Biden visitará Charleston para intentar reforzar el apoyo entre los votantes negros

Las últimas encuestas muestran que ha tenido dificultades para conectarse con los votantes negros, hispanos y jóvenes

Por Emel Akan
08 de enero de 2024 8:59 AM Actualizado: 08 de enero de 2024 8:59 AM

CHARLESTON, Carolina del Sur— El presidente Joe Biden visitará Charleston, Carolina del Sur, el lunes para pronunciar un discurso en la histórica iglesia Mother Emanuel AME como parte de su campaña para 2024. Se espera que denuncie la «violencia política» y haga hincapié en lo que está en juego en las próximas elecciones.

La visita del presidente a Carolina del Sur también se considera un esfuerzo por mejorar su imagen entre los votantes negros, especialmente teniendo en cuenta los recientes descensos en sus índices de aprobación entre este grupo.

Fundada en 1816, la Madre Emanuel es una de las congregaciones negras más antiguas del Sur, con un inmenso significado cultural. El 17 de junio de 2015, la iglesia fue testigo de un trágico suceso en el que nueve feligreses negros fueron asesinados a tiros por un hombre blanco.

La decisión del presidente Biden de hablar en este lugar simbólico se considera una elección deliberada, dirigida contra la «supremacía blanca».

La Iglesia Episcopal Metodista Africana Emanuel en una ceremonia el 27 de junio de 2015, tras el tiroteo masivo en el que murieron nueve personas el 19 de junio. (Joe Raedle/Getty Images)

(Joe Raedle/Getty Images)
Encuestas recientes mostraron que el presidente Biden está luchando por conectarse con los votantes negros, hispanos y jóvenes que tradicionalmente se inclinaban por los demócratas.

Según una encuesta de diciembre realizada por el Centro de Asuntos Públicos de Associated Press-NORC, solo el 50 por ciento de los adultos negros aprueba al presidente Biden, frente al 86 por ciento en julio de 2021.

Otra encuesta de USA TODAY/Suffolk University Poll mostró que el expresidente Donald Trump, favorito para la nominación republicana de 2024, lidera entre los votantes y los jóvenes hispanos. Según la encuesta, uno de cada cinco votantes negros planea votar por un candidato de un tercer partido en las elecciones de 2024.
Estos resultados alimentan la preocupación sobre las perspectivas de reelección del presidente Biden.

El 7 de enero, el representante James Clyburn, demócrata de Carolina del Sur, declaró que estaba “muy preocupado” por la disminución del apoyo al presidente entre los votantes negros y que había discutido sus preocupaciones con el presidente, indicando que las victorias legislativas del presidente Biden no están impulsando el sentimiento de los votantes.

“No tengo ningún problema con la administración Biden y lo que ha hecho”, dijo Clyburn al programa “State of the Union” de CNN.

«Mi problema es que no hemos podido atravesar ese muro MAGA para hacer llegar a la gente exactamente lo que ha hecho este presidente».

El lunes será un día lleno de acontecimientos en Charleston. Paralelamente al evento de campaña de Biden, tendrá lugar la toma de posesión del alcalde electo William Cogswell, lo que intensificará la actividad política en la ciudad histórica. Cogswell será el primer alcalde republicano desde 1877.

«Causa Sagrada»

Recientemente, para consolidar el apoyo entre los votantes demócratas críticos, el presidente Biden ha estado ajustando su enfoque, centrándose firmemente en lo que considera la amenaza a la democracia que plantea el expresidente Trump.

Antes de su visita a Carolina del Sur, el presidente Biden pronunció un mordaz discurso cerca de Valley Forge, Pensilvania, que sirvió como cuartel general de George Washington para el Ejército Continental durante la Guerra Revolucionaria.

Durante su discurso, el presidente Biden trazó un paralelo entre lo que llamó su lucha por la “preservación de la democracia estadounidense” y la “causa sagrada” de George Washington durante la lucha por la independencia estadounidense hace casi 250 años.

A la vez, afirmó que la reelección del expresidente Trump representaba una grave amenaza a la democracia y las libertades fundamentales.

“La cuestión más urgente de nuestro tiempo es si la democracia sigue siendo la causa sagrada de Estados Unidos”, dijo el presidente Biden. “Y de eso se tratan las elecciones de 2024”.

En su discurso de Valley Forge, con motivo del tercer aniversario de la irrupción en el Capitolio del 6 de enero, el presidente Biden también condenó a su predecesor por alentar a una “turba violenta” a asaltar el Capitolio de Estados Unidos.

Los asesores de campaña de Trump, Chris LaCivita y Susie Wiles, respondieron en un memorando emitido la semana pasada, afirmando que el actual presidente es la mayor amenaza para la democracia estadounidense.

“Por favor, no se equivoquen: Joe Biden y sus aliados son una amenaza real y convincente para nuestra democracia”, dijeron los asesores. «De hecho, de una manera nunca antes vista en nuestra historia, están librando una guerra contra ella».

Ellos citaron “acusaciones sin precedentes por parte de la oposición política” contra el expresidente, así como recientes “esfuerzos inconstitucionales” para sacarlo de las urnas como ejemplos de amenazas a la democracia estadounidense.

El 5 de enero, el expresidente Trump, durante un mitin de campaña en Sioux Center, Iowa, acusó al presidente de “abusar del legado de Washington”.

“El historial de Biden es una racha ininterrumpida de debilidad, incompetencia, corrupción y fracaso”, dijo el Sr. Trump, calificando el discurso de campaña del presidente de “infundir miedo” y “patético”.

Durante una parada de campaña en Clinton, Iowa, el 6 de enero, el presidente Trump también llamó “rehenes” a las personas encarceladas por su papel en los disturbios del 6 de enero.

«Ya han sufrido suficiente», dijo el presidente Trump. “Yo los llamo rehenes. Algunas personas los llaman prisioneros”.

La representante Elise Stefanik (R-NY), presidenta de la conferencia republicana de la Cámara de Representantes, expresó preocupaciones similares el 7 de enero durante una entrevista con “Meet the Press” de NBC.

«Me preocupa el trato dado a los rehenes del 6 de enero», dijo la Sra. Stefanik. «Tenemos un papel en el Congreso de supervisión de nuestro trato a los prisioneros, y creo que estamos viendo el uso del gobierno federal como arma no solo contra el presidente Trump, sino también contra los conservadores».

Según una encuesta reciente del Washington Post y la Universidad de Maryland, el 34 por ciento de los republicanos cree que el FBI coordinó y alentó la irrupción del Capitolio, en comparación con el 30 por ciento de los independientes y el 13 por ciento de los demócratas.


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