La oficina del gobernador de Florida, Ron DeSantis, dijo que el gobernador conversó con el presidente de In-N-Out Burger después que la cadena de comida rápida se viera obligada a cerrar varios de sus locales en California por las órdenes de vacunación contra COVID-19.
«Como habrán oído, In-N-Out cerró un par de locales en California debido a los requisitos del pasaporte de vacunas. Esto es lo que provocó la conversación sobre la apertura de locales en Florida», dijo el lunes la portavoz de DeSantis, Christina Pushaw, a los medios locales, añadiendo que DeSantis tuvo una «conversación productiva» con la jefa de In-N-Out, Lynsi Snyder-Ellington.
Pushaw indicó que In-N-Out tendría algunas dificultades para trasladarse a Florida, ya que los proveedores de la empresa están todos ubicados en la Costa Oeste.
«Por supuesto, Florida también tiene algunas de las granjas y ganaderías de mayor calidad del país y el gobernador habló de ello con el presidente de In-N-Out. Si pueden identificar proveedores para todos sus insumos aquí, lo que creemos que es posible, In-n-out (sic) podría expandirse a Florida», continuó Pushaw.
In-N-Out no ha respondido aún a una solicitud de comentarios sobre las declaraciones de Pushaw.
Las autoridades sanitarias de San Francisco y del cercano condado de Contra Costa, California, cerraron varios locales de In-N-Out después de que la empresa se negara a hacer cumplir las órdenes locales sobre la vacuna COVID-19.
«Nuestro establecimiento colocó de forma adecuada y clara la señalización para comunicar los requisitos locales de vacunación», dijo el mes pasado el director jurídico y comercial de In-N-Out Burger, Arnie Wensinger, en una declaración.
La empresa con sede en California no se «convertirá en la policía de la vacunación de ningún gobierno», dijo Wensinger antes de criticar la orden del pasaporte de vacunación del Departamento de Salud de San Francisco como «irrazonable, invasiva e insegura».
Antes de la conversación de DeSantis con Snyder-Ellington, el director financiero de Florida, Jimmy Patronis, envió una carta en un intento de atraer a la cadena de restaurantes a instalarse en Florida.
«En Florida, amamos a nuestros propietarios de negocios, empresarios y empleados», escribió Patronis en la carta, que compartió en Facebook. «Buscamos constantemente oportunidades para traer empresas a nuestro estado, para crear puestos de trabajo y mejorar nuestras comunidades. El clima empresarial aquí es perfecto, sin impuesto sobre la renta de las personas físicas, con bajos impuestos de sociedades, una mano de obra formada y una fantástica calidad de vida».
Los pasaportes y órdenes de vacunación son contrarios a la ley en Florida después de que DeSantis firmara una legislación y unas órdenes ejecutivas que los prohíben.
Fuera de California, In-N-Out tiene principalmente locales en el oeste de Estados Unidos, incluyendo en Arizona, Nevada, Utah y Colorado. La cadena también opera en Texas.
Pushaw dijo esta semana que DeSantis está «dispuesto a ayudar» a In-N-Out a encontrar los proveedores adecuados para hacer el traslado a Florida.
COVID-19 es la enfermedad causada por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino).
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