El CEO de Delta Air Lines está pidiendo al Departamento de Justicia de los EE. UU. (DOJ) que agregue a los pasajeros condenados por comportamiento perturbador a una lista nacional de «no volar» que les impediría viajar en el futuro en cualquier aerolínea comercial.
“Le solicitamos que apoye nuestros esfuerzos con respecto al paso tan necesario de poner a cualquier persona condenada por una interrupción a bordo en una lista nacional, integral e indisciplinada de pasajeros de ‘no volar’ que prohibiría a esa persona viajar en cualquier aerolínea comercial”, escribió el presidente ejecutivo de Delta, Ed Basian, en una carta revisada por The Epoch Times.
“Esta acción ayudará a prevenir futuros incidentes y servirá como un fuerte símbolo de las consecuencias de no cumplir con las instrucciones de los miembros de la tripulación en aviones comerciales”, agregó el CEO. El Departamento de Justicia no hizo comentarios de inmediato sobre la carta de Basian.
En este momento, la lista de «no volar» solo incluye un subconjunto de la lista de vigilancia del terrorismo que permite al gobierno americano prohibir que personas consideradas una amenaza para la aviación civil viajen en aerolíneas.
En la carta, escrita el viernes al Fiscal General de los Estados Unidos, Merrick Garland, Basian explicó que, aunque tales incidentes representan una pequeña fracción de todos los vuelos en general, el comportamiento disruptivo de los pasajeros a bordo de las aerolíneas Delta ha aumentado casi un 100 por ciento desde 2019.
El CEO dijo que Delta ha colocado a casi 1900 personas en la lista de «no volar» de la aerolínea por negarse a cumplir con los requisitos de uso de mascarillas y presentó más de 900 nombres prohibidos a la Administración de Seguridad del Transporte para perseguir sanciones civiles.
Delta también hizo un llamado a otras aerolíneas en septiembre para compartir las listas de pasajeros problemáticos que fueron prohibidos, como un esfuerzo por proteger a los empleados de las aerolíneas.
El mes pasado, tres residentes de Nueva York fueron acusadas de agredir a un oficial de seguridad de Delta en el aeropuerto JFK en septiembre. Las tres fueron acusadas de “[agredir] brutalmente a un oficial de seguridad de una aerolínea al golpearlo contra el suelo con su radio y luego patearlo y golpearlo en la cara y el cuerpo mientras estaba caído”, dijo el fiscal federal Breon Peace en enero.
La Administración Federal de Aviación (FAA) dijo el año pasado que había adoptado un enfoque de «tolerancia cero» y remitió a más de tres docenas de pasajeros indisciplinados al FBI para un posible enjuiciamiento penal.
Si bien la FAA no tiene la autoridad para enjuiciar a los pasajeros indisciplinados, la agencia federal ha creado un «protocolo de intercambio de información» con el DOJ para que el departamento sea notificado sobre conductas delictivas que ocurren en aviones comerciales.
Los pasajeros indisciplinados podrían enfrentar una multa de hasta USD 37,000 por infracción, y se pueden imponer múltiples infracciones por incidente.
El presidente Joe Biden dijo en octubre que había dado instrucciones al Departamento de Justicia para que “hiciera frente” al creciente número de incidentes violentos a bordo de las aerolíneas.
Con información de Reuters.
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