Gongsun Jingmao sirvió a los gobiernos de la dinastía del Norte y del Sur y la dinastía Sui (581-618 d.C.).
Durante la batalla para conquistar el sublevado Estado de Chen en el Sur, muchos soldados se enfermaron. Jingmao usó su propio dinero para comprar alimentos y medicamentos, lo que salvó la vida de miles de soldados.
Cuando Jingmao renunció a su cargo debido a que lo aquejaba una enfermedad, sus subordinados y la gente de su distrito, se pararon a lo largo de la carretera llorando y rogándole se quedara.
Jingmao más tarde fue nombrado gobernador del distrito de Daozhou. Utilizó su salario para comprar ganado, gallinas y cerdos que se distribuyeron entre los ancianos sin hijos, las viudas y los discapacitados para ayudarles a ganarse la vida.
- Más: Hijo del ex mano derecha de Mao dice que Shen Yun es el ‘pináculo del arte’
- Qué se siente tocar corno francés junto con instrumentos chinos
Con frecuencia cabalgaba solo y visitaba a los aldeanos. Examinaba sus conductas, propiedades y alimentos. A menudo elogiaba públicamente a los que exhibían buena conducta, y cuidaban de sus bienes y alimentos. Disciplinaba en privado a los que habían hecho mal para darles la oportunidad de reflexionar y cambiar.
Bajo su gobierno, la gente aprendió a respetar y ayudar a los demás. Los hombres ayudaban a sus vecinos que no tenían suficiente mano de obra para cultivar sus tierras. Las mujeres ayudaban a sus vecinas a tejer telas.
Algunos pueblos grandes tenían más de 100 familias, pero ellos se trataban entre sí como familia.
Cuando Jingmao murió, incluso los funcionarios de bajo rango de los distritos vecinos y varios miles de personas acudieron a su funeral. Muchas personas que llegaron tarde solo alcanzaron a llorar sobre su tumba.
Fuente: Historia de la Dinastía del Norte, Volumen 86, Colección de biografías Volumen 74, Los funcionarios obedientes.
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.