El comandante y oficial retirado de inteligencia naval y militar de Estados Unidos, Jesús Romero, reveló en una entrevista a The Epoch Times cómo opera la industria de la cocaína en Latinoamérica que apunta hacia Estados Unidos. Durante su carrera como oficial, Romero luchó contra la industria del narcotráfico en la región y ayudó a desmantelar una parte de la organización dentro de EE. UU.
Romero, de origen venezolano, ingresó a la marina de Estados Unidos en 1984 y se graduó de Ciencias Políticas en la Universidad de Norfolk State. Sin embargo, fue hasta 1992 que Romero se convirtió en oficial de inteligencia naval.
Fue comandante oceánico en Panamá de 1996 a 1999 y posteriormente en Hawái donde fue oficial de observación de China. En 2001, fue director de política para la fuerza de tarea conjunta y lideró conversaciones técnicas con China, Myanmar, Camboya, India, Corea del Norte y Vietnam.
Tras 37 años de carrera, Romero ha sido condecorado por las Fuerzas Armadas, la OTAN, la Marina y el Servicio de Defensa.
Romero fue testigo del caso criminal federal del Este de Texas contra Debra Lynn Mercer-Erwin, presidenta de la compañía Aircraft Guaranty LLC, quien se encargaba de suministrar aeronaves a los cárteles mexicanos y colombo-venezolanos para transportar cocaína de Colombia a Estados Unidos. El excomandante trabajó para desmantelar estas operaciones hasta agosto de 2022.
«Ella tenía a su disposición un número de brokers, que estaban bajo la disposición de su compañía en un pueblo que se llama Onalaska, que tiene menos de 3000 habitantes, y donde no hay un aeropuerto» explicó el excomandante, agregando que se trató de un hito histórico, «porque ese caso logra desmantelar [a] la organización adentro de Estados Unidos. Esa es la gran diferencia que nunca, nunca se había hecho un caso semejante».
El comandante en retiro explicó que Mercer-Erwin proveyó aviones con matrícula estadounidense para poder facilitar las operaciones de los cárteles de la droga.
«Si tú tienes un avión norteamericano y pasas por cualquier aeropuerto, prácticamente la gente que está en la industria aérea pasa la vista rápida de una aeronave con matrícula norteamericana», señaló Romero.
El fiscal federal Brit Featherston de Texas, explicó la razón: «En el mundo de la aviación, los aviones matriculados en Estados Unidos y con un número de cola ‘N’ son codiciados por estar debidamente examinados y ser de confianza para operar legalmente en todo el mundo».
«Mercer-Erwin sabía que muchos de sus clientes estaban en el negocio de las drogas ilegales y ocultó sus identidades y las fuentes de su dinero para obtener grandes beneficios», agregó el fiscal, luego, ella «se convirtió en blanqueadora de dinero cuando creó falsas ventas de aviones que en realidad no estaban a la venta para ocultar y mover el dinero de la droga».
Mercer-Erwin fue condenada a 60 años de prisión en mayo de 2023 por un jurado de Oklahoma City. Se le imputaron cargos por lavado de dinero, fraude y conspiración para fabricar y distribuir cocaína sabiendo que sería importada a Estados Unidos.
«Y ¿qué era lo que estaba pasando en ese momento en los últimos cinco o seis años? Es que los narcotraficantes por medio de brokers compraban aeronaves en los Estados Unidos, aún con su matrícula verdadera norteamericana y buscaban una manera de llevar esos aviones a México», agregó.
Romero explicó que una vez que los aviones de Mercer-Erwin llegaban a territorio mexicano, los cárteles de la droga mexicanos los enviaban a Venezuela, donde eran cargados con cocaína colombiana. Allí las aeronaves cambiaban de matrícula por dos razones, la primera para despistar a aquellos que estaban pendientes de las aeronaves y la segunda para evadir a las autoridades ante algún tipo de evidencia.
El excomandante dijo que las aeronaves una vez que habían sido cargadas volaban desde Venezuela a Guatemala y Honduras, y desde allí los cárteles de la droga controlaban el tránsito de la droga hacia Estados Unidos por territorio mexicano.
Los cárteles utilizaban este puente aéreo de Venezuela a Centroamérica, detalló Romero, porque les permitía traficar una mayor cantidad de cocaína en menor tiempo que si lo hicieran por vía marítima.
«[Con] la mayoría de la droga que sale de Colombia por medio de Ecuador y Venezuela. (…) los cárteles se organizan logísticamente usando embarcaciones en Ecuador. En Colombia salen las denominadas panga con dos o tres motores atrás y promedio cargan 1000 a 1200 kilos por envío. De Ecuador a Guatemala son unas escasas 1200 millas. Los narcos [tardan] 66 horas a cinco días, dependiendo del nivel de ley y orden presente en el Pacífico», detalló el oficial retirado.
Una situación muy distinta se da cuando la droga que sale por vía aérea.
«Es un poco más técnicamente avanzada que enviar por la parte marítima. (…) Un avión tipo Gulfstream Liner pueden cargar hasta 2500 kilos en cada envío (…) Son envíos que realmente duran desde el momento que los llenan de cargamento de droga a donde aterrizan en Guatemala, Honduras. Estamos hablando de simplemente tres horas y media a cuatro horas», resaltó.
Explicó que a pesar de que en la ruta de la cocaína participan varios grupos criminales los más sobresalientes son dos cárteles mexicanos: el de Sinaloa y el de Jalisco Nueva Generación, quienes acumulan la mayor parte del poder.
«Esos carteles tenían representantes tanto en Honduras como en Guatemala y cada vez que venía un cargamento, ellos se encargaban de la logística de la tierra, de la transportación, de cómo sacar a los pilotos, de corromper a a los gobiernos locales, los gobiernos estatales, el gobierno central. En fin, esta es una organización que tiene mucha experiencia y son los que más están envueltos en el trasiego de la droga en Centroamérica y en México», dijo Romero.
Con información de Pachi Valencia
Siga a Eduardo Tzompa en X: @JEduardoTzompa
No se pierda la segunda parte de este informe especial: Exoficial de inteligencia revela cómo opera la industria de cocaína en Latinoamérica que apunta a EE.UU.
Únase a nuestro nuevo canal de WhatsApp para recibir las últimas noticias al instante haciendo clic aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
