venezuela, en la cual se declaró que el procedimiento constitucional de que el presupuesto nacional sea aprobado por el Parlamento ya no es necesario.
Esta sentencia fue catalogado por varios juristas como anticonstitucional y como un acto arbitrario en contra del poder popular que respalda al poder legislativo.
Por otra parte, Maduro informó que para las finanzas de Venezuela en 2017 se calcularon Bs. 8 billones 479 mil 301 millones.
Así mismo, 3,25 % del presupuesto total va a ser sostenido en bolívares con ingresos petroleros. 11,9 % se va a financiar con aportes de las empresas estatales.
Por último, el presidente Nicolás Maduro enviará una carta a la presidenta del Tribunal Supremo de Justicia, Gladys Gutiérrez para que el presupuesto sea aprobado por el máximo tribunal del país.
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