Las tiendas minoristas en California podrán comenzar a reabrir sus puertas este viernes y los gobiernos locales tendrán más autonomía sobre la reapertura de sus zonas, anunció este lunes el gobernador estatal, Gavin Newsom, tras los “datos positivos” de los esfuerzos por contener el brote del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), comúnmente conocido como nuevo coronavirus.
En medio de la presión para comenzar a reabrir el estado, el demócrata resaltó que los datos sobre las hospitalizaciones y los contagios del virus del PCCh muestran una señal positiva.
Las nuevas pautas permitirán que pequeñas tiendas minoristas como floristerías, librerías, jugueterías, y minoristas de ropa o artículos deportivos, entre otros, pueden volver a levantar sus persianas bajo las pautas de seguridad y distanciamiento social.
La medida no incluye a centros comerciales y oficinas, ni permite que los restaurantes atiendan a comensales dentro del establecimiento, subrayó Newsom.
Asimismo, el gobernador dijo que ampliará la toma de decisiones a nivel local, permitiendo que algunas comunidades avancen a su propio ritmo en lugar de adherirse a una política uniforme en todo el estado.
No obstante, el demócrata dijo que aún existe la posibilidad de que la reapertura genere un aumento de infectados.
“Si ese es el caso, y no tenemos la capacidad de controlar esa propagación, rastrear esa propagación, y aislar a las personas que pueden haber estado en contacto con COVID-19, tendremos que hacer modificaciones de nuevo”, consideró.
El anuncio se dio el mismo día en que los norteños condados de Yuba y Sutter, comenzaron a relajar las restricciones tras no presentar hospitalizaciones en las dos últimas semanas.
La primera en flexibilizar las medidas fue el área rural de Modoc, un condado al norte del estado donde no hay casos confirmados de COVID-19, y que desde el viernes pasado permitió reabrir a los negocios y escuelas pero manteniendo el distanciamiento social.
Como parte del esfuerzo para controlar el brote del virus del PCCh, Newsom anunció hoy un trabajo conjunto con la Universidad de California en San Francisco (UCSF) y a Universidad de California Los Ángeles (UCLA) para reclutar y entrenar nuevos rastreadores de contagiados de COVID-19, que el ayudarían a mantener controlada la enfermedad.
California tiene como objetivo tener cerca de 20,000 personas capacitadas para que puedan rastrear a posibles contagiados.
Al menos 23 condados ya están utilizando a “rastreadores” para ubicar focos de contagio.
«Todo esto es fundamental, para que podamos movernos más rápidamente para modificar nuestro pedido de quedarse en casa», resaltó Newsom.
California, que inició su confinamiento el pasado 19 de marzo, está cerca de tener 55,000 casos positivos y 2215 muertes relacionadas con el virus del PCCh, según datos del periódico Los Ángeles Times.
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