India y China libran guerra verbal por construcción de aldea china en territorio indio

Por Venus Upadhayaya
23 de enero de 2021 7:28 PM Actualizado: 23 de enero de 2021 7:28 PM

NUEVA DELHI—India y China emitieron declaraciones oficiales después que surgieron informes sobre una nueva aldea china en tierras indias en el estado de Arunachal Pradesh.

El gobierno indio dice que está vigilando todas las construcciones de infraestructuras chinas que se llevan a cabo en la frontera en disputa, mientras el régimen chino defiende sus construcciones argumentando que «nunca ha reconocido» a Arunachal Pradesh como parte de India.

Los chinos construyeron una aldea compuesta por 101 casas a lo largo del río Tsari Chu en el estado fronterizo, según la empresa de imágenes estadounidense Planet Labs. La construcción de la aldea se llevó a cabo en noviembre del año pasado, cuando India y China mantenían un tenso enfrentamiento militar en la región de Ladakh, en el extremo norte del Himalaya. La construcción es un asunto de gran preocupación para India, informó la televisión de Nueva Delhi (NDTV), el 18 de enero.

El ministerio de Asuntos Exteriores indio declaró el lunes en un comunicado de prensa que el gobierno es consciente de que los chinos están «aumentando» el desarrollo de infraestructuras en la región fronteriza por lo que está tomando las medidas necesarias.

«Hemos visto informes recientes sobre la realización de obras de construcción por parte de China en las zonas fronterizas con India. China ha emprendido este tipo de actividades de construcción de infraestructuras en los últimos años», dijo el ministerio de Asuntos Exteriores.

A continuación indicó que están tomando todas las medidas necesarias para proteger la integridad territorial y la soberanía de India y están intensificando el desarrollo de infraestructuras en el lado indio.

Por el lado contrario, el ministerio de Asuntos Exteriores chino reconoció la construcción en una declaración de prensa el jueves, pero dijo que no reconoce a Arunachal Pradesh como parte de India.

«La posición de China sobre el sector oriental de la frontera entre China e India, o región de Zangnan (la parte sur del Tíbet chino), es coherente y clara. Nunca hemos reconocido el llamado Arunachal Pradesh, establecido ilegalmente en el territorio chino», dijo la portavoz del ministerio de Asuntos Exteriores chino, Hua Chunying, en una rueda de prensa.

El valle del río Tsari Chu tiene un historial de enfrentamientos entre el Ejército de India y el Ejército Popular de Liberación (EPL) desde 1959 y hay zonas que forman parte del mapa oficial indio pero están bajo control chino.

La construcción de las 101 casas por parte de China no es legítima porque está en una zona en disputa y, según las normas internacionales, no se puede construir allí, dijo por teléfono a The Epoch Times el general de división retirado G.G. Diwedi, veterano de guerra indio, quien también sirvió en la región, añadiendo que India y China tienen varios acuerdos para regular la conducta en la frontera disputada.

«La cuestión básica es que en el territorio disputado no hacemos ninguna construcción permanente. Podemos patrullar porque nuestra percepción [de la frontera] es diferente, pero no hacemos ninguna obra de construcción», dijo Diwedi.

Un manifestante es detenido por la policía india durante una protesta contra la reclamación de China de seis distritos del estado de Arunachal Pradesh en Nueva Delhi el 25 de abril de 2017. (Chandan Khanna/AFP vía Getty Images)

Otro teniente general retirado indio, Kamal Davar, un veterano de guerra que también sirvió en la región durante su carrera y que reunió la Agencia de Inteligencia de Defensa de la India, dijo a The Epoch Times por teléfono que los chinos no hacen nada al azar y todo para ellos prolonga una estrategia a largo plazo.

«Ya en 2005, el embajador chino dijo que todo Arunachal pertenece a China. ¿Cómo nos puede decir eso? ¿Está uno gobernando el mundo? O es que sigue sufriendo el síndrome irracional del Reino del Medio. Los chinos tienen esa cosa de que son los dueños del mundo», dijo Davar, añadiendo que las contra declaraciones chinas reflejan su «engaño y desprecio» por las normas humanitarias e internacionales.

La noticia de la construcción de 101 casas surgió después de otros informes recientes sobre el asentamiento de chinos Han y de miembros tibetanos del Partido Comunista Chino en la frontera con India para promover su agenda expansionista en la región, según Nueva Delhi (NDTV).

«Al igual que utilizó a los pescadores en el mar de China Meridional, China utiliza los recursos civiles —pastores y ganaderos— como punta de lanza para inmiscuirse en las zonas del Himalaya patrulladas por la India», declaró a NDTV el Dr. Brahma Chellaney, analista geopolítico y destacado escritor sindicado.

Según Davar, «los chinos presentan constantemente métodos innovadores en la búsqueda de sus misiones estratégicas por cualquier medio, justos y sucios».

