Un funcionario de la Casa Blanca dijo que Washington «tomará medidas» si Pyongyang prueba un misil de largo alcance o un misil nuclear, y agregó que Estados Unidos estaría «extraordinariamente decepcionado» si esto ocurriera.
Estados Unidos tiene «muchas herramientas» en su conjunto para tratar con Corea del Norte, dijo el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Robert O’Brien, en una entrevista el 29 de diciembre con ABC News. Washington estaba preocupado por las recientes amenazas de Pyongyang de un «regalo de Navidad», dijo, y señaló que todavía siguen de cerca la situación.
«Nos reservaremos el juicio, pero Estados Unidos tomará medidas, como lo hacemos en estas situaciones», dijo O’Brien. «Si Kim Jong-un adopta ese enfoque, estaremos extraordinariamente decepcionados y demostraremos esa decepción».
A principios de diciembre, Pyongyang amenazó a Estados Unidos con un posible «regalo de Navidad«, diciendo que la administración Trump se estaba quedando sin tiempo para salvar las negociaciones nucleares. Recientemente, Estados Unidos y Corea del Sur han llevado a cabo simulacros de infiltración en una instalación enemiga, en medio de las tensiones que generó Corea del Norte con su plazo de fin de año establecido de unilateralmente.
Tanto las administraciones republicanas como demócratas han intentado tratar con Corea del Norte sin éxito a lo largo de los años, señaló O’Brien, agregando que el liderazgo actual está adoptando un nuevo enfoque.
“El presidente [Donald] Trump tomó una táctica diferente con la diplomacia personal. Y, hasta ahora, hemos tenido cierto éxito”, dijo. “Kim Jong-un prometió desnuclearizar la península coreana. Queremos que cumpla con ese compromiso».
«Pero, si no lo hace, tenemos otras herramientas en la caja de herramientas, como Estados Unidos, y las utilizaremos según sea necesario», continuó.
Hace semanas, Stephen Biegun, enviado especial de Estados Unidos para Corea del Norte, dijo que Estados Unidos no aceptará el plazo unilateral de Pyongyang ya que el régimen comunista ha buscado concesiones en las conversaciones nucleares. Biegun dijo que Washington está abierto a conversaciones sobre desnuclearización e instó a Pyongyang a regresar a la mesa de negociaciones.
Las conversaciones nucleares entre Estados Unidos y Corea del Norte están estancadas desde que una cumbre celebrada en febrero finalizó sin que se alcanzara ningún acuerdo. Kim y Trump se han reunido tres veces desde junio de 2018.
La administración actual no le está dando a Corea del Norte las concesiones que demanda, le dijo Peter Huessy a The Epoch Times previamente , consultor senior de defensa y director de estudios de disuasión estratégica en el Instituto Mitchell para Estudios Aeroespaciales.
«El Norte está jugando el juego de «veamos si podemos golpear a Estados Unidos y obtener concesiones porque eso es lo que hacen», dijo. “Son como un matón o una especie de pandilla criminal que extorsiona a la gente. Nosotros [Estados Unidos] simplemente ya no estamos jugando al juego de extorsión”.
La semana pasada, Trump desestimó la amenaza de regalos navideños de Corea del Norte y dijo que Estados Unidos «lo enfrentará con mucho éxito».
Mientras tanto, varias imágenes de satélite tomadas el 19 de diciembre por Planet Labs muestran la finalización de una nueva estructura en la fábrica de 16 de marzo ubicada cerca de Pyongyang, donde se cree que Corea del Norte está desarrollando y fabricando vehículos utilizados como lanzadores móviles para misiles balísticos de largo alcance.
O’Brien dijo que Trump ha trazado un camino para Corea del Norte si abandona su programa nuclear en el sentido de que «pueden tener un futuro extraordinariamente brillante con una gran economía». También dijo que Estados Unidos puede infligir «mucha presión» sobre Pyongyang
«Hay una verdadera oportunidad para Corea del Norte», continuó. «Ahora, ya sea que aprovechen esa oportunidad o no, tendremos que ver. Y si no la toman, Estados Unidos sigue siendo la potencia militar líder en el mundo».
China y Rusia propusieron recientemente que el Consejo de Seguridad de la ONU levante algunas de sus sanciones contra Corea del Norte, en lo que los países dijeron que era un intento de romper el actual estancamiento. Pero no está claro si Pekín puede convencer a Seúl y Tokio de que rompan filas de Washington, lo que ha dejado en claro su oposición de levantar esas sanciones y puede vetar cualquier resolución.
Hay algunos «canales de comunicación» entre Washington y Pyongyang «que están abiertos», pero O’Brien se negó en la entrevista a entrar en detalles sobre esa comunicación.
“[Kim] tiene dos caminos frente a él, tiene un camino glorioso para la gente de Corea del Norte donde podrían convertirse en Corea del Sur y ser un país muy próspero y muy rico, o hay otro camino que los lleva por el camino de las sanciones y el aislamiento y ser un estado paria «, dijo.
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