La orden de vacunación contra la COVID-19 del presidente Joe Biden para los empleados federales fue bloqueada este viernes por un juez federal.
Biden no tiene la autoridad para imponer tal mandato, escribió el juez federal de distrito Jeffrey Brown en un fallo de 20 páginas obtenido por The Epoch Times.
La ley federal dice que el presidente “podría dictar normas para la conducta de los empleados del poder ejecutivo”, y los abogados del gobierno argumentaron que el acto de vacunarse es “simplemente ‘conducta’”. Sin embargo, el juez se puso del lado de los demandantes, quienes afirmaron que la conducta citada debe ser “conducta en el lugar de trabajo” para que él o ella la regule.
“Entonces, ¿someterse a una vacuna contra la COVID-19, particularmente cuando se requiere como condición para el empleo, es conducta en el lugar de trabajo? La respuesta a esta pregunta quedó mucho más clara tras el fallo de la Corte Suprema a principios de este mes”, dijo Brown, refiriéndose al reciente hallazgo de la Corte Suprema de que la orden de vacunación contra la COVID-19 de la administración Biden para empresas privadas parecía estar fuera de sus poderes conferidos por el Congreso
“La Corte Suprema ha sostenido expresamente que una orden de vacuna contra la COVID-19 no es una regulación de empleo. Y eso significa que el presidente no tenía autoridad legal para emitir la orden para los empleados federales”, agregó.
Dijo que sin entrar en una orden judicial preliminar, o bloquear la orden por ahora, los trabajadores federales que no se han vacunado o no han sido aprobados para una exención enfrentan suspensión o terminación u otras consecuencias negativas.
La demanda fue presentada por Feds for Medical Freedom, una coalición ciudadana que incluye a trabajadores federales y otros grupos.
“La decisión de hoy del juez Brown es una victoria para los miles de hombres y mujeres que quieren servir a su gobierno sin sacrificar sus derechos individuales”, dijo Marcus Thornton, presidente del grupo, a The Epoch Times en un comunicado enviado por correo electrónico.
“Los más de 6000 miembros de Feds for Medical Freedom no quieren nada más que continuar su servicio a este país sin estar sujetos a mandatos inconstitucionales. Por el momento, la sentencia del tribunal les concede ese deseo, pero la lucha está lejos de terminar. Continuaremos buscando todas las vías legales disponibles para garantizar que se respeten los derechos de nuestros miembros y que su servicio se honre de manera adecuada”, agregó.
En una moción de orden judicial, los demandantes dijeron que Biden “actuó más allá de su autoridad legal delegada” al emitir la orden y otra para contratistas federales que fue denegada por varios tribunales.
En una moción que se opone a la solicitud, los demandados dijeron que las órdenes fueron diseñadas para detener la propagación del virus que causa la COVID-19 y encajar «cómodamente dentro de la amplia autoridad del presidente para supervisar la fuerza laboral del Poder Ejecutivo».
Poco después de que se emitiera la orden de Brown, el gobierno apeló ante la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito de los Estados Unidos.
La corte de apelaciones podría confirmar el fallo, lo que probablemente conduciría a un enfrentamiento en la Corte Suprema, o anularlo.
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