«Su modus operandi abarca medidas clandestinas que emplean a tibetanos y nómadas aparentemente inocentes en zonas cercanas a la frontera india quienes luego son utilizados para deambular por la LAC (Línea de Control Real) para obtener información», dijo Davar.

Una frontera históricamente compleja

Ninong Ering, exministro federal del gobierno indio y actual legislador de la asamblea legislativa estatal electa de Arunachal Pradesh, dijo por teléfono a The Epoch Times que el territorio de su estado siempre ha sido un objetivo de los chinos, porque lo consideran parte del sur del Tíbet.

«Los chinos están realmente [improperios], están realmente enfadados con nosotros porque dimos una especie de refugio a su santidad el Dalai Lama cuando vino a Tawang. Esa es la razón por la que siempre están en contra nuestra», dijo Ering, quien también fue miembro de la cámara baja del parlamento indio durante diez años.

En Arunachal Pradesh se encuentra el histórico monasterio de Tawang, el mayor monasterio budista de India y el segundo más grande después del Palacio de Potala en Lhasa, con el que estaba conectado. Pertenece a la escuela Gelug del budismo Vajrayana y cuando el Dalai Lama escapó a India en marzo de 1959, se instaló en el monasterio de Tawang durante un mes antes de reunirse con el gobierno indio.

Arunachal Pradesh tiene una frontera de 684 millas con China y tiene entre 20 y 25 puestos militares a lo largo de ella. Según Ering los chinos ya ocuparon algunas tierras indias en las últimas décadas por lo que es importante tener un control sobre su actividad en curso, y detener sus nuevas agresiones e intrusiones.

«Tiene que haber un control. Ahora no hay ningún control. Ellos siguen enfrascados en incursiones y siempre lo hacen porque no tenemos ninguna frontera en la frontera. Arunachal Pradesh es completamente selvático y no tiene carreteras», dijo. Los chinos ya han construido una red de carreteras al otro lado de la frontera, dijo Ering.

Como ejemplo, Ering citó la ciudad más remota de Arunachal Pradesh, llamada Anini, que está a 32 kilómetros del puesto militar indio más cercano y, desde este puesto, la Línea de Control Real LAC está a otros 100 kilómetros, que no están vigilados.

«Ahora, mientras aquí hay una brecha de 100 kilómetros, los chinos tienen ya construidas las carreteras, porque se puede ver a través de los [mapas] de Google que entraron directamente en el valle de Dibang y eso va a ser una amenaza muy grave para todos nosotros», dijo Ering añadiendo que el mundo debe saber lo que está sucediendo en Arunachal Pradesh.

«Así que hasta que no construyamos las infraestructuras, hasta que no construyamos las carreteras. Si el gobierno indio no construye carreteras, creo que podremos perder Arunachal», dijo Ering.

A su vez expresó su esperanza de que el recién elegido presidente, Joe Biden, apoye a India. «Esperemos que el presidente de Estados Unidos también se preocupe por lo que China está haciendo a India», dijo.

Personal del ejército indio monta guardia en el paso de Bumla, en la frontera entre India y China, en Arunachal Pradesh, el 21 de octubre de 2012. Según informan los medios de comunicación indios, los chinos han construido 101 casas, 2.5 millas dentro del territorio indio en una zona dentro de Arunachal Pradesh. (Biju Boro/AFP vía Getty Images)

Protestas contra la nueva aldea

Tras conocerse la noticia de la nueva aldea china en Arunachal Pradesh, estallaron las protestas contra China en el distrito de Upper Subansiri, donde se desarrolla la construcción en la remota región fronteriza.

Los pobladores marcharon con pancartas, gritando consignas a favor de India y en contra de China, informó NDTV. En las pancartas se podía leer «larga vida a India» y «Que se vaya China», según las imágenes y vídeos disponibles en los medios de comunicación.

Ering dijo que la población del estado es muy patriótica y que la región siempre ha estado bajo el «formato indio».

«La población es totalmente patriótica, el sentimiento nacional está ahí. Bharat Mata ki Jai (Viva la Madre India) y JaiHind (Victoria para la India) están siempre presentes en nuestras bocas. Así que somos completamente nacionalistas», dijo Ering, quien también ha escrito una carta al primer ministro indio, Narendra Modi, sobre la carretera china dentro del territorio indio en el territorio no controlado entre el valle de Debang y el LAC.

Por su parte el medio de comunicación estatal chino, Global Times, calificó de «exageración de los medios indios» y citó a un experto chino quien afirmó que los medios indios lo hacen para crear un sentimiento antichino en el país. A su vez indicó que la construcción dentro el «Tíbet del Sur» era para mejorar la calidad de vida de los habitantes de la frontera.

«China e India aún no han demarcado la línea fronteriza de esta zona. Así que no pueden acusar a China de construir un pueblo en el lado indio», dijo Qian Feng, director del departamento de investigación del Instituto de Estrategia Nacional de la Universidad de Tsinghua, a Global Times.

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