Un camión de 44 toneladas fuera de control fue detenido por un automovilista que descendió de su autmóvil para subirse sobre la cabina en movimiento mientras se habría camino en una autopista alemana.
El conductor del camión articulado había muerto al volante en la autopista A1 cerca de la ciudad de Colonia la noche del 8 de mayo, según informes locales.
La policía, los conductores de camiones y un miembro del público trabajaron juntos para detener el camión poco antes de que llegara a un tramo cuesta abajo de la carretera.
El camión solo se detuvo después de que un hombre de 43 años corrió a su lado, se subió al parachoques de una camioneta de la policía, rompió la ventana y abrió la puerta, todo mientras el camión se movía a unas 10 millas por hora.
El hombre, Matthias Erdmann, fue bautizado por la policía como un «héroe que merece una medalla», según RPOnline.
Erdmann vio al camión rebotando a lo largo del camino en su turno de noche. «Pensé, ¿qué está haciendo allí?», dijo. «Entonces vi, no hay nadie en el volante».
Otros conductores de camiones ya habían notado al camión y estaban formando un escudo de movimiento lento detrás para evitar que otros autos lo pasen.
Abandonando a su coche Kia Picanto en la autopista, Erdmann, corrió al lado del camión e intentó abrir la puerta, pero estaba cerrada.
Corrió de vuelta a su auto en busca de una navaja, condujo de regreso. Luego trató de romper las ventanas con un cuchillo, pero tampoco funcionó.
Mientras tanto, de acuerdo con Times, otro camión se había posicionado junto al camión fuera de control y el conductor intentó romper la ventana con un trípode, pero otra vez fue en vano.
Una furgoneta de la policía llegó y se posicionó delante del camión, intentando frenarlo y controlarlo. Ahora, armado con un martillo de emergencia, Erdmann se subió al coche de los oficiales y desde ahí finalmente pudo romper la ventana.
Una vez dentro, Erdman pasó por encima del cuerpo del conductor y puso los frenos. «Luego giré la llave y eso es todo», dijo a RPOnline.
«Tuvimos mucha suerte», dijo Erdmann, señalando que se habían detenido justo antes de la fuerte pendiente en Remscheid.
Solo después de que la prueba había terminado, Erdmann se dio cuenta de que se había cortado las manos en el cristal cuando se abrió camino.
Después de un viaje al hospital, siguió trabajando en su turno hasta las 6 de la mañana del día siguiente.
El periódico local The Kölner Stadt-Anzeiger, un periódico de Colonia, calificó al hombre de «héroe que evitó una catástrofe mucho peor».
Las autoridades no han revelado la causa de la muerte del conductor de 54 años, según el Times.
Dirk Pelster, jefe del difunto conductor de camiones, dijo al BILD: «Agradezco a los conductores que han ayudado a prevenir un desastre, y estoy muy triste por la pérdida de un empleado confiable y leal».
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