El expresidente Donald Trump afirma que el actual conflicto entre Rusia y Ucrania fue alimentado en parte por los intentos de sus oponentes políticos de impedir que asumiera el cargo.
«En lugar de tener una mejor relación con Rusia, como trabajé para construir, ahora tenemos una guerra por poderes con Rusia, alimentada en parte por los persistentes humos del delirio del Rusiagate. Ucrania ha quedado totalmente devastada. Ha muerto un número incalculable de personas. Y bien podríamos acabar en la Tercera Guerra Mundial», escribió Trump en un artículo de opinión publicado el lunes en Newsweek.
En él, compara las acciones emprendidas para impedir que asumiera el cargo hace siete años con las que afronta hoy. El Sr. Trump explicó cómo las falsas afirmaciones de que la injerencia rusa le hizo ganar la presidencia en 2016 han tenido efectos reverberantes que aún se sienten hoy.
«Por salvaje y cruel que fuera el engaño de Rusia para mí, mi familia, mi personal y tantos espectadores inocentes, las verdaderas víctimas fueron el pueblo estadounidense», escribió.
«La destrucción que este engaño causó a Estados Unidos es casi incalculable. Subvirtió nuestra democracia, amenazó nuestra seguridad y puso en peligro nuestra libertad».
«En un momento crítico en el que deberíamos haber reducido las tensiones con Rusia, el engaño sobre Rusia avivó la histeria colectiva que contribuyó a empujar a Rusia directamente a los brazos de China», escribió, y añadió que el resultado es la guerra en Ucrania que se ve hoy.
«Debe haber un ajuste de cuentas»
En 2016, Trump se presentó con una plataforma que desafiaba a la clase dirigente, y afirma que ésta tomó represalias con toda su fuerza.
«Prometí detener la inmigración ilegal masiva, poner fin a los acuerdos comerciales globalistas, acabar con la venta de nuestro país a la China comunista, plantar cara a la burocracia permanente y a los medios de comunicación corporativos, y acabar con la adicción neoconservadora a las guerras extranjeras interminables», escribió.
«En respuesta, una cábala no elegida en las altas esferas de nuestro gobierno, en concierto con la candidata que habían elegido, Hillary Clinton, y sus aliados en los medios de comunicación, lanzaron el intento de golpe de facto conocido como el engaño de Rusia».
Incapaz de echarle del cargo, el resultado fue una «campaña masiva de desinformación y una persecución sin ley durante tres años, basada en la monstruosa mentira de que yo era un traidor a mi país», escribió el Sr. Trump.
Hizo amplia referencia al Informe Durham, una investigación del abogado especial John Durham sobre las actividades de inteligencia en torno a las elecciones presidenciales de 2016 (pdf).
«El Informe Durham demuestra que las figuras clave implicadas sabían desde el principio que la teoría de la conspiración de la Colusión Rusa era una mentira. El FBI lanzó su cacería de brujas sin una pizca de pruebas legítimas, y cuando se encontraron con información exculpatoria una y otra vez, la encubrieron y mantuvieron el engaño», continuó el Sr. Trump.
Cita las conclusiones del informe según las cuales dirigentes como el entonces director del FBI, James Comey, el presidente Barack Obama, el vicepresidente Joe Biden y la rival presidencial, la Sra. Clinton, eran conscientes del abuso de poder, y que «quizá lo más peligroso de todo es que el engaño sobre Rusia normalizó el uso de las fuerzas policiales como arma contra los enemigos políticos de la izquierda».
El Sr. Trump no menciona los problemas actuales a los que se enfrenta por parte de las fuerzas de seguridad federales, pero alude al hecho, escribiendo «están interfiriendo en las elecciones de 2024 ante nuestros propios ojos».
El Sr. Trump sigue enfrentándose a un aluvión de acciones legales relacionadas con su mandato, incluidos dos casos que dirige el abogado especial Jack Smith, del Departamento de Justicia. Uno de ellos, en el que el Sr. Trump se ha declarado inocente, se refiere a documentos clasificados almacenados en su residencia de Mar-a-Lago, que él sostiene que desclasificó como presidente. El otro caso está relacionado con la violación del Capitolio del 6 de enero de 2021.
«Debe haber un ajuste de cuentas. La rendición de cuentas está ahora en manos de los votantes», escribió el Sr. Trump. «El Informe Durham ha dejado muy claro lo que está en juego, y ahora la elección es nuestra: o el Estado Profundo destruye América, o nosotros destruimos el Estado Profundo».
Censura
La manipulación no sólo procede del gobierno federal, sino también de las grandes empresas tecnológicas, escribió.
«Como han demostrado los Archivos de Twitter, el establishment de la Izquierda Radical también utilizó el Engaño de Rusia para atacar la libertad de expresión. Construyeron un extenso régimen de censura nacional con el pretexto de combatir la llamada ‘desinformación rusa’, que rápidamente definieron para incluir cualquier contenido que no les gustara», escribió el Sr. Trump.
Cabe destacar que Twitter prohibió permanentemente el acceso al Sr. Trump el 8 de enero de 2021, cuando aún se estaban conociendo los sucesos del 6 de enero de 2021. El presidente había publicado un video en el que instaba a la paz a las personas reunidas en el capitolio de la nación el día de la irrupción, pidiéndoles que se fueran a casa, y el video fue suprimido rápidamente mientras el Sr. Trump era vetado temporalmente en Twitter y Facebook. Al día siguiente, Facebook bloqueó su cuenta hasta el 20 de enero, día de la toma de posesión, y Twitter le siguió con una prohibición permanente al día siguiente.
Recientemente, una demanda interpuesta por los estados de Misuri y Luisiana reveló que el gobierno federal, bajo la Administración Biden, había dado instrucciones a las empresas de medios sociales sobre cómo y a quién censurar. El caso está siendo recurrido por la Administración Biden.
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