Autobuses repletos de inmigrantes ilegales en ruta hacia Nueva York están siendo dejados en varias estaciones de tren de Nueva Jersey, según informaron funcionarios estatales y locales, un aparente intento de aprovechar una «laguna» en la última orden de la ciudad de Nueva York que restringe su llegada.
Según un aviso publicado el 31 de diciembre en la cuenta oficial X de Jersey City, unos 10 autobuses que partieron de Texas y Luisiana han llegado a estaciones de tren de varias localidades de Nueva Jersey, entre ellas Secaucus, Fanwood, Edison y Trenton, durante el fin de semana.
«[Aproximadamente] 397 migrantes han llegado a estos lugares desde el 30 de diciembre», dijo la ciudad.
En Secaucus, centro de transporte ferroviario entre Nueva Jersey y Manhattan, el departamento de policía y las autoridades municipales confirmaron la llegada de al menos cuatro autobuses de inmigrantes a la estación de tren de Secaucus Junction. El primer autobús llegó en la mañana del 30 de diciembre.
«Por lo que sabemos, tras ser dejados en la estación de tren, los inmigrantes tomaron trenes hacia Nueva York», declaró el 31 de diciembre el alcalde de Secaucus, Michael Gonnelli.
«Parece bastante claro que los operadores de autobuses están encontrando una manera de frustrar los requisitos de la Orden Ejecutiva dejando a los inmigrantes en la estación de tren de Secaucus y haciéndoles continuar hasta su destino final», añadió Gonnelli, refiriéndose a la orden emitida la semana pasada por el alcalde de Nueva York, Eric Adams.
Como parte del esfuerzo por controlar el flujo de autobuses chárter de inmigrantes enviados por los estados fronterizos del sur a Nueva York, la orden del 22 de diciembre obliga a que dichos autobuses solo puedan dejar a sus pasajeros entre las 8.30 y las 12.00 horas los días laborables.
Además, las empresas de autobuses deben notificar la llegada de los autobuses a la oficina de gestión de emergencias de la ciudad con 32 horas de antelación.
Según la nueva norma, las empresas de autobuses y los operadores que la incumplan se enfrentarán a un delito menor de clase B, con penas que incluyen tres meses de prisión y hasta 500 dólares de multa para los particulares y 2000 dólares para las empresas.
La policía de Nueva York también podría confiscar los vehículos.
Su destino final
«Tal vez los requisitos establecidos por el alcalde Adams sean demasiado estrictos y estén teniendo consecuencias inesperadas, ya que parece que los operadores de autobuses han descubierto una laguna en el sistema para garantizar que los inmigrantes lleguen a su destino final, que es la ciudad de Nueva York», declaró Gonnelli.
«En este momento, parece que los billetes de tren están siendo asegurados para los migrantes y han estado haciendo su camino a su destino final».
En respuesta a la maniobra, el gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy, también afirmó que su estado está «siendo utilizado principalmente como punto de tránsito.» Señaló que «todos o casi todos» los pasajeros continuaron con sus viajes a Nueva York después de ser dejados en el lado oeste del río Hudson.
«Estamos coordinando estrechamente este asunto con nuestros socios federales y locales, incluidos nuestros colegas del otro lado del Hudson», dijo la oficina de la gobernadora demócrata en un comunicado.
Mientras tanto, la administración de Adams sigue criticando la iniciativa del gobernador de Texas, Greg Abbott -que recientemente comenzó a transportar a los inmigrantes ilegales a ciudades dirigidas por demócratas a través de vuelos, además de los autobuses- como «cruel», a pesar de que los que aceptaron los billetes de ida de autobús y avión firmaron renuncias de consentimiento antes de embarcar.
«El gobernador de Texas, Greg Abbott, sigue tratando a los solicitantes de asilo como peones políticos y, en lugar de ello, ahora está dejando a familias en ciudades y estados de los alrededores en el frío y la oscuridad de la noche con billetes de tren para viajar a la ciudad de Nueva York, al igual que ha estado haciendo en Chicago en respuesta a su orden ejecutiva similar», dijo Fabien Levy, portavoz de la oficina del alcalde en un comunicado.
«Esta es exactamente la razón por la que hemos estado coordinando con las ciudades y condados circundantes desde antes de emitir nuestra orden para animarles a tomar medidas ejecutivas similares para proteger a los migrantes contra esta crueldad».
Abbott, republicano, empezó a enviar inmigrantes ilegales en autobús a Nueva York y otras autoproclamadas «ciudades santuario» en la primavera de 2022 para aliviar la presión sobre las comunidades fronterizas asediadas.
La administración Abbott, que hasta ahora ha enviado a unos 32,000 inmigrantes ilegales a la ciudad de Nueva York, se comprometió a continuar con el transporte.
«La hipocresía del alcalde Adams es asombrosa», dijo Renae Eze, portavoz de la oficina del gobernador, en un comunicado después de que el alcalde de Nueva York anunciara la orden ejecutiva destinada a restringir el transporte de migrantes en autobús.
«El alcalde Adams había pregonado el estatus de ciudad santuario autodeclarado de la ciudad de Nueva York, y luego envió sus propios autobuses de migrantes a pequeñas ciudades de Nueva York», dijo.
«Texas solo ha transportado a unos 32.000 migrantes a la ciudad de Nueva York, mientras que el presidente Biden ha estado llevando aviones cargados de migrantes por todo el país y, a menudo, al amparo de la noche».
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