Alrededor de 150 inmigrantes ilegales fueron detenidos en la frontera entre Estados Unidos y México durante el fin de semana por los oficiales de la Patrulla Fronteriza y se les permitió continuar su camino sin una futura fecha de comparecencia o cualquier aviso, dijo el representante Henry Cuellar (D-Texas).
«Durante el fin de semana, en la zona de Anzalduas, junto al puente, hubo alrededor de 150 personas que fueron liberadas bajo lo que llamamos ‘facultad discrecional’, porque la Patrulla Fronteriza dice: ‘No tenemos espacio'», dijo Cuellar a Border Report el lunes. Se refería a una zona cercana al Río Grande en su distrito congresional.
Cuellar dijo que fueron «liberados sin siquiera un Aviso de Comparecencia, lo cual es, en mi opinión, sin precedentes que se vaya a liberar a alguien y esperar que se presente sin una fecha de comparecencia». Ninguna de las personas que fueron detenidas eran niños no acompañados, dijo.
«No estoy culpando a la Patrulla Fronteriza, pero escuchar que no tenían otra opción te dice lo crítica que es la situación en la frontera», dijo Cuellar, el vicepresidente del Subcomité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes, según el medio.
Cuellar fue noticia esta semana después de que su oficina publicara fotos del interior de una instalación desbordada operada por la Patrulla Fronteriza que albergaba a niños no acompañados, mostrando a niños y adultos durmiendo en el suelo en espacios reducidos. Cuellar dijo a Axios que estaban alojados en «condiciones terribles» y pidió al gobierno federal que los pusiera bajo el control del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos.
Esto se produce en un momento en el que una oleada de inmigrantes ilegales ha intentado cruzar la frontera en los últimos meses, tras la toma de posesión del presidente Joe Biden. Los republicanos han criticado a Biden por emitir una serie de órdenes ejecutivas que anulan las políticas de la era Trump, como la medida de «Permanecer en México», conocida oficialmente como Protocolos de Protección al Migrante, y detener la construcción del muro fronterizo.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CPB, por sus siglas en inglés) también publicó fotos de las instalaciones de Donna el martes por la mañana.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), que supervisa la Patrulla Fronteriza, dijo que el personal usa su propio criterio para agilizar los encuentros con inmigrantes ilegales que no representan una amenaza significativa para la comunidad.
«No hay ningún cambio en la política: la frontera sigue cerrada», dijo el DHS.
«En algunos casos, las familias son sometidas a procedimientos de deportación más adelante en el proceso de liberación y no mientras están en la estación de la patrulla fronteriza. Todas las familias, sin embargo, son examinadas en la estación de la patrulla fronteriza, incluyendo la recopilación de información biográfica y biométrica y la comprobación de los antecedentes penales y de seguridad nacional», dijo la agencia en un comunicado.
«Las familias y los adultos solos están siendo expulsados en virtud del Título 42 y no deben intentar cruzar ilegalmente», añadió además el comunicado. «Si México no tiene capacidad para recibir inmediatamente a una familia expulsada —y estamos trabajando con nuestros socios en México para aumentar su capacidad— la familia es sometida a pruebas y cuarentena según sea necesario y se coloca en procedimientos de inmigración para comenzar su expulsión de Estados Unidos».
The Epoch Times se ha puesto en contacto con el DHS para pedirle comentarios.
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