El Dr. Francis Collins pareció reconocer esta semana que la agencia estadounidense que dirige financió experimentos de ganancia de función en Wuhan, China, lo que contradice las afirmaciones que él y un subordinado hicieron a principios de este año.
Los Institutos Nacionales de Salud (NIH), la agencia que dirige Collins, reveló la semana pasada que el dinero que le dio a EcoHealth Alliance apoyó experimentos riesgosos en el Instituto de Virología de Wuhan en China que, según algunos expertos, cumplían con la definición de ganancia de función.
El término ganancia de función generalmente se refiere a la investigación que aumenta la patogenicidad y/o transmisibilidad de un agente biológico. Hasta la semana pasada, el NIH lo definía como una investigación que modifica un agente «de modo que le confiere una actividad nueva o mejorada».
Tanto Collins como el Dr. Anthony Fauci, que dirige el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID), afirmaron a principios de este año que los NIH no financiaron la investigación de ganancia de función en China.
«Ni los NIH ni el NIAID han aprobado alguna subvención que hubiera apoyado la investigación de ‘ganancia de función’ sobre coronavirus», dijo Collins en mayo, aunque estipuló que solo se refería a experimentos de ganancia de función que habrían aumentado la «transmisibilidad o letalidad de los virus para los seres humanos».
Fauci no incluyó esa estipulación cuando testificó ante el Congreso ese mes.
«Los NIH y el NIAID no han financiado categóricamente la investigación de ganancia de función que se realizó en el Instituto de Virología de Wuhan», dijo.
Collins fue presionado esta semana en una entrevista de CNN para que hablara sobre las declaraciones.
EcoHealth «hizo algunas cosas de las que debería habernos informado, pero no hizo el tipo de investigación de ganancia de función que requiere una supervisión especial de alto nivel», dijo.
Se le preguntó a los NIH si querían aclarar sus comentarios, que parecen socavar los comentarios anteriores de Fauci.
Renate Myles, portavoz de Collins, le dijo a The Epoch Times en un correo electrónico que las investigaciones de ganancia de función «se hacen todo el tiempo».
“Por ejemplo, la inmunoterapia contra el cáncer, en la que a un paciente con cáncer se le proporcionan nuevas células que han sido mejoradas genética o farmacológicamente para ‘obtener’ la función necesaria que atacaría el cáncer. La mayoría de los estudios de investigación sobre «ganancia de función» no plantean riesgos significativos de bioseguridad. Por lo tanto, decir que algo es ‘ganancia de función’ por sí solo no significa nada”, dijo Myles.
Al igual que Collins, Myles se centró en el marco del Departamento de Salud y Servicios Humanos que define la investigación que requiere una supervisión especial. Se debe «anticipar razonablemente que la investigación creará, transferirá o utilizará patógenos pandémicos potenciales que resulten del aumento de la transmisibilidad y/o virulencia de un patógeno en los seres humanos».
Jonathan Latham, director ejecutivo de The Bioscience Research Project, dijo que los NIH estaban ocultando el tema.
“Cuando la gente habla de la investigación sobre la ganancia de función, nunca se habla del cáncer. Están hablando de patógenos humanos reales o potenciales”, dijo Latham en un correo electrónico.
«Francis Collins también está confundido, pero de una manera diferente. En Wuhan, una investigación financiada por los NIH estudió el virus MERS vivo, un patógeno pandémico humano real, y coronavirus vivos similares al SARS procedentes de murciélagos. Estos coronavirus del SARS eran los que los investigadores creían que eran potenciales patógenos pandémicos. Si Francis Collins cree que este tipo de investigación no requiere una supervisión especial, no sé qué investigación cree que requiere una supervisión especial», añadió.
“En general, parece que los NIH están implementando calculadamente dos definiciones de trabajo de investigación de ganancia de función que están cambiando a voluntad. Uno es tan amplio que no tiene sentido y el otro es tan estrecho que abarca poca o ninguna investigación real”.
Lawrence Tabak, subdirector principal de los NIH, les dijo a los legisladores la semana pasada que la agencia determinó que la investigación en cuestión no requería una mayor supervisión. También afirmó que los virus estudiados en China no podrían haber sido la fuente de la pandemia de COVID-19, aunque la información sobre la mayoría de los virus muestreados en Wuhan en los últimos años no se ha compartido con el público.
“Es molecularmente imposible derivar el SARS-CoV-2 de cualquiera de las cepas descritas en los documentos de EcoHealth disponibles para el público hasta ahora. Pero la pregunta es qué otro trabajo se estaba haciendo”, escribió en Twitter Alina Chan, investigadora postdoctoral en el Instituto Broad del MIT y Harvard.
Los NIH presentaron los documentos después de recibir consultas de legisladores en múltiples paneles, incluido el representante Morgan Griffith (R-Va.), el miembro de mayor rango del Subcomité de Supervisión e Investigaciones del Comité de Energía y Comercio de la Cámara.
«En mi evaluación, el Dr. Collins parece estar invocando la letra de la ley sobre la ganancia de función, pero evadiendo claramente el espíritu de la ley. Por eso es tan importante determinar exactamente qué apoyaban los NIH en Wuhan», dijo Griffith a The Epoch Times por correo electrónico. «He pedido mucha información a los NIH, pero la agencia no ha proporcionado la mayor parte de ella. Los comentarios del Dr. Collins demuestran por qué necesitamos más detalles, para asegurarnos de que la letra de la ley no permita que se viole el espíritu de la misma».
«Ahora sabemos con certeza que el Dr. Fauci y el Dr. Collins han estado engañando al pueblo estadounidense durante meses», dijo la representante Cathy McMorris Rodgers (R-Wash.), la principal republicana del comité, en una declaración reciente. “Los documentos publicados muestran que los NIH de hecho estaban financiando la investigación de ganancia de función en China a través de EcoHealth Alliance. También está claro que hay fallas significativas en los NIH a la hora de supervisar adecuadamente la financiación de las subvenciones».
EcoHealth no ha respondido a las solicitudes de comentarios.
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