Varios destacados conservadores volvieron a Twitter el día después de que el director ejecutivo de Tesla, Elon Musk, llegara a un acuerdo para adquirir la plataforma por 44,000 millones de dólares con la promesa de proteger la libertad de expresión.
Personalidades de los medios de comunicación conservadores como Tucker Carlson, Mark Levin, Raheem Kassam y otros regresaron, algunos después de haber sido suspendidos previamente.
Musk cerró el acuerdo con la empresa de redes sociales el 25 de abril. Al hacerlo, el autodenominado «absolutista de la libertad de expresión» provocó una reacción de activistas de extrema izquierda sobre el papel de las plataformas de redes sociales en la regulación del flujo de información. Musk aclaró su postura en un tuit del 26 de abril, diciendo: «Estoy en contra de la censura que va más allá de la ley».
«Si la gente quiere menos libertad de expresión, pedirá al gobierno que apruebe leyes en ese sentido. Por lo tanto, ir más allá de la ley es contrario a la voluntad del pueblo».
Musk ha pedido características como la adición de un botón de edición para los tuits y la concesión de marcas de verificación automática a los usuarios premium.
Musk también ha propuesto que el algoritmo de Twitter se convierta en «código abierto» o disponible para que el público lo vea y lo mejore y para ayudar a prevenir «la manipulación oculta», como alimentar la propaganda extranjera falsa.
«También quiero hacer que Twitter sea mejor que nunca, mejorando el producto con nuevas características, haciendo que los algoritmos sean de código abierto para aumentar la confianza, derrotando a los spambots y autentificando a todos los humanos», dijo Musk.
La lucha contra las estafas de criptodivisas es otra de las prioridades, y Musk ha declarado la guerra a los spambots, que, según él, postean mensajes fraudulentos en Twitter para estafar a los inversores.
«Derrotaremos a los bots de spam o moriremos en el intento», dijo Musk en un tuit.
Mientras que varios conservadores prominentes han regresado hasta ahora a Twitter, hay uno que no lo hará.
El expresidente Donald Trump, que fue suspendido en circunstancias controvertidas, ha declarado que no volverá si su cuenta es restablecida tras la compra de Musk.
«Estamos de vuelta», posteó Carlson, de Fox News, el 26 de abril. Carlson fue suspendida por apoyar los tuits de The Babylon Bee sobre la subsecretaria de Salud de EE. UU., Rachel Levine, que según Twitter violaban sus condiciones de servicio.
Twitter suspendió el feed de The Babylon Bee el mes pasado, después de acusar al sitio web satírico de «conducta de odio» por dar su premio «Hombre del Año» de 2022 a Levine, que se identifica como mujer transgénero.
El 20 de marzo, Twitter notificó al director ejecutivo de The Babylon Bee, Seth Dillon, que su sitio —con 1.3 millones de seguidores— había bloqueado su cuenta.
Otros destacados conservadores han hecho sus primeros tuits en meses tras la interrupción.
«WOW. Estoy recibiendo seguidores en masa por primera vez en años aquí», dijo Raheem Kassam.
«Sí. @elonmusk debería averiguar qué ha hecho diferente hoy. Antes había perdido más de 200k en la Gran Purga del año pasado», dijo Richard Grenell, exdirector interino de Inteligencia Nacional de Trump.
Camioneros por la Libertad, que había sido suspendido de Twitter, volvió a abrir una cuenta, acumulando más de 14,000 seguidores en el mismo día, según Fox Business.
El presentador de Fox News, Mark Levin, también dijo que volvía a Twitter «gracias al nuevo propietario».
Charlie Kirk, de Turning Point USA, que fue suspendido tras decir que Levine había «pasado 54 años de su vida como un hombre», aún no ha vuelto.
Al momento de publicar este reporte, la cuenta de The Babylon Bee sigue suspendida.
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