WASHINGTON—Los líderes del Congreso y la Casa Blanca están apresurándose para llegar a un acuerdo sobre el financiamiento de proyectos de ley antes de que las agencias federales se queden sin dinero en la medianoche del 20 de diciembre.
El secretario de Hacienda, Steven Mnuchin, quien es el negociador clave de la administración en las conversaciones sobre el presupuesto, se reunió el 10 de diciembre con la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif.), y con los principales adjudicatarios para discutir el paquete de gastos.
Todas las partes continuaron trabajando duro para llegar a un acuerdo bipartidista y bicameral sobre los 12 proyectos de ley de financiamiento, dijo el 11 de diciembre un asesor del Congreso familiarizado con las conversaciones a The Epoch Times.
Sin embargo, no está claro cuánto se ha progresado en la resolución de problemas importantes y espinosos para así evitar el cierre del gobierno.
Sería difícil desde el punto de vista logístico redactar y aprobar todos los proyectos de ley antes de la fecha límite, opina Justin Bogie, analista principal de políticas en asuntos fiscales de The Heritage Foundation.
«Es un gran impulso», agregó, ya que hay «bastante cantidad de temas que todavía están en debate».
El proyecto de ley para financiar los departamentos de Trabajo, Educación y Salud y Servicios Humanos es uno de los más controvertidos, según Bogie, debido a las disputas partidistas sobre el financiamiento de Planned Parenthood.
En marzo, la administración Trump emitió nuevas reglas para bloquear la disponibilidad de las subvenciones del Título X para las clínicas que ofrecen servicios de aborto o que ofrecen remisiones para abortos. Los demócratas, sin embargo, buscan revertir esa prohibición en el proyecto de ley de financiación a través de los corredores de la «píldora venenosa».
Los republicanos acusan a los demócratas de descarrilar el proceso de adjudicación al añadir tales cláusulas políticas. En un esfuerzo por evitar disputas, ambas partes acordaron prohibir las corredurías partidistas como parte de un acuerdo presupuestario de dos años promulgado en agosto. Los legisladores, sin embargo, han estado luchando para llegar a un acuerdo sobre lo que constituye una «píldora venenosa».
En el proyecto de ley de operaciones estatales-extranjeras, ha habido una disputa similar sobre fondos de ayuda extranjera destinados a organizaciones que realizan o promueven abortos en el extranjero.
Financiamiento del muro fronterizo
Otro tema espinoso en las negociaciones es la financiación del muro en la frontera con México, que se ha convertido en una fuente importante de conflicto entre la Casa Blanca y los demócratas.
Para combatir la inmigración ilegal y el tráfico de drogas, Trump solicitó 8,600 millones de dólares para financiar el muro del año fiscal 2020.
El Senado, controlado por los republicanos, incluyó 5,000 millones de dólares para el muro fronterizo propuesto por Trump en su proyecto de ley de asignaciones de Seguridad Nacional. Sin embargo, la Cámara de Representantes de los Demócratas se negó a incluir nuevos fondos para la construcción de un muro en su legislación.
El líder de la minoría en el Senado, Chuck Schumer (D-N.Y.), dijo que un muro es un «no comienzo para los demócratas».
«Esperábamos que el Presidente hubiera aprendido su lección, pero parece que exactamente un año después de perder esta misma batalla, el Presidente está considerando una repetición de la historia y otro cierre de [la administración] Trump», dijo en el Senado el 4 de diciembre.
En febrero, Trump declaró la situación fronteriza como una emergencia nacional, lo que le permitió redirigir más de 6,000 millones de dólares del Pentágono hacia la construcción de muros. En los proyectos de ley de gastos, los demócratas intentan bloquear la capacidad del Presidente para transferir dinero de los proyectos de construcción militar al muro fronterizo.
Un portavoz de la administración, sin embargo, expresó optimismo sobre el logro de un acuerdo.
«Seguimos trabajando de buena fe para lograr que el Presidente obtenga el mejor acuerdo posible sobre la seguridad fronteriza y el muro, así como sobre varios otros temas», dijo en un correo electrónico un portavoz de la Oficina de Gestión y Presupuesto. «Los intentos de insertar píldoras venenosas han ralentizado el proceso, pero esperamos que el Congreso cumpla con el acuerdo presupuestario que hicieron durante el verano, consiga el financiamiento del gobierno y brinde seguridad a nuestras tropas».
Trump puede declarar otra emergencia nacional si el Congreso se niega a proporcionar fondos para el muro fronterizo, según Bogie.
«Creo que eso es ciertamente posible. Eso es lo que hizo el año pasado, así que no me sorprendería», dijo, y agregó que Trump podría recibir alguna reacción negativa por parte del Pentágono y de algunos republicanos por hacerlo.
«Cada vez que se toma dinero de un lugar y se traslada a otro, obviamente se va a molestar a algunas personas», anotó Bogie.
La disputa sobre el financiamiento del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) también se ha convertido en un obstáculo importante en las negociaciones.
Los demócratas exigen recortes drásticos en el número de camas en las instalaciones del ICE para los inmigrantes que cruzan la frontera ilegalmente, mientras que la administración Trump presiona para que se aumenten las camas a fin de hacer frente a la oleada de inmigrantes ilegales y solicitantes de asilo.
«Yo creo que las camas del ICE son el mayor obstáculo», dijo la representante Lucille Roybal-Allard (D-Calif.), presidente de la Subcomisión de Asignaciones de la Cámara de Representantes para la Seguridad Nacional, según un informe publicado en The Hill.
Otra medida provisional
El Congreso ya ha aprobado dos veces medidas de financiación temporal en los últimos meses para evitar el cierre del gobierno. Si los legisladores no logran resolver sus diferencias, otra medida provisional, llamada resolución continua (CR), puede ser necesaria para mantener abiertas las agencias del gobierno de los Estados Unidos más allá de la fecha límite.
El presidente de la Comisión de Asignaciones del Senado, Richard Shelby (R-Ala.), dijo la semana pasada a los periodistas que tiene menos esperanzas y planteó la posibilidad de que se produzca otro parón en marzo.
Algunos creen que es más probable que el gobierno federal continúe con la resolución de al menos una parte de los problemas.
Sin embargo, los líderes demócratas de la Cámara de Representantes insisten en que los 12 proyectos de ley de gastos deben ser finalizados antes de que cualquiera de ellos pueda llegar al pleno.
«Estamos totalmente enfocados en completar los 12 proyectos de ley de asignaciones para la fecha límite del 20 de diciembre», dijo una ayudante de la presidente de la Comisión de Asignaciones de la Cámara de Representantes, Nita Lowey (D-N.Y.), a The Epoch Times.
«No estamos contemplando otra resolución continua».
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